¿Quién se iba a imaginar que luego de iniciar un proceso histórico tan hermoso junto al comandante Chávez, veriamos de nuevo la persecución, el sesgo, el intento de aniquilación de los irreverentes, de los críticos después de su partida? Qué difícil es vivir de nuevo esa experiencia donde hoy la izquierda es perseguida por sus posturas en defensa del proyecto original revolucionario.
Todo aquel que piense distinto y discrepe sobre el salto de revolución al neoliberalismo, es un objetivo y hay que buscar la manera de neutralizarlo como sea, ya que están arrechos como Capriles con los no alineados.
¡Busquenle todo lo que tengan, cualquier cable pelado y si no tienen nada, se lo creamos!. ¡Ya me tienen arrecha y ellos no pueden seguir retandonos!
Expresión del desespero que conduce a las torpezas y que profundizan la brecha.
Al día siguiente de esa orden fascista, comenzó el show en contra de Maria Alejandra Díaz y de otros exministros honestos que acompañaron a Chávez donde son ligados en una mezcolanza fotográfica que no va directo al grano, sino hacia la manipulación psicológica de las masas populares revolucionarias, pero es tal su torpeza mediática, que pareciera más bien que todo aquél que intente reividicar a Chávez, es el enemigo a vencer. Todo aquél que ose decir que se opone a sus desmanes, será fulminado por la mediática amarillista y falsa del neoliberalismo. No logran entender el despertamiento popular, que cuando ellos le dicen que algo es malo, de una vez reaccionan y saben que es totalmente lo contrario a lo que plantean por su pérdida de credibilidad. Ya nadie les cree.
A Maria Alejandra Díaz no se le ha escuchado decir hasta ahora, que aspira la presidencia de la República, ya que su planteamiento es de índole crítico. Lo que sí vemos, es a un pueblo revolucionario decepcionado que la percibe como un referente esperanzador y que por ende, se activa en las redes en su favor llamandola algunos candidata, otros exigiendole ser candidata y los más imponentes, planteando de plano que su candidatura es un hecho desde las bases populares. Por esa razón, los neoliberales muy incómodos buscan satanizarla, cuando el error es de ellos por engañar al pueblo y haberlo llevado al borde de la desesperanza que trajo consigo, el desvío del proceso histórico inspirado en el arbol de las tres raices y conducido por Hugo Chávez.
La verdad que la psicología mediática de hoy perdió los papeles, cumple una función mediocre, no funciona como asesora en busca de mantenerse en el poder y hace un trabajo torpe, porque en vez de sumar, restan, decepcionan y profundizan las diferencias..
Cuando uno ve tantas torpezas juntas, donde restan en vez de sumar, que crean mucho malestar en las filas revolucionarias, que fragmentan lo poco que les queda, te preguntas; ¿será una entrega controlada del proceso histórico o es que la torpeza ilimitada está elevada al cuadrado?
Fueron por el PPT, Tupamaro, UPV, MEP y otros movimientos revolucionarios creando una división sin precedentes, persiguen la crítica, nadie puede hablar de lo que a ellos no les gusta, hoy también persiguen y pretenden asaltar al PCV por no concordar con sus políticas neoliberales y pretenden obligar al pueblo con sus consignas manipuladoras a serles leal ajuro.
La lealtades se ganan y estas jamás son obligatorias y menos en un pueblo que se despertó con los campanazos de las miserias y de las mentiras cotidianas de quienes se hacen llamar revolucionarios antiimperialistas, pero con un disfraz de Superman.