La pregunta crucial en estos momentos frente a la fecha del 23 de febrero para los patriotas venezolanos, es; ¿Cuál es el plan del imperio?. En política actuar sin previsión equivale a actuar a ciegas, y en tales condiciones los riesgos son muy elevados. En cambio, si conocemos o desciframos el plan contrarrevolucionario, los riesgos pueden minimizarse y más fácilmente lo podemos derrotar. ¿Pero qué hacer para un simple investigador cuando no tenemos "una copia de ese plan"? o no disponemos de información clasificada, entonces lo que nos queda es trabajar con hipótesis metodológicas para tratar de interpretar la realidad y descifrarlo. Por supuesto, uno se puede equivocar, ese riesgo hay que enfrentarlo, pero hay que intentar aproximarse sin miedo a equivocarse.

Descifrar ese plan no puede ser tarea de un solo analista, sino de la mente colectiva de los patriotas bolivarianos. Algunos compatriotas desde varios sitios web y medios, en estos días han adelantado importantes aportes e hipótesis, por mencionar a manera de ejemplo, los análisis del estimado compañero Néstor Francia que correctamente se remite a la historia y alude al plan de la agresión por Playa Girón. Otros recuerdan lo sucedido en Libia, etc. Para ser serios en esto y no simples adivinadores de oficio que miran la bola de cristal, y si uno no maneja información clasificada, entonces para hacer un análisis politológico y construir una hipótesis aproximada, hay que basarse en metodologías gnoseológicas.

¿Cómo aproximarse al conocimiento del plan contrarrevolucionario?

Podemos aplicar varios métodos; la idealización-modelación, la abstracción, el enfoque histórico concreto, el análisis de códigos, visión de estática y dinámica, etc.

Una de las fuentes más importantes para formular hipótesis lo constituye:

1. los aspectos metodológicos de cualquier plan

2. los modelos de desestabilización ya antes empleados

3. las propias acciones del enemigo pasadas y presentes

4. hechos que puedan favorecer o debilitar directa o indirectamente al enemigo.

Generalidades metodológicas

Cualquier plan maestro debe estar compuesto metodológicamente, explícita o implícitamente, por determinados componentes obligatorios más o menos determinados:

• Objetivos

• Estrategia

• Táctica

• Tiempo

• Fases

• Actores

• Medios y recursos

Podemos asumir el método de la idealización para imaginarnos un plan maestro, en la práctica sabemos que éste puede revestir diversas formas, que a partir de éste existen muchos otros, y por cada actor, además siempre se emplea el método de compartimentación, cada actor conoce sólo lo que necesita conocer y los niveles de conocimiento van decreciendo hasta llegar a los ejecutores directos y participantes que sólo conocen tareas muy concretas. Por otra parte, un problema que siempre se presenta es el control de los actores, o que los mismos hagan lo que en realidad se les pide, a veces los actores se van fuera de control, temporal o estratégicamente.

Si, por ejemplo, estos componentes los hubiésemos conocido con anterioridad al 11 de abril de 2002, el imperio no nos hubiese tomado por sorpresa y más bien hubiésemos sorprendido a los golpistas. Para lograr tener una idea aproximada de respuestas a estas interrogantes, veamos los modelos ya empleados por el imperio en el pasado.

Los modelos de planes desestabilizadores del Imperio

Históricamente lo que conocemos de las formas que usa el Imperio para sacar del poder a gobiernos populares, pueden clasificarse en cinco:

1. La intervención militar directa

2. El golpe militar, cruento o incruento

3. El magnicidio

4. La desestabilización sin intervención militar directa (diferentes modelos, revoluciones de color, etc.)

5. Una combinación de las formas anteriores

Al parecer el plan del imperio actual contra Venezuela clasificaría en el número 5, una combinación híbrida de los modelos ya aplicados y con amenaza permanente de intervención militar.

En este plan el golpe militar sigue siendo la apuesta principal, pero en este caso es alentado por una constante y abierta amenaza e incluso posibilidad de uso de la intervención militar de EEUU. Otra diferencia es que el imperio ha aprendido algunas lecciones de las derrotas anteriores. Ha tratado en lo posible de corregir dos grandes debilidades de la oposición en los formatos anteriores; la falta de un líder y de apoyo popular. Con Guaidó creen que ya han facilitado al "líder", y para ganar un cierto y aparente apoyo popular han venido intensamente trabajando en los barrios populares, han colocado a un supuesto "líder" que guarda un parecido étnico popular y utilizan la necesidad humana que ellos mismos criminalmente generan para ofrecer una supuesta "ayuda humanitaria". Además el plan seguramente incluiría los patrones repetitivos constitutivos de anteriores formatos empleados por la oposición fascista. Para determinarlos conviene aplicar la abstracción y modelación.

