La
nación que más domine el mundo será la más influyente e impondrá el
norte de la política de diplomacia internacional. El mundo actual lo
sabe con la supremacía de Estados Unidos en la esfera de la diplomacia
internacional. Para el imperialismo la ‘valija’
diplomática es su derecho a trasladar desde su país a otros o desde
éstos a su país lo que le venga en su perra gana para realizar
actividades incompatibles con la libertad y la redención del mundo. Eso
es todo.
El
recién caso que ha sido divulgado y en donde, con cinismo descarado, la
embajada estadounidense reclama al gobierno venezolano que éste le
violó sus derechos diplomáticos al no dejarlos libremente y con
resignación haber hecho sus tropelías sin ninguna oposición, sin
ninguna denuncia, sin ejercer ningún derecho o deber de exigencia de
respeto a nuestra soberanía, es patético del manejo arrogante y
desafiante del imperio en el campo de la diplomacia internacional. Lo
cierto es que los señores estadounidenses, amparándose en la concepción
que tienen de la política exterior y de la divina ‘valija’
diplomática trajeron, descargaron y ocultaron muchísimas y enormes
cajas contentivas de supuestos repuestos para la Fuerza Armada
Venezolana. Esta, al parecer, nada ha recibido de ese misterioso
material tecnológico y bélico.
El Ministro Chacón fue clarito como el agua cristalina en la denuncia de violación ‘diplomática’
a nuestro indeclinable derecho a la autodeterminación y soberanía. Más
claro no pudo cantar un gallo para que nuestro país y el mundo entero
conocieran la verdad verdadera de la famosa ‘valija’ diplomática estadounidense.
Que nuestro pueblo y el mundo entero no tengan duda alguna que en esa ‘valija’ –sagrada y super secreta para la
diplomacia estadounidense y exigida igual para los demás gobiernos- venía la fuerza Beta
completa, que es el grupo más ordenado, mercenario, obediente y experto
en secuestro y terrorismo con que cuente el Estado estadounidense. En
esa ‘valija’ diplomática trajeron: sus armas
sofisticadas, sus planes de terrorismo, su estrategia política de
intervención en nuestros asuntos internos, su cronograma de operación
militar, su plan de emergencia, los dólares de inversión para la acción
del derrocamiento del Presidente Chávez, y la lista de personajes que
conformarían el nuevo gobierno una vez obtenida la victoria de los
misioneros con bayoneta calada. ¿Qué demuestren lo contrario? Esto
sería como pedirle peras al olmo. Lo hemos dicho y lo seguimos
diciendo: el gobierno estadounidense está preparando una operación
comando, tipo de la que ejecutó Hitler para rescatar a Mussolini pero
en este caso no para liberar sino para secuestrar o asesinar a Chávez
en Miraflores o en algún más idóneo que les permita desaparecerlo del
mapa de la manera más exitosa posible. No tenemos los documentos que lo
pruebe, pero no
tenemos duda alguna que eso ya está planificado. No nos
extrañe que en esa ‘valija’ diplomática, viniera el plano de acción y escape de la misma.
Lamentablemente, en primera instancia casi todos los gobiernos del llamado tercer mundo o
mundo subdesarrollado, no están ganados para enfrentar los desafíos que
impone el imperialismo, porque con la invasión del Estado sionista a
Palestina y el Líbano, se dieron las condiciones para un rompimiento
masivo de relaciones diplomáticas no sólo con el Estado israelita sino
también con el de Estados Unidos. Pregunto: ¿se hubiese atrevido éste
monstruo que ensangrienta el mundo haber declarado la guerra a todos
los países que hubieran tomado esa justa determinación? Cada desatino,
cada oportunidad que pierden los gobiernos del tercer mundo o mundo
desarrollado para avanzar en la lucha contra el imperialismo, es una
nueva victoria que éste obtiene sobre aquellos.