La cooperación entre los diferentes países que integran América Latina y sus vecinos, en cuanto a la unificación en materia económica, salud, cultura, política exterior, alianzas sobre derechos humanos y los procesos de paz en la región.es de suma importancia, si tomamos en cuenta las declaraciones a diarios del comando sur de los Estados Unidos De esta manera, América Latina y la Cooperación Sur – Sur. (CSS), Mercosur (Mercado Común del Sur), el Alba (Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América), y Unasur (Unión de Naciones Suramericana), son el producto de diferentes políticas y visiones los cuales van a desarrollar un mercado integrador y con grandes desafíos positivos en América del Sur, ajustando mecanismos para consolidar las relaciones comerciales y fortaleciendo de manera integral políticas que conlleven de manera práctica una visión continental, con la finalidad de crear una alianza económica, y así reflejar los pactos y negociaciones entre las distintas posiciones que conforman este bloque regional.
Esta representación como Mercosur, El Alba, y Unasur, despliegan repuestas determinantes y divergentes, en función de una confederación latinoamericana y, que históricamente han caracterizado los intentos de regionalismo con la finalidad de unificar un solo componente es decir una gran nación y, que esto sea un paso definitivo en función de la integración. Aunque la relación en el plano internacional con los Estados Unidos de Norte América, debe ser indispensable siempre y cuando se respeten los intereses de cada país, principalmente en materia de soberanía, pero hay que tener en cuenta algo muy importante y, es el papel que juega el gigante del sur, como lo es Brasil a nivel regional y lo que representa en cuanto a la generación y coordinación de políticas macroeconómicas.
Aunado a todo este esfuerzo en común por todo los países asociados a este bloque regional, presenta puntos importantes y fundamentales como la libre circulación de bienes, servicios y producción, igualmente establecer aranceles y políticas de comercio común entre los estados.
De tal manera en pleno siglo XXI, la relación entre Estados Unidos y este bloque regional, se han vuelto cada vez más complejas y esto es debido al giro que ha dado la izquierda en la mayoría de los países de América del Sur, donde se han consolidados gobiernos progresistas que han roto con la imposición del consenso de Washington por implantar una agenda neoliberal, como es el caso de México, Chile, Perú y Colombia y varios países centroamericanos y del Caribe
Aun con este avance el ALBA en un claro desafío a la propuesta neoliberal el cual fue concebida como una opción para combatir un modelo contra-hegemónico impuesto por los centros de poder, en este sentido, se puede determinar que el Alba no solo se opone políticamente a la hegemonía imperial, sino también a imposiciones que van en contra de los intereses de los pueblos. Esta idea si se quiere está inspirada por los ideales bolivarianos en solidaridad con los estados de América Latina y el Caribe, y con un proyecto político claro y tangible sobre todo en lo económico para luchar contra la pobreza y, la búsqueda de un mejor entendimiento para hacer una contraposición con la economía neoliberal como una alternativa bajo los parámetros de la unión Latinoamericana.
De tal manera el impulso de la Alianza Bolivariana para las Américas, la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) y MERCOSUR son algunos ejemplos de los esfuerzos a nivel de la región que se está desarrollando en estos momentos, con el objetivo de establecer la unificación y la ayuda que de una u otra forma se le puede dar a los países que están padeciendo los embates de la pobreza extrema y combatir el modelo capitalista impuesto por Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y las Empresas Transnacionales.