Esos mismos que ayer celebraban cada 27 y 28 de febrero como días patrios, y asumían los hechos sucedidos en 1989 como espontáneos y toda una rebelión popular, hoy señalan con el mismo tenor de los dirigentes de AD de la época, que quienes saquean por hambre hoy son todos unos criminales, que no tienen ninguna razón para, después de no conseguir comida, reventar vidrieras de ópticas y tiendas de ropa.
No justifico ni una ni otra acción, pero es increíble la coincidencia de discursos de quienes se reafirman permanentemente como "enemigos". Recuerdo claramente, tenía 14 años, cómo en Propatria, la PM facilitaba los saqueos en los abastos para después ellos quedarse con una parte de la mercancía acaparada, y cómo la gente después de acabar con los abastos se fue al Centro Comercial Propatria, donde lo que había era electrodomésticos y ropa. Un pueblo arrecho y con hambre, no sólo se alimenta de comida, y en su camino se lo lleva todo, eso lo aprendimos en 1989, pero algunos prefieren desde sus oficinas con aire acondicionado, olvidar de donde vienen.
El gobierno ha logrado identificar a algunos actores políticos involucrados en los saqueos, como si en 1989 los grupos de izquierda de la época no hubiesen intentado capitalizar el fenómeno, de manera muy tardía, para hacer de ello una revolución.
Que lo anterior suceda en algún evento, poco tiene que ver con la rabia contenido del pueblo, que no encuentra ni en el gobierno ni en la Mud expresión refleja, y en descontento con las cúpulas, el pueblo se lanza a las calles a desarrollar la jugada final que pondrá en jaque a los actores políticos polarizados de manera forzada, ante un pueblo que reclama solucionas más que shows mediáticos que no resuelven nada.
Lo venimos diciendo desde Marea Socialista y desde Visor 360 Consultores: Hoy la polarización para la gente que hace colas, no representa solución real alguna a la salida de la crisis y aspira que surjan nuevas alternativas. Mientras tanto el pueblo, impedido de expresarse democráticamente, salió a la calle y parece que no regresa a su casa hasta no ver resuelto parte del problema.
Suspender el pago de la deuda para tener liquidez inmediata y renegociarla con los acreedores, auditoria pública y ciudadana y repatriación de capitales contra los corruptos que nos desfalcaron más de 475 mil millones de dólares, reactivación del aparato productivo nacional con reglas claras para todos y generación de confianza, y solidaridad inmediata expresada en donativos de medicamentos, de todos los países que se han beneficiado de nuestra política de alianza internacional, son apenas algunos de los planteamiento que defendemos y apoyamos para el debate obligatoria que debe darse en un dialogo que no es sólo de la Mud y el Psuv, y cuya agenda debe estar basada en propuestas y no en diatribas estériles que no conducen sino a más miseria.