Gracias lectores por acompañarnos y por favor lean y ayúdennos a difundir lo siguiente. Una obra faraónica levantada en medio de la nada y que simboliza la controvertida política de seguridad del presidente Nayib Bukele, es el calificado Centro de Confinamiento del Terrorismo" bautizado con tan rimbombante nombre el 31 de enero 2023 por el mandatario salvadoreño ultraderechista, quien ha convertido a su administración en prisión de interesado símbolo de su "guerra contra las pandillas" y política de seguridad que, le dio popularidad nacional e internacional.
El lugar fue presentado a los salvadoreños en cadena nacional de radio y televisión como "la cárcel más grande de toda América", un espacio exclusivo para los perfilados como altos rangos de la Mara Salvatrucha y de la del Barrio 18, pandillas rivales que fueron aumentando su poder durante décadas reclutando jóvenes y en control de territorios, sembraron terror, división y muerte en la nación centroamericana.
En 2025 tras la deportación de cientos de migrantes desde Estados Unidos a El Salvador, se convirtió en una de las herramientas del gobierno de Donald Trump en la implementación de su política migratoria. Bukele publicó en redes sociales que 238 presuntos miembros de la banda criminal venezolana "Tren de Aragua" habían llegado, junto con otros supuestos 23 miembros de otra facción delincuente.
El arribo de los migrantes venezolanos a El Salvador se da en el marco de un acuerdo por el cual Trump le pagará al gobierno salvadoreño 6 millones de dólares para que albergue a unos 300 migrantes por un año, según informó la agencia de noticias AP, "un acuerdo sin precedentes" lo llamó Bukele además de alardear catalogándolo "el más extraordinario del mundo"; en febrero 2025 el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio reunido con Bukele en su gira confirmó que, El Salvador había accedido a recibir deportados de otras nacionalidades, Bukele informó además que, "los detenidos fueron trasladados de inmediato a la cárcel Cecot donde permanecerán un año".
Por coincidencia, un día antes de redactar la presente, hablaba en casa con una de mis nueras, quien comentó como a venezolanos migrantes en su paso por El Salvador os hicieron presos y les estaban dejando sin pelo antes de llevaros a unos refugios, en realidad eran trasladados esposados, es decir presos sin consideración y con maltratos, por ser venezolanos, aislaron a sus familias para tenerlos vigilados y en líneas generales pasan esos compatriotas venezolanos migrantes, a formar parte de quienes en el exterior "llevan roncha", para decirlo en lenguajes coloquial nuestro.
Un comunicado del gobierno venezolano con fecha 17 de marzo, advierte a quienes siendo compatriotas venezolanos, estén viajando o residan ilegal o legalmente en EE UU que, en su política desenfrenada de exportación de migrantes, Trump el revanchista ultraderechista jefe de estado gringo, ha dado permiso de los maltratos a las y los venezolanos incluyendo niños y ancianos, como una manera de amenazarnos y a la cual no estamos sino adv8rtiendo a nuestra gente cuidarse de las formas ideadas para irrespetarles sus derechos humanos.
Ya sabemos que en la locura yanky siglo XXI, Trump se ha desalineado de la OMS -Organización Mundial de la Salud- y no hará caso a cualquier insinuación o sugerencia de la Cote Suprema de Justicia, tampoco lo han hecho desorbitados gringos dictadores imperiales, con las decisiones de la ONU o las de la adulante OEA, con el ya saliente sureño Almagro, nos aplican la "Doctrina Monroe", aquella de "América para los norteamericanos", sin tomar en cuenta que, no somos su "patrio de atrás" sino el mundo entero, ha cambiado y organizaciones nuevas como los BRICS tienen en su influencia representan el 68% de los habitantes del mundo, además de ser obvio como defienden su comercialización global China, Rusia, India, Turquía, Irán, Sudáfrica, Arabia Saudita y muchos más, parte de ellos, impedidos de defender la antigua influencia imperialista estado8ni¿ense, la cual va quedando anulada y sus sanciones arancelarias son respondidas con la misma moneda para sancionar a sus productos gringos.
