Los momentos políticos que en Venezuela se están viviendo (y sufriendo) durante éste mes de abril 2017, presentan una gran particularidad: por un lado una altísima polarización, en la que la oposición política anti-venezolana ha querido "vender" a lo externo del país, que estamos divididos en dos pedazos irreconciliables que necesita la aplicación de la mal llamada "carta democrática interamericana" como un paso previo para legitimar una intervención extranjera con el objetivo de poner orden interno y "salvarnos de ésta dictadura" antes de que ocurra una guerra civil, exterminio y matanza generalizada, que afecte de una u otra forma la paz en la región.
Por otro lado, estamos en presencia de la más feroz guerra mediática comunicacional, que sin ningún tipo de escrúpulo, viven falseando la realidad política de nuestro país y en un proceso nada ético, distorsionan la verdad verdadera de los hechos políticos para dedicarse "Sólo a destacar" que estamos en presencia de un gobierno represivo e intolerante, que ataca de manera despiadada a las multitudinarias manifestaciones políticas de la MUD que son "excesivamente pacíficas", mostrando sólo imágenes en donde las fuerzas del orden público reprimen a un pueblo desarmado y tranquilo.
La otra gran particularidad que ha develado éste mes de abril, ha sido la preocupante exacerbación de los ánimos, una brutal siembra de un odio enfermizo en las mentes de las personas que siguen a la MUD, ya no sólo como militantes anti-chavistas y anti-comunistas, sino el lograr que sus seguidoras y seguidores crean que "todo es culpa del gobierno" incluyendo todos los actos vandálicos, es culpa del gobierno…los muertos y heridos, son culpa del gobierno…la quema y destrucción de bienes públicos y privados, son culpa del gobierno…es decir, les han hecho creer y lo creen, que la oposición es la víctima y que en todo caso, quienes tiran piedras y hacen guarimbas son unos infiltrados del gobierno!!
Lo escrito anteriormente nos permite realizar una reflexión que desde el punto de vista teorético, podemos expresar la siguiente interrogante: ¿En dónde queda la axiología, en la praxis política de la derecha nacional, en la cual la mentira, la manipulación, el culpar al otro de todo lo malo que pasa, que no acepta la autoría de los actos vandálicos, la violencia, el terror y el caos, son utilizados de manera inescrupulosa por la dirigencia opositora?
Hasta ahora la realidad política venezolana en su quehacer cotidiano ha demostrado, que la derecha destruye…y la revolución construye.