"La mentira es en sí misma ruin y reprochable;
la verdad es bella y admirable".
El presidente Maduro se atribuye cosas ilustres que no tiene o mayores de lo que son en realidad. Afirmar que un "grupo de traidores…va a sudar frío y luego les dará hasta diarrea…" no es más que otra fanfarronada del presidente para mentir nuevamente sobre la realidad que nos mantiene en vilo como habitantes de este desgraciado país.
Admirable sería que un presidente hablara al país con la verdad: "estoy rodeado de un grupo tan grande de ladron@s que no puedo denunciar porque caería el gobierno que presido". Verdad, cruda verdad que no se atreverá a admitir porque presumo son más sus ansias de aparentar gobernar lo ingobernable que asumir el dolor de perder el poder que no ha sabido manejar y a cambio reivindicar el poder moral que da la virtud de la honradez y predica de la verdad.
Si en verdad, señor Nicolás Maduro Moros, usted tuviese la intención de castigar a l@s traidor@s que forman parte de su gobierno comenzaría por aceptar nuestra legitima y única exigencia ya: Auditoria Pública a ser realizada por ciudadan@s honest@s aptos para develar la verdad que se esconde en las cuentas que presenta el gobierno que trata de presidir.
La Auditoria que exigimos, por ser nuestro deber y derecho, presentará al pueblo venezolano, y a los pueblos del mundo entero, pruebas del mayor desfalco que delincuencia alguna, organizada desde esferas gubernamentales, haya cometido en la historia moderna de la humanidad y abriría las puertas a remediar no sólo la situación de angustia que vive nuestro manso pueblo sino la de muchos otros pueblos hermanos que sufren del mismo mal: corrupción de sus gobernantes.
Amenazar a l@s que recientemente fueron sus funcionarios de Estado (aún sus amig@s) y fugad@s con los dineros del pueblo y a l@s ladron@s que aún le acompañan y siguen robando es una fanfarronada más, y eso no lo soportamos más. Si en verdad quisiese adecentar este desgraciado país aprovecharía sus hasta ahora malgastados, innumerables e ilegítimos Estados de Excepción y Emergencias Económicas para, en menos de 60 días, proceder a consolidar la anhelada estabilidad económica, política y social del país.
Lo que usted ha expresado: "Hay un grupo de traidores que se fueron de la revolución bolivariana, unos, están en Estados Unidos y otros aquí; voy a sacar las pruebas de cómo han trabajado con la CIA y la NSA, van a sudar frío y luego les dará hasta diarrea", no es primicia alguna. Esa verdad la coreamos tod@s l@s que mal vivimos en este desfalcado y arruinado país, es comentada en todas partes, especialmente en las largas y penosas filas que hacemos en todo el territorio nacional para conseguir dos kilos de arroz saboreado con ajo, tras horas de atropellos por parte de las "autoridades policiales" que celosamente cuidan, custodian y defienden, rodilla en tierra, los auto mercados que nos extorsionan con sus precios dolarizados.
Maduro (ya me indigna e irrita llamarlo Presidente) tu amigo Rafael Isea es un ladrón, al igual que otr@s más que te rodean y aún no se han fugado, eso no es cuento, lo sabemos tod@s; lo que si no acabamos de entender es por qué los tribunales de justicia que gobiernas a tú antojo no dictan auto de detención contra esos malhechor@s y el Ejecutivo Nacional (que hasta ahora presides) exige su inmediata captura, independientemente del país donde se encuentren y punto ¿Tendría yo que asesorarte en materia de leyes internacionales que rigen el caso? ¡Por favor! ¿Para qué existe INTERPOL? Son ladron@s, las pruebas están en tus manos, la Auditoria que tarde o temprano haremos develará la verdad y a la Interpol no le quedará más que obligada, esposas en manos, a proceder.
Maduro, no mientas, tu amigo Isea y maraña de ladron@s (dentro y fuera del país) no trabajan para la CIA ni la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) que maneja tu camarada Trump. No, no, no; trabajan o trabajaban en el Ministerio de Relaciones Interiores, Digepol (disculpen Sebin), PTJ, Ministerio de la Defensa, Banco Central de Venezuela, PDVSA, casi todos los ministerios, y todas las gobernaciones y alcaldías del país. Formaron o forman parte del aparato electoral que tú presides: PSUV. No hay que ir muy lejos, están allí, a pata e´mingo pues.
¿Qué hacer?
Dejarse de fanfarronerías y actuar: detenerl@s, comprobar lo ell@s, tú y tod@s ya conocemos, tú tienes pruebas en manos y nosotr@s develaremos con la Auditoria Pública y Ciudadana, para proceder a incautar sus fortunas. Te lo juramos Maduro: en menos de 60 días (término del Estado de Estados de Excepción y Emergencia Económica que recién decretaste) tendremos en las arcas del BCV más de 100 mil millones de dólares de aquell@s que acepten desde ya casa por cárcel a cambio de entregar sus fortunas de inmediato. El faltante del desfalco a la nación, 400 mil millones de dólares, se los arrebataremos a tus amig@s, estén donde estén, sin importarnos que gobierno l@s apadrine y proteja, porque para tú conocimiento y fines consiguientes los dineros mal habidos, producto del robo y la corrupción gubernamental, deben ser repatriados a los países de origen (asesórate, chico).
¡No hay nada más de que hablar: proceda usted señor presidente; no hacerlo, es otra fanfarronada más!
Recuerde, revise:
¡Sabino nos señaló el camino, me señaló el camino, nos señala el camino!