"Nada hay que sea superior ni más digno que la existencia humana.
ERICK FROMN
"Los pueblos viven de la levadura heroica".
JOSE MARTÍ
"las condiciones existentes hoy en el mundo hacen insostenible este orden infame que estamos soportando y, por tanto en nuestro criterio, la tarea número uno es sembrar ideas, sembrar conciencia, para que cuando ese mundo se derrumbe la humanidad esté mejor preparada para construir sobre sus ruinas un mundo mejor".
FIDEL CASTRO
Hoy; a propósito de estar arribando a sus 157 años de haber sido elevado a la categoría de municipio, nuestro querido pueblo de Santa Cruz de Mora en el Estado Mérida se ve nuevamente azotado por la furia de la naturaleza.
En febrero de 2020 se cumplieron quince (15) años del evento natural denominado La Vaguada de los Andes 2005. Apenas transcurrió un lustro y en el 2010 la naturaleza golpeó de nuevo algunas zonas del Valle del Mocotíes, tal vez no con la contundencia que lo hiciera hace cinco (05) años atrás, pero si hubo afectaciones considerables. El daño mayor recayó en esa oportunidad hacia la zona Sur del Lago, región Nor - Oeste de nuestro Estado (el eje panamericano).
Lo sucedido el 19 y 23 de agosto del año en curso, en el Valle del Mocotíes es un asunto que nos debe convocar a TODOS a la reflexión. Se afirma con cierta banalidad que estos procesos naturales ocurren cada cincuenta (50) o cien (100) años - es el decir del común de la gente - pero NO es así mis queridos paisanos y apreciados lectores; los fenómenos naturales como los de la política resultan casi siempre impredecibles por lo complejo de sus causas y los impactante de sus consecuencias.
Cuando se nos plantea el tema del cuidado y conservación del ambiente y su compatibilidad con el crecimiento poblacional, el desarrollo urbanístico e industrial - modelo civilizatorio errático - en muchos casos implica procesos transformadores de los recursos naturales, en la cual surgen fuertes contradicciones.
Los conflictos emergen cuando ello ocasiona un desequilibrio en los ecosistemas de donde provienen tales recursos, aunado al irreversible cambio climático que para muchos (con capacidad de decisiones) pasa alegremente desapercibido y finalmente las actividades humanas que de manera irracional continúan interviniendo y modificando las condiciones medioambientales; muchas veces sobrepasando los límites permisibles en las relaciones INDIVIDUO – NATURALEZA, necesarias para satisfacer sus necesidades.
LA INCONSCIENCIA SI MATA AL PUEBLO
Ambiente se ha definido desde muchos puntos de vista, considerando aspectos que enfatizan desde lo biológico hasta lo económico, no obstante en una concepción holística pudiéramos resumirla como "el conjunto de condiciones en las cuales se desarrolla la vida de los organismos, comprendiendo factores físicos, biológicos, sociales y culturales". Estos factores, incluyendo al ser humano, están todos en permanente interacción y conforman un sistema, en el cual la modificación de uno de estos factores altera o perturba al resto.
No se concibe por ejemplo, como un fenómeno natural como las vaguadas de 2005 y 2021 causen estragos - menores o mayores en el peor de los casos - de un evento a otro sin poderse evitar los posibles daños que a todas luces resultan científicamente previsibles. Obviamente las lluvias y los aumentos en los niveles pluviométricos no pueden evitarse, pero lo que si podemos contener y aminorar es el impacto de daños colaterales que generan este tipo de suceso medioambiental.
Cabe preguntarse ¿hasta qué punto son responsables los alcaldes como primera autoridad civil, o en su defecto, los directores de catastro, ingeniería municipal y sindicatura. En los distintos poblados que conforman el Valle del Mocotíes (Bailadores, Tovar, Zea y Santa Cruz de Mora) IRÓNICAMENTE hemos tenido estos últimos treinta (30) años a ingenieros forestales, geólogos, geógrafos y hasta médicos epidemiólogos al frente de esas instituciones y como es que consuetudinariamente siguen ocurriendo este tipo de situaciones terriblemente embarazosas que embargan de dolor a innumerables familias.
¡Ojo! NO es mi intención acá generalizar o aludir a alguien en particular, cada quién que asuma su responsabilidad, habrá quien sí haya cumplido con su deber como funcionario, pero lo que hemos observado dista mucho de lo que he querido en llamar la atención. Son muchos los sectores y sitios que fueron duramente golpeados por la vaguada ocurrida en el 2005 y a la fecha de hoy percibimos INEXPLICABLEMENTE construcciones de todo tipo (galpones, edificaciones, viveros, agencias de carros, mini centros comerciales y un largo etc) en lugares NO permitidos por ordenanzas y que representan una altísima vulnerabilidad de riesgos, lo que nos traslada inevitablemente a sospechar que estamos en presencia de prácticas indecorosas como el posible soborno, chanchullos, el cuanto hay pa’ eso y la perniciosa comisión etc. Actividades ilícitas que deberían ser seria y responsablemente investigadas.
