La oposición con los gringos juega ligadita. Distinto a Guerra de las Malvinas

La diplomacia de EEUU, por lo menos con respecto a Venezuela, en veces, parece como un trompo carretero. Este es como un borracho que pierde el equilibrio y parado se bambolea, hacia adelante y atrás; a la derecha y la izquierda. Cuando avanza, lo hace en zigzag y en veces se va hacia la izquierda como de repente embiste a la derecha. Ese mismo ritmo, como del San Vito, baila la oposición, lo que la denuncia como sujeta, por decir lo menos, a lo que debería serle ajeno.

Hay quienes dicen, se habla de expertos, hasta a Chomsky, se le ha ocurrido decir algo en ese sentido, que Trump es loco, irreflexivo y hasta hablachento. Michael Moore, meses atrás, acabando de asumir Trump el cargo, vaticinó que este saldría del mismo a causa de una locura o intemperancia. Ahora, a los estadounidenses, tiene asustados por el manejo guapetón que hace del asunto con Corea del Norte, y las frecuentes afirmaciones del gobierno de este país de estar en capacidad de colocar bombas nucleares donde ellos viven. Las guerras que su país ha hecho con frecuencia desde años atrás, han tenido escenarios lejanos. Lo que sucedió el 13 de septiembre con las torres gemelas los impactó y les habló el feo lenguaje de la guerra.

Días atrás, habló de intervenir militarmente en Venezuela. Por supuesto, quizás sea la primera vez que eso dice el mandamás de la Casa Blanca, pero unas cuantas lo han dicho funcionarios del Pentágono y Comando Sur. En la MUD, dentro y fuera del país, hay quienes eso hasta imploran. Con frecuencia, las encuestadoras que averiguan acerca de ese "sentimiento", recogen cifras entren12 y 13 por ciento a favor, que con la frialdad de los números pudiera decir poca cosa, pero desde otra óptica, no deja de asombrar y hasta entristecer. Pues esa cifra es corta, abundan quienes eso desean pero no lo dicen.

Deberían recordar, como América Latina toda, incluyendo a los argentinos de todas las tendencias, se alineó contra Inglaterra en la "Guerra de las Malvinas", pese que en el gran país suramericano gobernaba una junta militar, cuya conducta era la típica de las dictaduras apoyadas por EEUU. Y no fue cosa azarosa, menos inesperada que EEUU se alinease con Gran Bretaña y el pueblo todo de Argentina y de nuestro continente reaccionó con dignidad. Lo primera era defender la soberanía de nuestros pueblos.

Su suele decir que Trump tiene la lengua suelta, esta y las ideas como al escondite juegan. Pero siendo él lo que es, uno no puede creerse ese cuento que parece como muy simple. Por eso, para uno, esas "bravatas", pudieran más bien ser globos de ensayo, como señales destinadas a pulsar la opinión. Eso, que después que él habla, que para algunos pareciera hacerlo como un borrachín en plena farra, sale alguien y hasta más de uno, de los tantos funcionarios gringos puestos para eso, a decir lo contrario, como que el presidente no quiere guerra, invasión y violencia, sino que haya diálogo, mientras se niega a conversar aunque sea por teléfono con Maduro, no parece, si uno piensa con sensatez, una cosa azarosa.

Veamos. Trump dijo aquello y se produjo un paréntesis, como si en una reunión de repente los contertulios cansados de hablar y no escucharse, optasen por callar para poner orden y sindéresis. Se produjeron unas reacciones importantes en el mundo, como lo dejaron ver las diplomacias china, rusa, hasta algunos países europeos y en América Colombia, Perú, Uruguay, Chile y hasta México, sin nombrar las solidaridades inevitables como los páises del Alaba y CARICOM. En la ONU misma hubo rechazo a la amenaza de Trump. Además este y la Casa Blanca, Departamento de Estado, etc., deben estar tan absorbidos por la gravedad de la crisis mundial y particularmente lo relacionado con Corea del Norte, cuyas pruebas nucleares y exhibiciones de poder ofensivo, generan por lo menos una seria incertidumbre, como para hablar con la seriedad o interés debido sobre Venezuela; lo que equivale decir lo que algunos, dados a hablar como conectados directamente con la oficina oval, que "Venezuela no está entre las prioridades de EEUU". Lo que pareciera sustentar que Trump, por ahora, sólo habla por hablar y satisfacer el odio de ciertos grupos de allá y acá; siendo esto una versión distinta pero creíble

