Con este escrito se da por finalizado algunos asuntos con relación a lo sucedido con el Congreso de Panamá y sus consecuencias, de tal manera que continuemos. Los resultados de las deliberaciones llevadas a cabo en el Congreso de Panamá, en realidad son mayormente adversos a los puntos presentados por Bolívar para ser discutidos en esas plenarias, ello debido a que simultáneamente se suscitaron eventos anormales en diferentes lugares del territorio suramericano, además del torpedeo constante contra los asuntos planteados al Congreso por Simón Bolívar, torpedeo incentivado por el General colombiano Francisco de Paula Santander y solo justificado por la envidia que le había cogido al Libertador y brotado de su alma innoble; en verdad era a todos los venezolanos que tuviera la desgracia de toparse con él en algún lugar. Ya el 26 de marzo de 1826, el general Santander, encargado de la presidencia de la Gran Colombia, permite se fusile al coronel venezolano Leonardo Infante, acusado de cometer un crimen que nunca se le pudo probar. Es importante se sepa que el caso del coronel Leonardo Infante fue clave para que se incrementara el movimiento de subversión en Venezuela y que fuera el general José Antonio Páez quien lo liderara, y más tarde lograra su triunfo; se trató de LA COSIATA.
La creciente hostilidad de los políticos peruanos hacia Bolívar causaron que tras el alejamiento del Libertador de la presidencia del Perú, sus sucesores en Lima declinaran ratificar el "Tratado magnífico titulado de la Unión, de la Liga, y de la Confederación perpetua"; similar situación se repite en Bolivia al cesar el gobierno del Mariscal Antonio José de Sucre, y se desvanece todo interés por el proyecto unificador de Bolívar. Las tensiones internas en las Provincias Unidas de Centroamérica hicieron imposible en éstas una posición unánime a favor de los acuerdos de Panamá, además que los litigios territoriales de Centroamérica con Méjico no habían quedado resueltos en el Congreso Anfictiónico, dejando insatisfechos a ambos Estados sobre un tema que precisaban solucionar antes de integrarse a un proyecto de unión continental. El propio "Tratado magnífico titulado de la Unión, de la Liga, y de la Confederación perpetua" omitía temas importantes del proyecto de Simón Bolívar como la integración comercial y el cese de los pleitos territoriales, mientras que la alianza militar defensiva no ponía fin a la separación de fuerzas entre los países hispanoamericanos. La discordia entre las delegaciones había impedido llegar a acuerdos decisivos en muchos temas proyectados; restando contundencia a las decisiones del Congreso.
El hecho que apenas uno de los cuatro Estados participantes ratificara los limitados acuerdos de Panamá, causó que el propio Simón Bolívar considerase al Congreso Anfictiónico como una experiencia fallida poco después que concluyeran las sesiones, señalando: "El Congreso de Panamá sólo será una sombra". 4 años después del Congreso, en 1830, la Gran Colombia se disolvió en tres países, y en 1834 las Provincias Unidas de Centroamérica se desmembraron en cinco Estados. Al final Gran Bretaña, que había enviado a un observador al Congreso de Panamá aprovechó la situación para iniciar acuerdos comerciales con los países asistentes por separado; irónicamente el gobierno británico fue el más beneficiado al obtener importantes tratados comerciales con algunos países representados en Panamá. La idea de la unión de los países latinoamericanos se mantuvo en suspenso pero latente. Años más tarde se creó la Unión Panamericana y luego la Organización de Estados Americanos, pero ni sombra del proyecto de nuestro Libertador, tanto, que en vez de ser una liga de naciones para atender asuntos comunes que perjudiquen a todas estas repúblicas, que desde hace tiempo la O.E.A. es conocida como el MINISTERIO DE LOS ESTADOS UNIDOS PARA LAS RELACIONES CON SUS COLONIAS.
