Ya vuelve el afrovenezolano ese con el mismo tema…..eso es lo que me suena en los oídos, cuando me imagino la exclamación que hará el lect@r, al hacer contacto visual con el título de este artículo.
Yo no puedo pasar por alto que en el acto de juramentación del nuevo gobernador del Edo. Miranda, Héctor Rodríguez en Yare municipio Bolívar, el presidente de la República, Nicolás Maduro prometió, ante los mirandinos y ante todo el país que seguía el acto, a través de los medios de comunicación, concederles la pensión al 100 % de las personas que por vejez sean acreedoras a este beneficio social. Y no puedo dejar de hacerlo porque, entre los venezolanos no pensionados todavía, está la Población Negra Venezolana, con la cual la sociedad tiene una deuda histórica que debía haber pagado hace tiempo y no lo ha hecho.
Quiero aclarar que esta deuda, no pagada, es con los Negros y Negras que descienden de los esclavos que se quedaron en Venezuela y a los cuales se les reconoce como Negros venezolanos, después de haber sido liberados de la esclavitud. Nada que ver con los llamados "afrodescendientes", pues estos siguen siendo de nacionalidad africana y no han aceptado la nacionalidad venezolana. (No acepto el cuento de que el Negro es un color y el Afro es una identidad cultural). Lo que es una Identidad es la Negritud.
Si alguien quiere darle color y sexo a la pobreza podemos decir que es Negra y es Mujer. Y no es porque a ellas les guste ser pobres, sino que su pobreza es heredada desde los tiempos que fueron esclavas y esclavos de los dueños de las tierras y haciendas de este nuestro país llamado Venezuela. El esclavo era considerado una cosa y por lo tanto no tenía derecho a ser propietario de nada y toda su fuerza de trabajo la entregaba a sus amos; por eso no pudo legar ninguna herencia a sus sucesores. Después de haberse decretado la abolición de la esclavitud (1.854), los Negros y Negras pasaron a ser más pobres y dependientes de sus antiguos amos que los siguieron explotando, sin darle tierras para cultivar, pero aprovechando su fuerza de trabajo.
Como esta deuda es difícil de cobrar, pues tendría que ser pagada con bienes de capital, que son incalculables, podría hacerse un poco de justicia con los Negros y Negras que son mayores de 60 años con darles una pensión que sea el doble de la que recibe el resto de la población y así remediar un poco sus estándares de vida, que son los más pobres del país.
Ya hay una experiencia con la población indígena, a los cuales se les ha asegurado la propiedad de sus tierras ancestrales y se les da un tratamiento especial en lo jurídico para evitar su exterminio; nosotros los afrovenezolanosno pedimos un tratamiento especial por nuestro color de piel, sólo pedimos se nos pague una deuda de índole laboral, pues todas las riquezas que han sido acumuladas por los "grandes cacaos", es producto de nuestro trabajo y todas las leyes vigentes proveen el pago de Prestaciones Sociales a sus Trabajadores y también el pago de pensiones como una conquista laboral.
En dos palabras exigimos una pensión por Edad y la otra por Prestaciones sociales no canceladas. Con esto nuestra vejez será un poco más digna y se estará haciendo un poco de Justicia histórica con nosotros que fuimos y somos los creadores de las riquezas que otros están disfrutando y heredando.
En varios de mis artículos publicados en Aporrea, he planteado este tema y por lo general los que se sienten aludidos o están en contra de lo aquí dicho, reaccionan agrios y amargados y hasta me colman de insultos. Agradezco se ahorren sus epítetos, pues estoy vacunado y no me hacen ni cosquilla.
Si en Venezuela, se pensionan a todos los adult@s mayores, a los negr@s hay que pagársele doble. Una por bailar Cumaco y otra por tocar Tambor. Una por llevar encima una bata blanca para vender chicha y la otra por no llevarla para atender a un paciente. Una por subir cerros para llegar a su hogar y la otra por no estar haciendo alpinismo.
