La rivalidad esta de manifiesto y busca romper el vínculo de España con el mundo y, le dan a Catalunya todas las promesas para que cumpla ese papel. Ya no importa la prosperidad económica de los pueblos, como su bienestar social. Solo interesa la cosecha política que puede dar los catalanes y avanzar hacia una solución aceptable. Aquí, ya no es cuestión de sentimientos o pertenecer a un grupo izquierdista, lo que interesa es el futuro político de cada dirigente que mantiene una actitud diferenciada con sus niveles de origen y, la utilización de su lengua nativa.
El asunto es la confrontación entre el bloque independentista y el no independentista. Lo importante es prevalecer para triunfar al calor de esta contienda. Se están reforzando la derecha en Catalunya y, en el conjunto de España.
Bueno, en este territorio, reside una expresión significativa de migrantes. Como una expresión de las colonias Iberoamericanas y árabes desde el siglo XVIII y, por supuesto españoles, italianos como portugueses. Todos estos grupos se integraron por diversas motivaciones al nuevo mundo. Muchos vínculos se aperturaron y conformaron espacios imperiales para lograr una configuración de un nuevo país. América era y es el motivo para establecer un puente de desarrollo económico, mediante las compañías inglesas. Ahora, estas migraciones son masivas, por índole político, más no económico. Porque, lo fundamental en estos movimientos humanos es su historiografía. Porque, a la hora de mezclar la genética se asume que la sociedad venezolana, marque la diferencia principal.
Desde la historia, estos movimientos Se mezclaron y vinieron plantaciones. Comercio, fundaciones y una visión de la academia, nuestros hijos empezaron a estudiar en los seminarios.
Hay una polarización desviada sobre el concepto de la Monarquía, algo de cohesión y de interés colectivo, pero, hay anarquistas que desean un individualismo y no un colectivismo a favor del pueblo.
Hay intereses que desean un Estado paralelo en España y, vienen desde años atrás, caminando en ese sentido y romper con la estructura del Estado para ir a una elección general y obligar al principado abandonar los castillos, rompiendo con la misma historia. De ello, hay argumentaciones. Los independentistas tienen meses luchando para formar un nuevo gobierno o convocar a nuevas elecciones. Pedro Sánchez, tiene la palabra y decisión. También son momentos difíciles para el independentismo catalán, que parece estarse quedando sin opciones dentro del marco legal y político. Después de la declaración de independencia de finales de octubre pasado, revertida, y de elecciones anticipadas, los tres partidos independentistas no han podido ponerse de acuerdo entre ellos para investir un nuevo liderazgo. La política española ha enfrentado cambios en los últimos años: el gobierno de Rajoy ahora es de minoría y su Partido Popular quedó en último lugar en las elecciones catalanas. Está presente el riesgo de que el partido sea desbancado por Ciudadanos, fundado hace unos años con una plataforma anti independentista