Es impresionante las cosas que han ido saliendo a luz pública, con el tristemente famoso, el desprestigiado y sonado caso de Monómeros…una empresa venezolana que tiene su sede en Colombia y que se caracterizaba por ser una organización empresarial de primer nivel…y era una de las primeras en venta de fertilizantes y con muy buena rentabilidad…y era catalogada como una empresa próspera…hasta que el interino y el presidente de Colombia, hicieron un perverso pacto entre personas que pertenecen a "la derecha decente suramericana"…en la que hubo un acuerdo que consistió en lo siguiente: "tú me reconoces como el presidente interino y podemos compartir las actividades y los recursos para ayuda humanitaria en la frontera Colombo – Venezolana…y tenemos que apoderarnos de Monómeros y quitársela a la dictadura de Maduro"…
Cuando se destapan ollas podridas y surgen escándalos que salen a luz pública…existe una creencia popular que dice: "lo peor no ha salido"…eso significa de que estamos en presencia de una serie de denuncias graves sobre ilícitos administrativos…pero que no sabemos lo peor, a menos que se logre constituir una investigación exhaustiva, objetiva e imparcial por una comisión equilibrada que llegue al fondo de cuánto dinero se apropiaron indebidamente y los nombres de quienes se han beneficiados con estos actos de corrupción o repartición de un botín…que son activos que pertenecen a la nación venezolana…
Y para tener derecho a participar en la piñata económica – financiera en la fiesta de Monómeros, "ciertas condiciones aplican"…consistente en que los invitados deberían de cumplir con dos requisitos fundamentales: pertenecer a la derecha más decente y preparada (honestos y tecnócratas)…y ser miembros del G-4, es decir, ser militantes del sector más reaccionario de la oposición política "venezolana" y demostrar ser radicalmente antimadurista…en la que todos los requisitos deberían estar avalado con el visto bueno del interino y el prófugo de la justicia desde su exilio dorado en Madrid…
Ahora tenemos el caso de la madre del jefe de Voluntad Popular, quien actuando como vicepresidenta de la empresa Llorente y Cuencas…le pagaron la cifra de 38 mil dólares por "asesorías en comunicación"…