Después que algunos de esos funcionarios que suelen ocuparse de aclarar lo que los presidentes dicen, pero no quisieron decir, medidas las reacciones a nivel internacional, aquí adentro, ciertos personajes como Henry Falcón e Hirán Gaviria, tuvieron la osadía de manifestarse ante aquella amenaza contra la soberanía nacional y gesto atrabiliario de injerencia. Falcón llegó a usar una expresión indelicada y hasta atrevida, cuando refiriéndose a Trump le dijo: "Este peo no es suyo. Ocúpese de sus asuntos que son bastantes".

Pero como ocurre con frecuencia en Estados Unidos, lo que no me parece nada improvisado, funcionarios volvieron hablar del mismo asunto de la intervención y el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, quien al fin se desató, después de los acuerdos de paz, asunto que la oposición colombiana debería valorar y salir del mutismo que la embarga, pide a EEUU que ejerza "mayor presión sobre Venezuela"; lo que uno menos piensa, siendo indulgente con Santos, es que pide nos mate, si no de bombas y metralla, si de hambre.

Es dentro de ese cuadro, como a última hora, ante la imposibilidad de continuar haciéndose cómplice, que la MUD se pronuncia ante lo dicho por Trump. Eso sí, se cuida de mencionarlo y da una explicación "original", como quien intenta voltear la realidad. Para la MUD, Trump no cometió el pecado de amenazar a Venezuela, lo que ha hecho por demás. Según ella a quien hay que condenar es a Maduro, quien ha convertido a Venezuela en una "amenaza para el hemisferio y el mundo". Eso dijo la MUD. ¡Qué curioso! Eso mismo dice el decreto vigente de Obama, "Venezuela es una amenaza inusual y extraordinaria para EEUU". ¿Entonces, EEUU, Trump no nos ha amenazado, sino ha reaccionado asustado por el peligro que encierra Maduro y sus motores que no prenden o prenden, tosen y se apagan?

El Jefe de la CIA, acaba de declarar, poniendo énfasis en lo mismo, que "Venezuela representa un serio peligro para los Estados Unidos". Para justificarse, pues no puede decir que nos tienen en la mira por el petróleo y otras cosas materiales de la madre tierra, menciona que aquí hay células de Cuba, Rusia y Hezbolah. Es curioso, no incluyó a China. Pero es el mismo discurso del pasado, de cuando guerra fría, el nido de dictaduras en el continente. Y para que no quede dudas, señaló que se están "tomando muy en serio el caso particular de Venezuela". Y agregó, casi textualmente, lo que antes dijo Trump, y otros funcionarios negaron esa fuese la esencia del discurso de su presidente, "No descartamos operación militar".

Pero esta es declaración parece calcada del comunicado de la MUD o ¿no será al contrario? Maduro, con todas sus debilidades, imprecisiones y lo malo de su brújula e ineficiencia de su equipo, nos ha convertido en una seria amenaza, tanto que por su culpa, los gringos se verían obligados a salvarnos, no de la inflación, especulación, falta de medicinas y producción en general, sino del comunismo externo, sobre todo el "ruso e iraní que nos está comiendo vivos". ¡Qué pobreza! A Haití, ante cada tragedia, sólo llevan eso, militares.



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Eligio Damas

Militante de la izquierda de toda la vida. Nunca ha sido candidato a nada y menos ser llevado a tribunal alguno. Libre para opinar, sin tapaojos ni ataduras. Maestro de escuela de los de abajo.

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