FORMATOS ANTERIORES

FORMATO DEL GOLPE DEL 11 DE ABRIL DE 2002

1. (paro petrolero) paro patronal-sindical + 2. masa humana + 3. sangre (legitimador -movilizador)

+ 4. manipulación mediática (pantalla dividida + video manipulado)

+ 5. Acción del dispositivo armado (cúpula de la FAN)

FORMATO DEL PARO Y SABOTAJE DE DICIEMBRE DE 2002

1. exigencia de un referendo consultivo inconstitucional (elemento nuevo de la fórmula – legitimidad electoral- institucional- CNE- TSJ)

1. paro patronal-sindical + sabotaje petrolero (eje principal de ataque) +

1. sangre (LUTO ACTIVO) (movilizador) + 4. manipulación mediática (video manipulado) + 5. masa humana

+ 6. acción del dispositivo armado ( militares de Altamira- policías municipales-

paramilitares- algunos militares golpistas dentro de la FAN)

Esto último como opción alternativa de reserva si fallaba la opción del nuevo elemento del plan > elecciones adelantadas dentro de un escenario adverso al gobierno

FORMATO DE LA GUARIMBA – 2004

1. Manipulación mediática – "fraude del CNE con las firmas" (legitimador)

+ 2. masa humana 3. Dispositivo armado + 4. sangre (LUTO ACTIVO) (movilizador)> masa humana

El asesinato como factor de desestabilización en los formatos políticos

Tal como se puede apreciar en los formatos de la oposición golpista la SANGRE siempre está presente como LEGITIMADOR o como MOVILIZADOR (y viceversa). Si la oposición golpista continúa con sus mismos formatos, entonces este factor no puede faltar. Un problema que confrontaba la oposición es que su base social cansada de tantos pasados enfrentamientos reflejaba un deseo de paz social. Por lo tanto, si se quería movilizar una masa humana en la calle, esta vez, el factor de movilización debía ser muy poderoso, una SANGRE que produjera una gran conmoción.

La sangre como factor de los anteriores formatos se había hecho siempre dentro de un escenario político, como parte de un modelo de insurrección directamente político, en el primer caso, para justificar y legitimar un golpe de Estado, una manifestación contra el gobierno, en el segundo caso como parte de un paro político para derrocar al gobierno, y en el tercer caso también dentro de un esquema político – insurreccional, conocido como "guarimba". En todos estos casos, estas muertes son presentadas como hechos directamente políticos, se adjudican al gobierno, constituyen "violación de derechos humanos", terrorismo de Estado", que se le imputan al gobierno como culpable.

Los patrones repetitivos de estos formatos serían;

• Derramamiento de sangre como factor legitimador y movilizador del golpe.

• Colocación de una masa humana

• Extrema manipulación mediática

• Presencia de un dispositivo militar o paramilitar

HIPÓTESIS

No dudamos que estos patrones repetitivos de alguna forma y combinación pudieran formar parte del plan del imperio para el día 23 de febrero. Podrían tratar que haya necesariamente derramamiento de sangre, podrían tener listos los francotiradores o pistoleros, para culpar al gobierno bolivariano de una "masacre" y así alimentar la matriz que ya han creado los medios occidentales de un "régimen contra el pueblo" y un "Maduro dictador", esto va acompañado del otro factor, una extrema manipulación de los medios, videos ya preparados, trucados, etc., que esta vez va a ser más brutal que nunca y servirían para engañar a la opinión pública mundial, sobre todo la de EEUU para que baje su resistencia ante una eventual intervención militar, lograr más aislamiento y nuevas sanciones contra Venezuela. La masa humana como carne de cañón, sería esa que ya han venido organizando en torno a la supuesta "ayuda humanitaria" y posiblemente pondría los muertos, tal vez la quieran usar si pueden de escudo humano contra las fuerzas del orden para desmoralizarlas y neutralizarlas. Todo ello serviría de escenario propicio para que entre en escena en el momento oportuno el dispositivo militar o paramilitar previamente preparado, la tan proclamada "sublevación" de los militares venezolanos que apoyan la "ayuda humanitaria", tal vez con los uniformes de la fuerza armada bolivariana, si hasta ahora no han logrado mayores deserciones, entonces se trataría de mercenarios y antiguos desertores, pero serían presentados como activos. De acuerdo al desarrollo de los acontecimientos, la correlación de fuerzas y en alguna fase que lo permitiera, si no son detenidos, no excluimos que se intente el objetivo dorado de EEUU, que las fuerzas paramilitares desde Colombia y guarimberos armados intenten tomar por asalto al Estado Táchira, y crear allí la soñada cabeza de playa, dotar al "presidente encargado" de un territorio y un miniestado que le sirva para su objetivo ya declarado de "autorizar" desde allí una intervención militar en Venezuela, la construcción de un Benghazi en suelo venezolano. Tal vez, sería esta la razón por la cual el Vicepresidente de gobierno de EEUU, Pence, en la conferencia de seguridad en Munich que se celebra estos días, tanto se esforzó por presionar sin éxito a sus aliados europeos de que ya pasaran a reconocer a Guaidó, no simplemente como "presidente encargado o interino", sino ya directamente como único presidente legítimo de Venezuela, ya que se pudiera suponer que se esperaría según el guión ya aprobado que Guaidó tome eventualmente una muy importante "decisión", es decir, la "autorización" de una intervención militar que el mundo debería aceptarla como "legítima" por el "presidente legítimo". La eventual toma del Táchira serviría para presionar severamente al gobierno bolivariano para que acepte la proposición pacífica envenenada de unas nuevas elecciones presidenciales, pero sin el actual CNE, ni el sistema de votación.

