Cuadro uno

Cada vez que a la desastrosa oposición venezolana se le acaba la imaginación para atacar a Chávez, o cuando el país navega tranquilo y no hay combustible mediático para mantener encendidas las pantallas, dos o tres loquitos ultra radicales salen a decir que el país está siendo masacrado por la inseguridad. Es un comodín de la vaciedad. Ciertamente, es un tema muy sensible, pero que al ser inflado para propósitos innobles e insustanciales pierde fuerza, se queda en la nada al estrellarse contra la realidad.

Por eso es insólitamente extraño que José Vicente Rangel, a quince días de sacado del Gobierno después de ocho años, ande repitiendo (en actitud de quien descubre el agua tibia) que uno de los grandes problemas de la Venezuela actual es la inseguridad, la delincuencia, y que hace falta Decisión Política para combatir el flagelo. De cinismo está llena la solicitud. ¿Hace falta Decisión Política para atacar ese problema? ¿Hace falta ahorita, luego de que lo bajaran del autobús? ¿Por qué esa voluntad política no hacía falta en julio, agosto, septiembre… diciembre del año pasado?

De otra suerte, ¿está de verdad la delincuencia golpeando al país? Caramba, no. Es la misma delincuencia de siempre, que no es poca, pero es la de siempre y cuidado si ahora un poquito menos, aprovechando el desmantelamiento del bulevar de Sabana Grande.

En correspondencia con el primero, el segundo punto que atormenta al nuevo Rangel es la corrupción. Insistió en ello en la entrevista que concertó con Últimas Noticias luego de su salida de la Vicepresidencia. Remarcó el asunto en una entrevista concedida a la revista Clímax, donde soltó que “la primera institución de Venezuela es la corrupción”. La misma curiosidad viene al caso: las siete plagas de Egipto le cayeron al país luego de que el presidente Chávez despidiera a Rangel.

Cuadro dos

Una búsqueda en los “Aló, Presidente” permitirá determinar que todas las veces que Hugo Chávez se ha referido a Últimas Noticias (para mal o para bien, pero casi siempre a bien), nunca jamás ha dejado de acotar que ese medio le inspiraba confianza porque estaba dirigido por un hombre digno, Eleazar Díaz Rangel. Decía que las denuncias allí presentadas (que la escuela en ruinas, etcétera), le generaban confianza porque Díaz Rangel era un tipo serio.

Pero al reaparecer “Aló, Presidente” los domingos, se quejó amargamente del reportaje que ese mismo domingo había sacado Últimas Noticias sobre un escándalo en el convenio entre Minep-Irán.

Pero esta vez Chávez omitió el nombre de Díaz Rangel y se fue directo a la cabeza: Los Capriles. Por primera vez revelaba que las dos familias involucradas en la sucesión del emporio comunicacional trataron de involucrarlo a él durante el litigio. Chávez, en verdad, estaba mostrando los colmillos a los dueños del medio. Una medida extrema, justificada acaso porque Chávez maneja sospechas de que “la inseguridad” y “la corrupción” empezarían a ser lemas redaccionales en Últimas Noticias. Ya empezaron a serlo en “José Vicente Hoy”. Por cierto, la resolución política de la disputa entre los Carriles López y Capriles Cannizaro fue comisionada a Rangel, quien como solución le planteó a las partes un armisticio. Es decir, les dividió el poder y él se quedó con el poder (ambos bandos atentos a las necesidades de Rangel, no fuera a ser que decidiera simpatías por alguna de las dos familias en determinada coyuntura del país. ¿No es esto maestría, maquiavelismo perfecto?)

“Soy ambidiestro, me manejo con la izquierda y con la derecha”. “Ahora sí conozco el poder”, son otras de las expresiones nucleares lanzadas a la arena mediática por el ex Vicepresidente.


Cuadro tres

El mismísimo Eleazar Díaz Rangel se encargó de la entrevista a Rangel para Últimas Noticias. Ningún riesgo con otro reportero. Había que medir muy exactamente la puesta en escena. No era cosa para novatos.