UN INFAME AUDIO QUE SE HIZO VIRAL Y TRASCENDIÓ FRONTERAS
Como tovareño de nacimiento y santacrucense de crianza y corazón; como un noble gesto de desagravio quiero expresar mi mayor solidaridad y palabra de aliento a las familias y paisanos que dolorosamente perdieron a sus seres queridos y vieron afectado sus bienes materiales e inmuebles y a la vez deseo CONDENAR enérgicamente y RECHAZAR categóricamente las infelices declaraciones que emitiera por una red social el ciudadano locutor, que por razones que no vienen al caso, omitiré su nombre y que reside acá entre nosotros.
No haré leña del árbol caído, ni me haré eco de comentarios tremendistas, pero quiero emplazar públicamente al ciudadano locutor apodado "el máximo" a que se detracte y en un sano ejercicio de ACTO DE CONTRICIÓN pida PERDÓN por sus ofensivas, deplorables y bochornosas palabras hacia sus coterráneos. Más que una nota de voz que surgiera de una "jodedera" entre grupos, constituye flagrantemente una falta de suma gravedad penalizada en nuestro ordenamiento jurídico como: apología del delito, instigación al odio y asociación para delinquir. Corresponderá a la fiscalía ejercer o no la acción penal contra el ciudadano locutor; que como comunicador social debería ser más cauteloso, precavido y ponderado, porque de sus reprobables declaraciones también surgieron como contraparte malsanos comentarios de personalidades conocidas, que hicieron uso de un vocabulario soez y cargado de epítetos a través de las redes sociales que afectaron la integridad y reputación de terceras personas, incluyendo a familiares y allegados.
Sabrá el ciudadano locutor que ante un hecho punible la responsabilidad ante la ley es netamente individual y que el nocivo efecto de sus palabras "pudieran perjudicar" a ciertos candidatos con enormes posibilidades de vencer en la contienda electoral del próximo 21 de noviembre. Como manifestara recientemente nuestro CY YOUNG orgullo de esta zona Johan Santana: "los andinos no nos hemos caracterizado por este tipo de conductas y posturas que contrastan diametralmente con nuestro acervo cultural y gentilicio" amanecerá y veremos.
HOMBRES DE UNIFORME CON CHARRETERAS Y PRESILLAS ADORNADAS DE INDIGNIDAD E INDECENCIA.
Ya resulta como algo habitual la cotidiana, reiterada y asquerosa manera de proceder de algunos sujetos de la tan cuestionada y desprestigiada Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y que los venezolanos nos hemos adaptado (coactivamente) con relativa facilidad a estos desmanes, donde ciertos señores de uniforme se extralimitan en sus funciones y mal ponen a su ya depauperada institución.
Hemos visto con indignación las inefables prácticas llevadas a cabo por este componente de la fuerza armada en las alcabalas y puntos de control de nuestro Estado, particularmente las que operan en los sectores: la Victoria, Estanques, el Anís y las González. Allí de manera arbitraria y arrogante, obedeciendo "ordenes" según ellos, de sus jerarcas superiores, violentando flagrantemente toda norma y procedimientos, reteniendo, decomisando y prohibiendo el libre tránsito y movilización de la AYUDA HUMANITARIA ( privada y de particulares) en todo sus renglones destinados a palear y mitigar los efectos nefastos ocasionados por la vaguada.
Algunos personeros de la política, la farándula y del estamento religioso corren desesperados a encender la lámpara votiva del patriotismo y la falsa filantropía, no dan puntada sin dedal, quieren hacer indulgencia con escapulario ajeno. Toda una parafernalia para la foto de rigor, el atirantado figurismo y el empalagoso protagonismo, que en un año electoral se exacerba frenéticamente.
Muy rezagados quedan los hombres y mujeres de buena voluntad que conforman la gran familia de socorristas (a la que orgullosamente pertenecí en una época) protección civil, bomberos, personal sanitario, de corpoelec y operadores de máquina que se han abocado en un esfuerzo titánico a brazo partido a solventar las deficiencias y reparar tanto daño causado por la tragedia y al gigantesco batallón de voluntarios, vaya para ellos los verdaderos HEROES ANÓNIMOS mi aplauso prolongado a mano alzada.
