"Una sola gota no transformará a la empresa, pero juntos seremos un aguacero que transformará la distribución del gas en el país" (Jacob Grey, el farsante)
El ciudadano Presidente de la república Bolivariana de Venezuela Nicolás Maduro Moros denunció que la oposición intenta comprar a importantes funcionarios de empresas públicas: "Una de las estrategias que tienen los enemigos de Venezuela es comprar con dólares a funcionarios importantes, de empresas públicas para que saboteen algunos servicios públicos", Esta afirmación del sr presidente se da en el marco de la detención del presidente de Gas Comunal Jacob Grey y compañía, que desgraciadamente tenían un negocio redondo con la venta de las bombonas de gas doméstico para su propio beneficio económico y que es una constante en todo el país y en otros sectores como el caso de la gasolina donde funcionarios públicos y privados se favorecen con el negociado de vital producto sin que los órganos correspondientes investiguen y castiguen.
Vivimos en una sociedad de cómplices donde cualquier funcionario con cierto poder, desarrolla una tramoya de corrupción, negocios, mal manejos que tributan en beneficio de una mafia de cuello blanco, que juega con las necesidades de la gente, que se burla de las leyes y cuando algunos logran ser sancionado es porque no quiso compartir la coima con otro y fue delatado. Los Gobernadores, los Alcaldes, los Concejos Municipales y los Consejos Legislativo de los estados y los diputados de la Asamblea Nacional, que de acuerdo a la ley deben controlar y denunciar todos esos hechos nocivos para la moral y la sanidad de la nación, se hacen de la vista gorda , dejan hacer , dejan pasar y muchos de ellos están insertos en la red de corrupción, matraca y lo más triste y repugnante es que uno los ve paseándose, regodeándose alegremente en carros de lujos , en pomposas quintas y luciendo una vida que antes de llegar a esos cargos de elección popular no las tenían
Sr presidente, en sus afirmaciones hay muchas verdades, pues la oposición y los enemigos de la patria juegan al caos, pero que un "revolucionario "se corrompa es por su propia culpa, por sus anti valores impregnados en su conciencia, y no porque un malsana oposición este detrás de ellos, porque así fuera, un verdadero revolucionario debe tener la valentía el coraje suficiente para enfrentarlos y denunciarlos públicamente
Por otro lado sr presidente , mientras la corrupción carcome los cimiento de la patria, las sanciones unilaterales impuestas por el genocida imperio estadounidenses y sus adláteres: la Unión Europea, y algunos arrastrados del continente americano, la pandemia del Covid 19, y los errores cometidos por la propia revolución bolivariana hacen mella en la calidad de vida de los venezolanos y en el funcionamiento de los servicios básicos pero lo que no entiende es el progresivo y extraño aumento desmedido de la mayorías de los servicios públicos y privados, así como el alza continuada y criminal de los alimentos y medicinas que contrasta con un efímero salario que devengamos los trabajadores ( paquete neoliberal criollo)
Sr presidente, por ejemplo el incremento escondido e inconsulto de las tarifas del servicio eléctrico donde se prorratean tarifas de algunos usuarios que van desde el millón de Bs hasta cifras inconmensurables, de ciudadanos que no devengan un salario mínimo y la respuesta inquisitoria de la operadora Corpoelec la fundamenta en la inflación y no en el consumo del kilovatio/hora, pues no se está midiendo el servicio eléctrico de los usuarios residenciales y en cuanto a los usuarios industriales y comerciales no se le fiscaliza y cuando se hace, muchos funcionarios de la Corporación les cabronean o le disfrazan el consumo
O cuando mensualmente nos aumentan las tarifas de gas doméstico de manera inconsulta e ilegal y en moneda extranjera, saltándose el código de comercio y la propia constitución nacional. Así mismo, el aumento salvaje del servicio de aseo, agua, telefonía móvil y televisión por suscripción. Etc., etc. Esto sr presidente es un sabotaje criminal que nos está haciendo el sector público y privado a la clase trabajadora y al pueblo venezolano
En este sentido sr presidente, todo sabemos que las sanciones y el bloqueo criminal aupado por la extrema derecha venezolana y conducido por los gobierno de Estado Unidos afecta la calidad de vida del pueblo venezolano, pues al gobierno nacional se le dificulta la venta de nuestras materias primas y por ende la entrada de divisas que debilitan el erario público y las cuentas nacionales. Pero trasladar el costo de los servicios básicos al pueblo humilde que apenas ganas para sobrevivir, ¿es una medida humanitaria y cónsona con el ideario socialista?
¿O es Sr presidente que Ud. no se ha enterado que estos nefastos aumentos atropellan la dignidad humana y comprometen la existencia de los venezolanos?
¿O es que los ministros o altos gerentes para expresarle a usted que tal o cual empresa están dando dividendos y son eficientes, sin advertirles que esos dividendos los están pagando la clase trabajadora con sangre sudor y lágrimas?
¿O de empresas y fundaciones públicas que les desviaban los beneficios de sus trabajadores para hacerlos aparecer como ganancias cuando nunca las obtuvieron?
Sr presidente pare esos aumentos ilegales, inconstitucionales y ordene una revisión inmediata de esas compañías públicas y privadas que mensualmente disparan las tarifas sin consultar a los usuarios y además lo hacen bajo la premisa del dólar negro criminal, haciéndole el juego a la oposición extrema, pues esos aumentos con un salario empobrecido es un caldo de cultivo para la rabia y la ira de un pueblo que todavía confía en la revolución bolivariana, pero que esto acelera el descontento y la desilusión de la gente y mal pone al gobierno
Además sr presidente verifique con los órganos correspondientes si el dinero que le están entrando a las empresas públicas por el aumento desmedido de los servicios no se están desviando a cuentas personales de funcionarios corruptos y apátridas, como los ya denunciados por Ud. mismo en reiteradas ocasiones
¡Ya basta! el pueblo no puede seguir pagando las sanciones y corruptelas de una clase política que se ha robado Citgo, monómeros y cuantos bienes cuenta la república en el exterior y de una dirigencia política que se viste de rojo, y que hasta ahora el pulso y el ojo del Tribunal Supremo de Justicia , la Fiscalía General de la República, la Contraloría General , la Procuraduría Nacional , la Asamblea Nacional y el propio Ejecutivo no se den por enterados, o volteen la mirada hacia otro lado, y dejan que estos latrocinios continúen contra la nación Algo huele mal en Dinamarca sr presidente. ¡ Es tiempo de actuar!.
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