Con el comienzo de la campaña electoral presidencial venezolana, se han presentado algunas particularidades que son muy significativas y que son dignas de analizar, ya que desde el día jueves 4 de julio hasta el jueves 25 de julio del 2024, se convierten en las tres semanas de "la parte estelar" del proceso electoral y que luego culmina con el llamado "día cumbre electoral" el domingo 28 de julio del 2024…
Uno de los aspecto más llamativo por su carga demagógica es la actitud sospechosa del gobierno estadounidense de querer regresar al dialogo directo y supuestamente constructivo con el gobierno nacional, es decir, "casualmente" con el arranque de la campaña electoral, tienen unos propósitos de ver cómo pueden lograr a través de la amenaza con más sanciones, cuando buscan mejorar la imagen de la oposición política más radicalmente antichavista y pro imperialista…
Por un lado, el gobierno estadounidense, logró posponer la fecha de la subasta de Citgo para el mes de septiembre y así evitar que esa situación perjudique electoralmente a la oposición más extremista y a su vez, el chavismo no pueda aprovechar ese escenario, que definitivamente los beneficia, por lo tanto, quieren negociar en una mesa de dialogo, que no vayan a inhabilitar la tarjeta electoral de La MUD, lo cual sería una total fatalidad para las pocas esperanzas que los opositores tienen de ganar las elecciones…
Por supuesto que el gobierno nacional va a solicitarle al gobierno estadounidense que prive la sensatez, el respeto a la soberanía y la libre autodeterminación de los pueblos en esta reanudación del dialogo, en la que deberían ser unas elecciones libre de sanciones y bloqueos…
Y el otro curioso elemento con características del más vulgar oportunismo electoral o simplemente demagogia pura, cuando un grupo de partidos políticos de las oposición venezolana, quieren comenzar su campaña electoral en Cumanacoa y vayan a recolectar ropa y comida para los miles de personas damnificadas, por los efectos de las lluvias…
Por supuesto que hay una reflexión clave en esta "desinteresada" ayuda humanitaria de los partidos políticos de la derecha, cuando uno se pregunta: ¿Por qué no lo hicieron con Las tejerías, Estado Aragua o con Tovar, Estado Mérida?...