Hace unos días recorrí, en una caminata de aventura, la ruta de los libertadores en la segunda Batalla de Carabobo del 24 de junio de 1821, porque la primera Batalla de Carabobo fue el 28 de mayo de 1814, allí, en esa tierra hermosa, aflora en el pecho una suprema conmoción de patria, y más aún cuando se oye a uno de los guías una explicación en el propio sitio donde ocurrió el lance. Ahora, trataré de narrar la explicación del guía en pleno sitio por donde anduvieron nuestros crecidos y valerosos libertadores.
En aquellos tiempos el General Simón Bolívar, varios días antes en las sabanas de Taguanes, estado Cojedes, el 15 de junio de 1821, organiza el ejército republicano en tres Divisiones. La Primera División a cargo del General José Antonio Páez, conformada por los Batallones Bravos de Apure, al mando del Teniente Coronel Francisco Torres, y Los Cazadores Británicos al mando del Coronel Thomas Ildeston Farriar; además de 7 regimientos de caballería. La Segunda División, comandada por el General de División Manuel Cedeño, estaba conformada por los Batallones: Tiradores, dirigida por el Teniente Coronel Ludwig Flegel, y Vargas comandada por el Teniente Coronel Antonio Gravete, a lo que se sumaba un escuadrón de caballería. La Tercera División bajo las órdenes del Coronel Ambrosio Plaza, estaba constituida por 4 Batallones, El Rifles a cargo del Teniente Coronel Arturo Sandes, El Granaderos al mando del coronel Francisco Paula Vélez, El Vencedor de Boyacá bajo el mando del Coronel Juan Uslar y El Anzoátegui comandado por el Coronel José M. Arguidegui; completando todo esto por un regimiento de caballería. Las fuerzas patriotas estaban compuestas por un total 6500 hombres.
Mientras el 24 de Junio amanece, Miguel de La Torre, General en Jefe de las tropas realistas, ocupan las Sabanas de Carabobo distribuidas de forma que cubriera: Por el Oeste el camino de San Carlos y por Sur el camino hacia El Pao. La primera línea defensiva confiada a la Primera División dirigida por el Teniente Coronel Tomás García, la cual se organiza en tres batallones, El Batallón Valencey al mando del Teniente Coronel Andrés Riesco, ocupa la parte Sur del camino de San Carlos, a su derecha se encuentra el Batallón Hostalrich comandado por el Teniente Coronel Francisco Illas, en columna de marcha. Dos piezas de artillerías estaban colocadas en una pequeña altura delante de la línea formada por El Valancey. La Posición correspondiente a la vía de El Pao fue ocupada por la División de Vanguardia liderada por el Brigadier Francisco Tomás Morales y contaba con dos batallones principales y uno de reserva. El Batallón Ligero Infante al mando del Teniente Coronel Simón Sicilia toma posición estratégica; y detrás de esta unidad se sitúa el Batallón Ligero Príncipe. La reserva quedó integrada por el Segundo Batallón Burgos bajo el comando del Teniente Coronel Joaquín Dalmar, que disponía de cuatro regimientos de caballería. En cuanto al Cuartel General Español, queda establecido cerca del Batallón Burgos, todo un verdadero entramado de tropas que parecía no habían dejado punto libre para el paso del enemigo; en este caso los patriotas.
Temprano, el día 24 de junio, desde las alturas del Cerro Buenavista, El Libertador hace un reconocimiento de las posiciones de las tropas realistas y llegó a la conclusión de que esa fuerza militar era inexpugnable por el Frente y por el Sur. En consecuencia, ordena que las Divisiones modifiquen su marcha por la izquierda y se dirijan al Flanco Derecho Realista, el cual estaba descubierto, es decir, Bolívar concibió una maniobra temeraria con la finalidad de desbordar el Ala Derecha del enemigo, operación ejecutada por las Divisiones de Páez y Cedeño; en tanto que la División comandada por el Coronel del General Plaza seguía por el camino hacia el Centro.