Camarada Nicolás Maduro:
En tu programa de los martes por VTV (14/04/15) abriste la posibilidad de un debate y nos solicitaste como pueblo y como revolucionarios opinar, reflexionar, hacer aportes. Como revolucionario chavista, bolivariano y socialista, patriota antimperialista expongo algunas modestas opiniones que pueden agregar y enriquecer el debate.
La lucha apenas comienza, la derrota al imperio en Panamá debe rematarse, como en la faena taurina, porque la amenaza no ha cesado. Si ganan en las elecciones los republicanos –puras joyas se están lanzando, fascismo puro, guerreristas sedientos de sangre– hay que prever esa circunstancia y prepararse para todas las formas de lucha.
América Latina y el Caribe, sus pueblos y gobiernos, le propinaron, como nunca antes, una contundente derrota al imperio en la persona de un presidente Obama que se mostró débil y vacilante, pero en la batalla de Panamá no mataron al imperio, está herido pero sigue vivo.
Claro no es ahora fácil agredir a Venezuela sin tocar a las demás naciones del continente. Serían muchos enemigos juntos y ni por mucho imperio que sean los yanqui correrían ese riesgo. Si el pueblo de Corea en 1953, el pueblo cubano en 1961 y el pueblo vietnamita en 1975 derrotaron al todopoderoso ejército norteamericano y dejaron en el camino más de 150 mil cadáveres, ¿qué no hará la Patria Grande en lucha contra ese monstruo?
Si destruyeron a Irak, Libia, Siria, Afganistán, ¿qué no estarían dispuestos a hacerle Venezuela para quitarle su petróleo y riquezas naturales, tratar de asesinar al Presidente Maduro y destruir la Revolución Bolivariana?
Pero los venezolanos, los cubanos, los ecuatorianos, los bolivianos, los nicaragüenses y todos esos maravillosos pueblos son huesos muy duros de roer, eso lo sabe el imperio, y contra eso es que van a enfrentarse no contra un solo país o un solo líder aislado como el camarada Salvador Allende. Si la correlación de fuerzas los hubiese favorecido en Panamá, la situación hoy en Venezuela sería de pre invasión. Preparémonos pues, tenemos líderes superiores a los de ellos, y el más grande estratega militar del continente y quizás del mundo, el que dirigió la derrota de los mercenarios en Playa Girón en 1961, el de la crisis de los misiles atómicos de 1962, quién dirigió las operaciones y la aplastante derrota del ejército surafricano en Angola, el Comandante Fidel Castro.
¿Podemos imaginar un gran Estado Mayor Político Militar donde estén Fidel Castro, Raúl Castro, Daniel Ortega, Nicolás Maduro, Evo Morales, Lula Da’ Silva, Serén y otros grandes estrategas políticos y militares dirigiendo la defensa contra la agresión norteamericana a Venezuela y otros países de América?
El imperialismo debe, entonces, pensar muy bien lo que piensan hacer, por muy locos, sicópatas y desesperados que sean sus líderes republicanos, los del tree party, del ejército y la CIA. Cuba en Panamá quemó sus naves por Venezuela por si había dudas por aquello de la zanahoria y el garrote, es decir, con Cuba no cuenten con su "neutralidad" para una locura como esa, ella está amarrada a Venezuela por un amor tropical, estratégico, ideológico, martiano/bolivariano/chavista que los gringos ni entienden ni sienten.
Nuestra estrategia debe ser la lucha por la paz, bandera suprema de nuestros pueblos. La campaña mundial por la derogatoria del infame Decreto debe continuar con otra redimensión, pasar a una etapa superior, mundializarla, con la paz por delante. La millonaria recolección de firmas patriotas y antimperialista hay que transformarla en una nueva forma de lucha, internacionalizarla, apelar a nuestros amigos y camaradas de todos los movimientos sociales y políticos del continente y de otros continentes, el Foro Social Mundial, Los Sin Tierra, el aguerrido movimiento zapatista y mil más por todo el continente. Crear un gigantesco movimiento de solidaridad internacional con Venezuela. Ir a todos los foros internacionales, parlamentos nacionales, regionales, alcaldías, concejos municipales. Mover a los medios alternativos y comunitarios en función de la campaña antimperialista. Hacer de la lucha mediática una lucha de nueva dimensión. Aprovechar las enseñanzas que dejó la utilización de las redes sociales. Quitarle ese espacio a la derecha en Venezuela y el mundo.
Se debe mantener en la calle al pueblo permanentemente movilizado, no dejar esos espacios, levantar las banderas de la unidad de todo el pueblo y fortalecer la alianza revolucionaria del Psuv/ GPP/Movimientos Sociales. Este año deberá ser el de ampliar el poder con los partidos de la izquierda con presencia de cuadros claves en el Gobierno. El aporte electoral de la izquierda revolucionaria a la Revolución Bolivariana es muy importante y debe ser considerado en momentos tan delicados como los que se viven en Venezuela y llevar muchos de sus mejores cuadros, los mejor formados políticamente, los de dilatada experiencia y sabiduría a la construcción del proceso. Hay que quebrar esa visión sectaria que excluye a hombres y mujeres de la izquierda y la vanguardia revolucionaria, los partidos del GGP y abrir el gobierno para aquellos que pueden hacer grandes aportes políticos. Una decisión de esa envergadura fortalecería aún más a nuestra Revolución y a nuestro Presidente, el camarada Nicolás Maduro. Dejar a un lado el mesianismo, pensar que la revolución comenzó en 1998 y negando las luchas revolucionarias de todo el siglo XX.
Estas son algunas reflexiones e ideas para el debate que planteó el Presidente Maduro en su programa semanal de los Martes con Maduro este martes 14 de abril aniversario 2º de su arribo al poder.