La novatada de Javier Bertucci se evidenció hasta última hora. Quien sí ha estado a la altura de las circunstancias ha sido Maduro, ese llamado al dialogo en el mismo momento de conocer el triunfo da muestra de su capacidad dirigencial. Los que no pueden pensar que ganaron fueron los miembros de la MUD, ya que ni siquiera participaron, no les queda nada bien salir como abanderados de una victoria cuando Nicolás Maduro sacó una votación cercana a los 6 millones de votos. Falcón hizo mucho, pues él como tal nunca fue dirigente nacional en una campaña tan corta no se le podía exigir más, sobre todo arrancando con "plomo en el ala" rodeado de perdedores, algunos por cierto que en esta fecha quemaron las naves como es el caso de Eduardo Fernández, al bajar de categoría ya no podrá volver aspirar la presidencia de la república, Aunque de seguro amanecerá en los programas de radio y televisión insinuando que Falcón falló, pero que de haber sido él, el candidato, se hubiese ganado. La realidad es que ganó un nuevo Maduro, ya no es el conductor escogido por Hugo Chávez, ahora es el estadista preparado con la suficiente experiencia para llevar al país hacia caminos de desarrollo, sobre todo ahora que el precio del barril del petróleo está subiendo. Henri Falcón por su parte finaliza cometiendo el error de cerrar las ventanas del dialogo y concluir su carrera política, perdiendo también la oportunidad de convertirse en el líder de la oposición venezolana desconociendo los resultados electorales al denunciar los puntos rojos, si ese sistema ha funcionado dentro de la revolución desde hace 20 años, se colocaron también cuando perdimos La Asamblea Nacional. Hasta en eso, es escaso Falcón, la falta de argumentos lo liquidó en la campaña y posteriormente lo liquidó luego de las elecciones. Con Falcón reinó la improvisación y la división interna, hasta última hora del 19 no existían los recurso para la logística del día de las elecciones, y a esa misma hora en los circuitos en donde se elegían a dos diputados los candidatos afinaban separadamente estrategias para ganarle al compañero de fórmula. Esta elección sirvió para demostrar nuevamente que la actividad política y la obtención de altos cargos no es cuestión de suerte, nadie es Chávez, pensar ser otro Chávez en cuestión de un tris, es estar equivocado, nuestro máximo líder recorrió el país por varias veces llevando un mensaje de esperanza. No era político, pero se hizo en la lucha y los superó a todos. Miren amigos lectores mucha gente se equivocó con Nicolás Maduro, en estos comicios demostró ser el mejor alumno del comandante Chávez, y a estas alturas después de haber derrotado a Falcón y a Bertucci, con unos jefes de la oposición viviendo en el exterior o encerrados en sus casas carentes de credibilidad, si se repiten las elecciones en octubre o diciembre por una presión internacional, Nicolás Maduro arrasa con todos. Gana así coloquen a Lorenzo Mendoza.