"Pero nos hemos escapado,
ustedes no comprenden
nada."
Manifiesto de los Estudiantes de Letras,
Universidad Central de Venezuela,
1969
"La oposición es una orgía de difuntos."
José Vicente Rangel,
vicepresidente de Venezuela,
programa Como
ustedes pueden ver, 3 de junio de 2003
El país se les fue de las manos. Convocan a Catiazos, Vargazos, etceterazos y ya no es como en el Firmazo que, aunque no convocó los millones que Súmate alega, al menos congregó gente, tanto como para ilusionarse con un Exitazo, que más bien lució un Excitazo. A los -azos ya no acuden ni los más enardecidos sino los funcionarios de partido, en autobuses. Todos los medios vocearon los eventos, días y días, y ahora hay que calcular cuántos millardos en publicidad costó cada elitesco asistente. No es problema mío, claro, pero me alarma que nadie de aquel lado de la cancha como que se está dando cuenta de la gravedad del asunto.
Porque ¿dónde está la multitud que marchó el 11 de abril de 2002? Dicen que fueron 2.500.000, que en una ciudad de 4.000.000 suena a cifra de Súmate. El Washington Post, más apolíneo, la calculó en 150.000. Sea como haya sido, fue mucha más multitud que las cientos de estantiguas que aparecieron en las calles el 11 de abril de 2003. Pero mientras más grande aleguen que fue la marcha de 2002, mayor es el descalabro que vengo prosando.
Si es verdad lo que dicen del totalitarismo en ciernes, pues peor para ellos, porque se quedaron indefensos ante él, por culpa de esa dirigencia marrullera que se dejaron montar. Siempre fue inepta esa dirigencia. No estoy descubriendo nada. Ahí están los 40 años. No es que del otro lado todo sea eficacia —ahí está la falta de una política de comunicación después de cuatro años, por ejemplo—, pero estamos ante un orden de magnitud que da vértigo. De todos modos ese totalitarismo que aún no cuaja después de cuatro años es el más libertino que conozcan los anales. Un totalitarismo en donde se mienta impunemente la madre del Presidente por televisión es un totalitarismo bien raro. No leí el libro que consultan los que dicen que es dictadura la que tolera y sobrevive a 17.000 mensajes publicitarios hostiles durante 24 horas, siete días a la semana, en dos meses de furia expresionista. Sería bueno que publicaran esa bibliografía delirante.
Desabastecen los supermercados y en las calles, sobre todo las populares, hay una cornucopia. Ve y ve. Algunos empresarios chocolatiers tuvieron que pedir cacao. Desampararon a la Gente de Petróleo, su tropa de élite, en pleno campo de batalla, en la chambonería más extravagante que mis ojos hayan visto, y mire que han visto, con el abatimiento causado por años y años de carrera perdidos. Y la producción petrolera igualita o mayor y mejor que antes.
El país se fue por otro camino. Por eso sería bueno que acudieran al último llamado,
porque cuando el amor viene en Otoño,
si le dejamos ir no vuelve
nunca.
(Andrés Eloy Blanco, Florinda en invierno)
La vida no tiene replay.