En el Siglo XVII la existencia de una clase dominante que cada vez acumulaba más capital. Y una clase opositora, que cada vez veían más lejos la oportunidad de acceder al poder político. Lo cual se puede inferir, que era una clase excluida; con suficiente riqueza pero sin la fuerza política y social, que permitiera crear posibilidades de éxitos. Optaron por desarrollar fundamentos teóricos socialistas, que les permitiera a mediano y largo plazo, invertir el panorama político. Con la misma fuente ontológica, crearon fundamentos ideológicos, y desarrollaron hipótesis, con la pretensión de ser comprobada en la praxis; para luego ser transformadas en teoría y promulgada como impregnadas de verdades. Porque estaban plenamente convencidos de que las ideologías, tenían que estar revestidas de verdades. A objeto de lograr aglutinar a una gran masa de gran magnitud, para ser direccionada como una fuerza social capaz de generar un cambio.
Crearon formas y contenidos conformados por elementos estructurales; donde se infiere, la existencia de un objeto conceptual ideal, que implicaba la existencia de un objeto físico. Que al confrontarlos con la praxis, obligaba a la destrucción para lograr lo deseado fundamentado en los conceptos ideológicos. Como si se construyera un edificio, seleccionando la forma ideal para ciertas capacidades individuales, ignorando el colectivo. Confrontando con la realidad, sobre la existencia de materiales, mano de obra y del espacio donde deseaban construir; luego desarrollaban el proyecto. En caso que no existiera el espacio adecuado; seleccionaban el sitio y destruían las estructuras e infraestructuras, que impedían lograr el objetivo. Para luego, hacer un estudio sobre la resistencia del suelo. En caso, que no resistiera; corrían el riesgo de perderlo todo y en el último caso, desarrollaban estudios adicionales; la misma metodología que utilizaba el contrario.
Las estructuras conceptuales ideadas conformadas de elementos comunes y diferencias. Donde las comunes, eran fundamentales para promover diálogos de convivencia y las diferenciadas, para fomentar las conciliaciones o las negociaciones. El fundamento ideológico socialista más significantes, fue la "Luchas de Clases" Lo cual se infiere, como con la pretendida intención, de una confrontación entre proletariados y la Clase Dominante. Modificando el fundamento ideológico, por una lucha de clases entre patronos y proletariados. Los fundamentos ideológicos fueron ajustados, tomando como base los estudios desarrollados por Marx, sobre los medios de producción. Esto ha originados grandes discusiones y en el Manifiesto Comunista, se le dio al Socialismo, el carácter científico. Justificado, por el método de investigación deductiva. Y según la escala jerárquica del concepto, se deduce que El Socialismo fue conceptualizado en sentido general.
En Venezuela, al referenciarlo en la realidad sensible; no se trata de enfrentamientos entre sistemas contradictorios; como una lucha de clases. Una parte, es un sistema mixto, inspirado por la derecha política, que no reconoce a la otra «que exacerba lo humano» y la menosprecia; porque se considera como El Todo. Los límites de bordes están en función de las capacidades, habilidades y destrezas individuales. Y para ello, aprovechan las oportunidades, para tratar de utilizar todas las herramientas de última generación disponibles. Manejan la "Ley de Contrarios" al calificar al contrario como malo, para que se deduzca que ellos son: el contrario bueno. Por lo tanto, se reconsidera como un acto de manipulación contradictoria y no una mentira.
En Venezuela, al intentar estudiar el Socialismo del Siglo XXI. Lleva a identificarlo con un alto nivel de complejidades. Impactadas por variables exógenas, que han transformados y siguen transformando estrategias en tácticas; con el objetivo de frenar la revolución bolivariana. Con pocos logros, que provocan desviaciones, con alto costo social, económico y político; dejando heridas difíciles de saturar. Se generan también situaciones, que para el común de los ciudadanos, son incomprendibles. Tales, como el comportamiento de un sector permanentemente involucrados, actúan; como observadores, presto a desvirtuar lo acontecido, con el pretexto de tildarlos e identificarlos como los contrarios; productos de una siembra psíquicas, por un incesante bombardeo mediáticos internos y externos. Antes los hechos, actúan con la intencionalidad de aparentar como actos que se generan, en forma espontáneas.
Un concepto específico en proceso de construcción. En base a la inclusión de las clases más desposeídas, en un proceso de igualdad. Una gran deuda acumulada y a pesar del gran esfuerzo que se ha realizado; todavía, falta mucho que hacer. Se infiere, que cuando las clases desposeídas, tengan un nivel aceptable se promoverá un crecimiento equilibrado favoreciendo a toda la población. Al volver a tomar como ejemplo, la construcción de un edificio, se requieren: proyectos, recursos, espacio, resistencia del terreno y servicios. Luego se adquieren: materiales, mano de obra y equipos, facilitando las ejecuciones; para satisfacer necesidades de la parte posible, de un colectivo. Mientras que las incapacidades físicas, se trata de preservar el entorno y preservar lo humano.
En ambos lados de la calle, al leer y escuchar lo que acontece; donde la mayoría de los pueblos, continuamente hacen la siguiente pregunta: ¿Que es el Socialismo del Siglo XXI? Y la repuesta se hace esperar y al final no se concreta. Esto lleva a una profunda reflexión para estructurarla conceptualmente. Donde las manifestaciones socialistas y comunista en el pasado, fueron atacadas sin clemencias. Originada por los ataques de medios comunicacionales, provocando un constante rechazo; con las mismas herramientas que actualmente se utilizan para combatir al Socialismo del Siglo XXI. Y son muchos los estudiosos que pretenden fundir el Socialismo del Siglo XVII, con el Socialismo del Siglo XXI. A sabiendas, que los conceptos a través de los siglos, se profundizan.
Para conceptuar el Socialismo del Siglo XXI y lograr una situación de convivencia. Es menester definir con el contrario los elementos comunes y cultivarlos. Y posteriormente, dirimir las diferencias mediante conciliaciones o negociaciones. En ese momento, se está en la capacidad de conceptuar el Socialismo del Siglo XXI, como un sistema político donde la condición humana es preponderante. Y se puede inferir, que solo en el cultivar de los elementos conceptuales comunes, se logra la Felicidad Suprema.