Entre las perlas allí expresadas por el ex Vicepresidente fue la cerrada defensa que hizo del ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz, también despedido súbitamente y sustituido por el propio hermano de Chávez. En el “Aló, Presidente” del 25 de marzo, al referirse a que había una campañita contra su hermano Adán porque era un socialista duro, “no como otros, que se reunían y cedían”. Una crítica ideológica de Chávez contra Istúriz, líder fundamental de Patria Para Todos, partido que forma parte de la resistencia chavista a Chávez. Desde su salida, dicho sea de paso, Istúriz se ha mantenido callado, luego de que en diciembre fuera una de las pocas voces pepetistas que públicamente dejara saber la necesidad del Partido Único.


Cuadro cuatro

La cueva de corrupción detectada en el Central Azucarero Ezequiel Zamora explotó a través de un Últimas Noticias. Pero no a través de su Unidad de Investigación ni de sus páginas de política. Se hizo expresamente en Los domingos de Díaz Rangel (otro quebradizo del 12 de abril). ¿Por qué no se designó al equipo de redactores para investigar el caso y presentarlo a manera de reportaje? Simple: por entonces no era de interés editorial de los dueños abordar el tema de la corrupción. ¿Rangel?

Sale José Vicente Rangel del Gobierno y empieza la lluvia de denuncias de corrupción en Últimas Noticias, a cuyos dueños Chávez les enseñó los colmillos el día del reciente comentario del lío sucesoral.

Pero la nueva política editorial (la nueva) de Últimas Noticias tiene un componente curioso: la misión de reportear los casos de corrupción fue designada expresamente a Luz Mely Reyes, coordinadora del diario que, a estas alturas de su carrera, había dejado ya el reporterismo en caliente. Reyes cumple con características especiales: sabe cómo se bate el cobre en la política, y si algo no la caracteriza es precisamente la ingenuidad. Así que destinarla expresamente a “investigar” y redactar los casos de corrupción, es un dato muy revelador.


Descuadro

A menos que se trate de un plan de grandes ligas del que sólo Chávez y Rangel están enterados, para asegurar la efectividad de la estrategia. En el actual contexto nacional, ¿es lo mismo una denuncia de corrupción de Antonio Ledezma que de Rangel? Si Rangel y Chávez están concertados, lo que se está creando es una oposición chavista para los chavistas, sector inundado de ineptos, en parte gracias a impunidad que produce el no contar con una oposición pro país.

Que Chávez y Rangel estén de acuerdo en esta misión mágica no es una opción que tenga mucha coherencia, apenas una que otra pieza encaja: la patética carta del ministro Morejón a Díaz Rangel. Una amenaza como esa es inconcebible en Chávez, por tanto es de Morejón, quien a la advertencia de Chávez a las dos familias Capriles, reacciona como un imbécil. Pero reacciones como la de Morejón sólo podrían generarse si el plan es exclusivo entre Chávez y Rangel. Morejón, de algún, es la primera víctima exhibida de la ineptitud chavista. Oposición endógena se llama esa vaina.

FIN

A los que tuvieron la gentileza de leer esta reflexión, les tengo una buena noticia: Ya está en las librerías de Caracas lo que ha de constituirse en la panacea a uno de los principales dramas del Gobierno. Lleva por título “A propósito de la falla tectónica de la Revolución Bolivariana: propuesta para un Sistema Comunicacional Transformador”.

Lo ha escrito Douglas Bolívar (es decir, yo) y puede conseguirse en las librerías Macondo, en el Centro Comercial Chacaíto, y en Lectura, en el mismo centro comercial. En librería Suma, en el bulevar de Sabana Grande; en librería Ludens de la torre Polar, y en la librería El Pasillo en el corredor de Ingeniería de la UCV (donde el turco).

douglasbolivar@gmail.com