Matando dos pájaros de un tiro. Ahora es común en los titulares de la prensa de derecha leer cosas como ..."la crisis que el socialismo ha creado a la nación venezolana", no Maduro, por ejemplo, en La Patilla. Tal Cual y Teodoro Petkoff sostienen una opinión adversa a Chávez desde hace mucho tiempo, se empeñan en mostrar que su socialismo solo fue un pretexto para corruptos, sobre la base de supuestos análisis, los cuales son en rigor chismes, manipulaciones y sarcasmos amargos. Teodoro Petkoff pasó de ser un ex guerrillero, economista y un político perspicaz a un viejo resentido del poder, no acepta todavía el hecho de haber sido echado a un lado por Chávez, ese sentimiento es más poderoso que el sano juicio para juzgar su figura y sus esfuerzos por cambiar el país, de un modelo socialdemócrata por otro socialista. Tal Cual, La Patilla y toda la prensa capitalista del continente y más allá le hacen el juego a las agencias imperiales y por supuesto a la derecha más derecha de aquí.
Lo mismo hace el gobierno de Maduro. En una de las últimas alocuciones del presidente éste gritó a los cuatro vientos que él era socialista, como sufriendo un cargo de conciencia, o, más bien, por la necesidad desesperada de convencer a los chavistas de que no está traicionando el legado espiritual y político de Chávez. Él, por supuesto, está convencido de su traición, todo es teatro bufo (no conoce otro).
El presidente necesita de su base electoral, de los chavistas, de la organización clientelar falseada de poder popular, de los chantajes, una población atada a las necesidades. El chavismo es una población confundida e ignorante de los conceptos que definen al socialismo, no sabe cuáles son sus prácticas porque ha muerto el líder, real y figurado. El gobierno tiene la necesidad de convencer a esa masa popular de que todo lo que hoy se hace y se ha hecho en estos cinco años, incluida la venta de parte importante del país y del despilfarro de más de 50 mil millones de dólares, entre la "lumpen burguesía" nacional, o falsos empresarios (la única que existe aquí), y la burocracia aprovechadora y oportunista, ha sido por el socialismo, que éste "experimento", éste exterminio de la voluntad popular es el camino al socialismo o El socialismo mismo. Por eso sus golpes de pecho frente al gabinete y frente a las cámaras de televisión.
Pero el socialismo sigue a la espera de que despierte el espíritu del líder, de Bolívar, de Chávez. Da tristeza la amargura de aquellos que maldicen del socialismo usando como argumentos en contra lo que ahora pasa en el país. Por ignorantes, algunos, y por impotencia y también ignorancia otros, atrapados entre villanos y demagogos. A ellos le decimos que el socialismo nos hace falta, no Maduro y su gobierno de oportunistas.
Nicolás Maduro es el pretexto que necesitaba la gente como Petkoff o Diego Arria, toda la prensa de derecha, la "lumpen burguesía" (la misma que describe perfectamente Hernández Montoya, muy tarde, después de haber pasado tanto tiempo asociada al gobierno y chupando de la renta petrolera), para desacreditar al socialismo. Esos ataques de conciencia de Maduro llamándose socialista, como pensando en voz alta; esa no tan astuta manera de trabajar para un lado y engañar para el otro, de ofrecer libertades a los ricos y socialismo a los pobres, es lo mejor que le ha podido regalar Maduro al imperio: la oportunidad en "bandeja de plata" para acabar con el socialismo ente los ojos del mundo, con el madurismo, y el chavismo de un solo golpe, porque tampoco quieren a Maduro y a sus más íntimos aliados. No en vano Diego Arria habla de "desinfectar" al país. Eso se traduce en hacer una razia fascista en contra de todo lo que huela a socialismo, a "pobre", a Chávez.
Incluso a Maduro, a Diosdado y los otros que han dado la cara por esta particular traición a la revolución y a Chávez. Todos están incluidos en este exterminio de Arria. El resto del "madurismo", incluido algunos ministros, ya sabrá cambiarse la camisa, delatarlos y jurar lealtad delante la bandera Norteamericana; los técnicos, asesores, intelectuales, militares, ex militares y "empresarios nacionalistas honestos".
Nosotros pensamos que Maduro está tentando al diablo con eso de la invasión militar, de publicitar una guerra con Colombia, alentando a los guerreristas de todas parte. Esa sería una salida estúpida para esta crisis; más les vale al gobierno apartarse y convocar al chavismo, o abandonarlo y convocar unas elecciones adelantadas, pero no invocar al demonio de la guerra para desviar la atención de lo que realmente están haciendo con la economía y el país.
El gobierno de Estados Unidos solo amenaza, presiona con declaraciones, busca desequilibrar, pero el costo de una invasión militar, así sea a través de Colombia es muy alto para ellos, prefieren desgastar, mermar las capacidades de Maduro, remplazarlo y luego exterminar al chavismo, como Pinochet a los socialistas y a los sindicatos, a más 40 mil almas en diez años. A menos que éste gobierno esté dispuesto a hacer el trabajo sucio por ellos, lo que sería ruin.
A los socialistas nos toca defender el socialismo de las calumnias de Maduro y de la derecha, rescatarlo de la boca infame de Aristóbulo, de Diosdado, que realmente pareciera que no sabe lo que es, y todos los farsantes que lo envilecen con sus prácticas de aprovechadores y oportunistas, mientras decir "socialismo" o "socialista" sea la llave mágica para abrir puertas burocráticas y aprovecharse de la cosa pública.
Volvamos a Chávez, al socialismo, al Plan de la Patria original, así tengamos que comenzar desde cero, hay que acabar con esta pantomima de una vez.
23/09/2018