El neo- esclavismo tiene un carácter económico. Y en el mundo dialectico nos cuesta conseguir quien dice la verdad, soy optimista hacia el futuro, pero es difícil con éste equipo de gobierno que preside el Señor y dirigente sindical Nicolás Maduro Moros, todos jugamos a la imperfección, pero, carecemos de fuerza conciliatoria hacia el pueblo.
El efecto colonial nos está abrazando, cambiaron la imagen de Cristóbal Colón, por el de Guaicaipuro, un lugar ya avasallado por la historia y que jamás nos hablará de libertad del espíritu y del guerrero indígena, es un mensaje encriptado donde el poder aburguesado de la izquierda está marcado por el militarismo venezolano.
Hay que recuperar a la patria, hay que acabar con el simbolismo y expresarnos con la verdad. La socialdemocracia y los ingleses, están destruyendo nuestra conciencia y no nos dejan escoger lo que es mejor para nuestro municipio, ya todo viene preparado desde la cúpula del poder, es el momento de resaltar el nacionalismo heredado por los forjadores de la patria.
Es necesario generar el empoderamiento, la autoestima y la energía para salir de la postración y lograr que el pobre y el pueblo sea sujeto de su propia andadura, ya basta de crear el ocio y de expropiar, lo que no se tiene que expropiar.
Las colas, viene creando conflictividad y descenso en la energía social, aumenta el desencanto y la cohesión social se pulveriza, necesitamos un orden social más justo y dejemos atrás la cultura materialista, vayamos al trabajo creador.
El socialismo creado por el Comandante Hugo Chávez F rías está llamado a la liberación del hombre, es histórico porque todos los hombres latinos estamos involucrados en esa realidad, él, lo llamó Socialismo del Siglo XXI. La oposición venezolana petrifica la democracia y se sumerge en las instituciones socialistas para sumergirlas y destruirlas, algunos la llaman Guerra Económica, toda una falsedad.
La conciencia socialista, debe mostrarnos la realidad del país. Colapsamos por la ineficiencia de los ejecutivos y directores institucionales, éste simulacro electoral nos reflejó la otra Venezuela que no queremos, somos de Chávez, no corruptos y lisonjeros del poder. Conozco en el Municipio Rafael Urdaneta a más de cincuenta chavistas que no votaron, tienen sus razones, algunos personeros del gobierno tienen la obligación de averiguar ésta gran realidad.