Ya hemos tratado el subtema de la obsolescencia programada = muerte prematura de las mercancías en general. Esa "preprogramación" que minimiza el tiempo útil de los valores de uso, es decir, la mercancía que los alberga[1], es una de las formas menos traumáticas o incruentas de ganar mercados con cargo al bolsillo de la clientela afectada. Por ejemplo, destornilladores con una ligera capa de estaño de tal manera que al contacto con humedad y aire atmosférico se vaya oxidando aceleradamente.
Conste que el fabricante se toma la molestia en decirle al cliente que se trata de un desechable, pero hoy hallamos en el mercado una cantidad creciente de mercancías hechas como duraderas que terminan no siéndolo por aquella preprogramación en cuestión.
Las guerras cumplidas hasta ahora, todas, absolutamente todas, han tenido como causa las luchas intercapitalistas en pos de mercados.
Ahora tratamos la anteprogramación de mercados. Esta la vienen realizando los técnicos caseros, como los mecánicos automotores[2], las fábricas de grifería, las ensambladoras de cocinas, lavadoras, secadoras, y otras mercancías propias de la línea blanca, microondas, tostiarepas y cuanta mercancía vaya perdiendo mercado, así como aquellas mercancías que ya no tengan posibilidad de ampliar su mercado, cosas así, ora por las alzas de precio actuales que los mismos capitalistas nos han impuesto desde hace años y a los cuales hoy los refuerzan como "regalitos de Navidad" que se merecen por estafadores-supuestamente-, porque no terminamos de entender por qué suben los precios en diciembre sin que gobierno alguno jamás le haya dado una parao a semejantes especulaciones y que, por supuesto, en enero reaparecen los mismos escquilmadores deseándole a usted como cliente el mejor de y más próspero año para que él lo reciba de vuelta. Un caretablismo que se hizo proverbial.
La corrupción en los Ministerios gubernamentales, el abandono de bienes muebles, su no reparación oportuna, son formas de garantizarles mercados prematuramente renovados a los fabricantes e intermediarios correspondientes.
21/11/2016 8:41:55 a.m.
[1] Con esa muerte anticipada tienden a morir en corto tiempo los valores de uso y sus correspondientes valores de cambio. El usuario de ese bien ya no puede ni siquiera venderlo usado con suficiente vida útil para su posible reventa.
[2] Estos suelen dejarle una tuerquita flojas para que usted al cabo de unos kilómetros se dé cuenta del ruido y reaparezca casa de ese vagabundo que funge de mecánico.
[i] P.D.: Daños pedagógicos y económicos en paralelo son los que se observa ante la mayor indiferencia gubernamental, de los entes responsables, en escuelas y liceos privados y públicos donde alumnos y sus respectivos representantes o padres están bachaqueando de lo lindo (léase delinquiendo ya que tenemos entendido que es un delito traficar con mercancías reguladas para revenderlas con precios superiores al previsto).En el fondo, ni la culpa directa tienen; sólo que están aprovechando la coyuntura de la pésima atención que los CLAP han tenido en muchas parroquias., con lo cual se está favoreciendo la causa de los enemigos, algo parecido a lo ocurrido el pasado 6D.