No voy a nombrar a los declarantes de oficio, que casi a diario salen a robar cámara diciendo lo que se les ocurre, tenga pertinencia o no, viabilidad o no, son personajes de la derecha que buscando afanosamente figuración porque casi seguro pujan para aparecer en lugares llamados salidores de las listas, para la elección de diputados que se realizará este año.
Veamos una de ellas: "El gobierno debe dar pasos para lograr acuerdo nacional" como si apenas Maduro lograra el triunfo no hubiese abierto las puertas de Miraflores para un diálogo al que concurrieron hasta que les dieron la orden de levantarse y darle una patada a la mesa, ahora bien, ¿a qué le llaman acuerdo?, ¿A otro Punto fijo?, ¿a las llamadas perversas coaliciones de la cuarta que resultaron un vulgar reparto de la torta del Estado, basado en cargos burocráticos, desde ministerios hasta embajadas y prebendas, tales como licencias de importación, contratos millonarios para obras que por lo general quedaban inconclusas y eran fuente de la más profunda corrupción?, con ese acuerdo se acuesta y se levanta buena parte de la derecha venezolana y como no se les da, recurren a lo que hemos vivido, devenido en tragedias, muchas de las cuales aún siguen arropadas por la impunidad.
Esa estrategia de violencia fue también mortero vanado, y entonces recurrieron a lo que está en pleno desarrollo que es la guerra económica con sus vértices de acaparamiento, contrabando, especulación desenfrenada, con la cual creyeron repetir lo del Chile de Allende que tampoco les ha dado resultado, en una demostración de que no terminan de aceptar que este pueblo ha cambiado y que ello quedó suficientemente demostrado cuando resistió heroicamente el paro petrolero, donde aprendió a hacer colas estoicamente y en perfecto conocimiento de quiénes son los causantes de esta práctica disfuncional, a que se nos somete en búsqueda de soliviantar al pueblo, creyendo que por esa vía van a lograr saqueos y acciones de calle que terminen derrocando al presidente.
Ya vislumbran un nuevo fracaso y entonces recurren a muletas trayendo a personajes que fueron presidentes de sus países y protagonistas de fracasos que nadie niega, y con lo cual confirman su condición de neoliberales, capitalistas y dejan claro cuál sería el tipo de modelo que establecerían en el país de llegar al poder por cualquier vía.
Mientras, el gobierno les planta pelea con la constitución en la mano y tomando medidas claras y contundentes, pero además por la vía comunicacional, logrando revertir la especie de que la escases es propiciada por él, pues ha demostrado a lo largo y ancho del país que los actores de la guerra económica son opositores.
Por otro lado se anuncia que el problema de la escases de leche será minimizado con la llegada al país de 14 mil toneladas de leche en polvo, es decir 14 millones de kilos y a ese cargamento debe hacérsele un seguimiento extremadamente efectivo a fin de que no vaya buena parte de esos kilos a ser desviados por el bachaqueo interno y externo, como ha sucedido con la que aquí no se consigue, pero sí en el vecino país porque las mafias han burlado los controles o porque algunos controladores se dejan tapar sus ojos con buenos fajos de billetes.
Sería muy negativo para la revolución, con consecuencias impredecibles para los resultados electorales de este año, que esa leche y otros productos sigan esfumándose de los anaqueles venezolanos y aparezcan como por arte de magia en Colombia.
En medio de todo esto y porque en su discurso en la AN, el presidente después de anunciar las medidas que dejaron a la derecha sin argumentos, pidió, como buen cristiano, la ayuda de Dios con la frase: "Dios proveerá", no faltó quien, incluido el Cardenal, saliera a decir barbaridades entre ellas que Maduro pretende ser Dios, lo cual no es sino una interpretación sesgada de una invocación divina para que ayude a los venezolanos a seguir por la senda de mejorar las condiciones de vida y defender los logros que aliados del demonio nos quieren arrebatar.-
Ahora les ha dado por pretender involucrar a connotadas figuras de la Revolución vinculándolas con el narcotráfico, lo acaban de hacer con Diosdado, lo cual da risa y lo que logra es aumentar en el pueblo la certeza de que en esta guerra que nos tienen planteada vienen con todo y desde diferentes frentes, también para ello estamos preparados.