Para que mis compatriotas venezolanos conozcan a profundidad el temple de Simón Bolívar, aquí referiré algunos casos que nuestro héroe tuvo que sortear para llegar a ser nuestro Libertador.
Acababa de cumplir los 24 años de edad, septiembre de 1807, cuando en un pleito por unas tierras, Antonio Nicolás Briceño, en San Mateo, Venezuela, dispara tres veces contra Bolívar, pero ninguno de ellos da en el cuerpo de Don Simón.
A comienzo de julio de 1812, Domingo de Taborda lleno de ira, responsabilizando a Bolívar por la pérdida de la Primera República, en un acto público en Puerto Cabello, Venezuela, desenvaina su espada y trata de agredir a Bolívar; impidiéndolo algunas de las personas presentes.
En abril de 1813 fue detenido el sacerdote navarro, Fraile Capuchino Pedro Corella, en Las Palmas, Colombia, por instigar a sus feligreses contra la vida de Simón Bolívar, y en Tunja permanecerá preso durante 18 meses. Liberado, en Bogotá a fines de 1814, sigue arremetiendo contra la vida de Bolívar desde el púlpito y en todo tiempo y lugar, llamándolo apóstata y pidiendo su muerte. Otra vez detenido, Bolívar le concede una entrevista sin poder convencer al sacerdote de la idea de pedir su muerte.
Con pérdida de la llamada Segunda República en 1814, se desatan una serie de enemistades solapadas entre sus oficiales, quieren borrarlo del mapa alegando que el causante de aquello era el propio Bolívar, se decía que Bolívar debía desaparecer para siempre; y que país debía dividirse en dos repúblicas. Entre los agitadores de estas ideas absurdas y extremas se hallaban los venezolanos, Antonio Mariño, Juan Bautista Arismendi, José Francisco Bermúdez, José Félix Ribas el tío político de Bolívar y el curazoleño Manuel Carlos Piar
En Carúpano, Venezuela, en septiembre de 1814 cuando Bolívar se escapa de la prisión de ese puerto para abordar un barco salvador, el general Bermúdez y José Félix Ribas, indignados lo persiguen con fines siniestros. Luego el general Piar también quiso matarlo en el mismo puerto, y se salvó porque en ese momento había salido del sitio que le habían señalado.
En la noche del 9 al l0 de diciembre de 1815, en Kingston, Jamaica, el esclavo Pío sobornado con dinero por Salvador Moxó atenta contra su amo, Bolívar, pero creyéndole dormido en la hamaca asesta dos puñaladas mortales al venezolano Félix Amestoy, que allí entonces reposa.
Ocurre en marzo de 1816 en Los Cayos, Haití, donde el violento e intrigante oficial Mariano Montilla Padrón, tilda a Bolívar de cobarde, y trata der agredirlo con intención de darle muerte, lo que en último momento es impedido por intervención de terceros. También en dicho lugar el corsario Luis Aury, de nacionalidad francesa, en secreto trama un intento de asesinato contra el caraqueño, atentado que es descubierto a tiempo.