En mis próximos artículos en esta página web, que es la única a la cual envío mis escritos, les daré mi versión y visión de lo que ha sucedido en Venezuela durante los últimos 80 años de mi vida. Nadie me la contó, he sido víctima, testigo, espectador y actor de esta etapa de la historia patria. Mi visión está fundamentada en la tesis expresada por Karl Marx, cuando concluye que la historia de la humanidad, ES LA HISTORIA DE LA LUCHA DE CLASES SOCIALES POR EL PODER Y APROPIACION DE LOS MEDIOS DE PRODUCCION. Mi visión y versión no espero sea compartida por nadie, pues cada quien percibe la realidad, según sus expectativas y del lado donde estaba cuando sucedieron los hechos.
En esta versión de la historia, que pretendo hacer a partir de hoy y donde voy a estar involucrado, no va a estar escrita para la posteridad, sino para el debate entre generaciones de venezolanos que TODAVIA estamos vivos y actuando dentro del acontecer político nacional. La experiencia me ha enseñado que no existen hechos buenos y sucesos malos, la vida cotidiana se mueve entre LA VERDAD Y LA MENTIRA y que la mentira tiene patas cortas. Es una ocasión para enriquecer y construir una visión holística de la historia Patria con el aporte que hagan los lectores de estos artículos que a partir de hoy coloco ante sus ojos.
INTRODUCCION: PREPARANDO AL PACIENTE.
Como son 80 años de historia y yo acabo de cumplir 81, pienso debo comenzar por describir muy someramente como era la situación en Venezuela para el momento cuando yo nací: Un país semi feudal con una población de 3.5 millones de habitantes, el 80 % habitando en el sector rural y el otro 20% en unos espacios llamados urbanos que no pasaban de 10. Un país donde su población estaba sumido en enfermedades endémicas, miseria, analfabetismo y que en lo político estaba comenzando a salir del régimen de gobierno gomecista, el cual durante 36 años había reinado despóticamente y entregado la soberanía del país a las compañías petroleras.
1940, General Eleazar López Contreras, presidente de los Estados Unidos de Venezuela. 1952, General Marcos Evangelista Pérez Jiménez, Presidente de Venezuela. 1.959, Rómulo Betancourt, Presidente de la República de Venezuela. 2021, Nicolás Maduro Moros, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela
Durante 58 años (1900-1958) estuvo el naciente imperio norteamericano preparando el terreno y condiciones adecuadas, que les permitiera comenzar a vender su modelo de democracia política a los pueblos del mundo y Venezuela fue seleccionado como el país donde se realizaría la primera fase de experimentación. Ya la población había sido ablandada con 58 años de gobiernos sumisos y colaboradores, ya las policías políticas estaban entrenadas, los campos de concentración y torturas habían probados su eficacia, ya el estamento militar había sido entrenado y concientizado de cuál era su papel, ya en lo económico habían logrado instalar un capitalismo minero extractor de minerales y exportador de materias primas, ya en lo cultural la mayoría de la población se estaba modernizando y adoraban el modelo de vida que se mostraba en los campamentos petroleros y en los comisariatos, los productos de consumo masivo que se importaban desde el norte. El mandado estaba hecho. Solo faltaba meter al paciente en el quirófano para hacerle el trasplante cerebral, pues el de corazón había sido exitoso.
Con la salida de Pérez el 23 de enero de 1958, ya el quirófano estaba listo para dar inicio a la operación "Democracia Representativa" en el cerebro del pueblo venezolano. El paciente estaba listo para que se le aplicara la anestesia e iniciar la intervención quirúrgica que cambiaría su modo de percibir, sentir y aceptar la preminencia de los EE.UU. sobre los pueblos del continente. Ya previamente se había realizado la selección y preparación de los galenos para realizar el trabajo: Rómulo Betancourt, Rafael Caldera y Jovito Villalba, los cuales se reunieron en la Quinta Punto Fijo, propiedad del Dr. Caldera, donde firmaron el documento laboral y juraron ser: Leales Siempre, y Traidores Nunca.!
Esta operación de cuyo éxito no se dudaba, debido al apoyo logístico que recibiría y a la calidad de sus operadores, arrancó con mucha fuerza y optimismo, pues el paciente ya había sido preparado y se les habían hecho todos los exámenes, por los gobiernos de turno, desde Juan Vicente Gómez hasta Pérez Jiménez (58 años) y aun así, parte del cuerpo hizo resistencia, tal fue así que solamente el asimilar la anestesia, le costó 10 años de trabajo al galeno Rómulo Betancourt, el cual casi pierde la vida. Dosis de Reformas Agrarias, Elecciones cada 5 años, Viviendas rurales, Promoción Popular, Tripartidismo Laboral, no hacían el efecto esperado y hubo que aplicarles: Desapariciones forzosas, masacres selectivas, represión en los barrios, allanamientos en centros educativos, Comandos antiguerrilleros, suspensión de garantías constitucionales, control de la prensa y medios informativos, etc. y aún así no se logró la anestesia total del paciente Pueblo.
En el tiempo que duró esta operación las bombonas de oxígeno que mantenían vivo al paciente no dejaron de funcionar: Se les extrajeron miles de millones de barriles de petróleo exportados hacia el norte y mucha sangre roja de su interior fueron derramadas en calles y campos de su patria; esto hizo que el operado se estuviera quieto pero sin dejar de soñar con un mundo mejor y allí permaneció sedado, entre dormido y despierto, esperando que pasara el efecto de la anestesia, lo cual se prolongó durante 40 largos años.
Próxima entrega: ROMULO BETANCOURT Y RAFAEL CALDERA: LOS ANESTESIOLOGOS.