La contradicción de los economistas de oposición es acusar al Gobierno de la hiperinflacion existente, supuestamente, por el financiamiento que hace el BCV al Ejecutivo Nacional por medio de la emisión de créditos internos en bolívares, que a su vez utiliza para financiar el déficit fiscal existente por la caída de los ingresos ordinarios y así mantener un gasto público en crecimiento, donde se destina 80% de los recursos a la atención social.
Pero esa oposición, al mismo tiempo, propone, como única salida, salir corriendo a financiar ese déficit fiscal con un crédito externo proveniente del FMI, que como todos saben, condicionan a los gobiernos y beneficia a la banca multilateral que domina Estados Unidos.
La gran pregunta es: ¿Cuál fuente de financiamiento del déficit fiscal es mejor, la que genera el Gobierno por medio del BCV (interno), que no lo pone de rodilla frente al Imperio del Norte, que es el mismo que ha impedido la renegociación de nuestra deuda externa actual (80% en manos de EE.UU., Canadá e Inglaterra); o la deuda que proviene del FMI (externo)?
A los no economista, ¿qué nos conviene?