Hay que decir que para lograr este escenario se están empleando a fondo y de hecho se han comprometido imprudentemente. Esto lo revela las instrucciones que le han dado a Guaidó de declarar que la "ayuda humanitaria" entra "si o si en Venezuela" ese día, y el señor Bulton por su parte declarar que ya están en conversaciones con los oficiales activos que van a desertar ese día. Esto es muy arriesgado, porque si la famosa "ayuda" no entra, entonces Guaidó termina por desinflarse y su "reconocimiento internacional" pierde fuerza, y si no aparecen los famosos militares golpistas aunque fuesen de comiquita, entonces Bulton queda como un tigre sin dientes o un halcón desplumado. Están recurriendo incluso a "refuerzos", el belicista congresista Marcos Rubio ha aterrizado en Colombia para hacerse la "foto" y aumentar raiting. En fin se estarían tomando en serio esta apuesta y se la querrían jugar a una sola carta, puesto que están muy presionados de tiempo y saben que van perdiendo a pesar de todo su poderío y lo que digan. Los círculos de negocios de ese país que se beneficiaban del petróleo venezolano comienzan a inquietarse, les engañaron y les dijeron que era una cosa relámpago, pero " business are business", y sus reservas duran solo para varios meses, el precio del petróleo sube, los demócratas siguen avanzando, están al acecho y se benefician de la situación a la espera del más mínimo error de Trump, el cual también se desespera porque tiene más cosas importantes que hacer para tratar de asegurar su reelección y no quiere depender de los errores de la oposición venezolana que lo salpiquen y lo empantanen, los aliados ya se están enfriando, al invocar en Europa el saludo de Trump en el discurso de Pence, ya nadie aplaude, tampoco no les ha gustado para nada que Trump les chantajee amenazando con enviarles la escoria terrorista del Estado islámico, las cosas no les están saliendo bien y a pesar de todo el Armagedón lanzado contra Venezuela, Maduro, ni los generales patriotas no ceden ni un milímetro.

Claro una cosa es tener un plan y otra cosa es que tenga éxito, y los bolivarianos no les vamos a hacer el favor. Este enfoque desesperado del plan del imperio sería en sí mismo una debilidad, volverían a subestimar a los bolivarianos. Por supuesto que este plan no sería para nada "invencible" se puede derrotar y hay que derrotarlo si se toman las medidas adecuadas, no dudamos que el gobierno bolivariano trabaja en esa dirección, manejando escenarios. En realidad nos estarían regalando una buena oportunidad porque se estarían jugando la guerra a una batalla decisiva, porque si son derrotados como estamos seguros que así serían, su derrota sería también muy decisiva.

Esta es una hipótesis estrictamente personal. Algunos compatriotas piensan que ese día no va a pasar nada, ojalá tengan razón ellos y que nosotros nos equivoquemos. En ese caso preferiríamos habernos equivocado, nos alegraría mucho sinceramente estar equivocados en este asunto, los bolivarianos somos pacíficos no queremos guerra, pero somos patriotas y pensamos que es mejor prepararnos para una confrontación y que no nos tomen jamás desprevenidos, eso sí que sería muy triste. El enemigo a quien nos enfrentamos ha demostrado que es criminal y despiadado y no respeta nada. Como se ha recordado mucho en estos días, "si quieres paz, prepárate para la guerra", la mejor forma de evitar una confrontación es que se logre una tan elevada capacidad disuasiva que el enemigo sepa que no tiene posibilidades de éxito y que además sepa que le estamos esperando.

Pero como es mejor prevenir que tener que lamentar, por eso, para cada uno de los factores mencionados en esta hipótesis del plan del imperio debería prepararse un antídoto eficaz. Prudentemente debería existir una distancia que impida el uso del escudo humano, así como el uso adecuado en caso de necesidad de los recursos legítimos antidisturbios, si hay que cerrar la frontera no dudarlo, la vigilancia potenciada al máximo, las fuerzas estratégicamente desplegadas y preparadas, desplegar también todo nuestro poderío mediático y el de cada ciudadano patriota, el uso de las redes sociales, cada cual tomando fotos y videos por todos los medios a todos los movimientos sospechosos que vea, pueblo en la calle y movilizado. Actuar rápido, mientras más rápido se les derrote el plan, menos posibilidad tendrán de pasar a sus otras fases. Mantener todo el tiempo una correlación de fuerzas abrumadora del lado de la revolución. Aprobar un plan especial integral para el Táchira, reforzar con un despliegue adicional de los claps para ese territorio. Dado el caso, no vacilar como Gadhaffi paralizado a las puertas de Benghazi. La mejor estrategia ante el plan del imperio es: ¡ni un paso atrás!