Sin duda alguna, una de las cuestiones cruciales en los
actuales momentos y que forman parte del debate político global, tiene que
ver con la democracia y el desarrollo humano. Inclusive, en los centros de
investigación mundial se discute y analiza la democracia, su futuro y la
necesidad de profundizarla para alcanzar niveles más elevados de
gobernabilidad. En ese sentido, la Organización de las Naciones Unidas
(ONU), a través del Programa para el Desarrollo (PNUD) ha venido
estableciendo pautas y formulando propuestas para consolidar la democracia
en los países y lograr que las mismas sean instrumento para alcanzar
desarrollo humano.
Precisamente, nuestro país viene dando pasos importantes que
apuntan en esa dirección y donde el gobierno nacional, junto con el pueblo
viene impulsando una nueva visión de lo que es y constituye la democracia.
Enmarcado en esa visión paradigmática y con el propósito firme
de lograr el desarrollo político, económico y social, el gobierno
revolucionario ha abierto las compuertas de la participación política para
que sean las mismas comunidades las que influyan en la toma de decisiones.
El hecho mismo de gozar de libertad política y poder participar en las
decisiones que afectan la vida de la comunidad donde se vive, constituye un
avance y progreso democrático.
Tal como lo señala el PNUD, la democracia como sistema de
gobierno debe estar al servicio de todos, particularmente de los pobres, los
más necesitados, los excluidos. Puede decirse entonces que el gobierno
venezolano viene ejecutando un conjunto de proyectos y desarrollando una
serie de acciones que responden a la intención de avanzar en eso que se
define como Desarrollo Humano.
Como referencia se señalan tres casos concretos: En primer
lugar, el Plan Nacional de Alfabetización o Misión Robinson, con el programa
"Yo sí puedo", a través del cual se enseña a leer y escribir. En segundo
lugar, está el programa "Barrio Adentro", que brinda atención médica a los
pobres, a los que siempre habían estado excluidos por el sistema. Por último
vale mencionar el Programa "La Biblioteca Familiar" mediante el cual el
gobierno nacional hace entrega de un paquete de libros a cientos de
estudiantes de las escuelas y liceos de la capital de república, y que se
extenderá en los próximos a los diferentes estados del país.
Así observamos, por un lado, una democracia que funciona y un
gobierno que lucha por atender las necesidades de los ciudadanos,
particularmente de los más necesitados; y por el otro, la aplicación de un
conjunto de principios y valores fundamentales que permiten que los pobres
reciban poder a través de la participación y al mismo tiempo se le brinda
atención y seguridad para que sean ciudadanos integrales de la sociedad.
Ampliar y consolidar la democracia es la propuesta central del
gobierno nacional, impulsada a través del proceso revolucionario que se vive
en Venezuela desde 1998. Por supuesto, el mismo a tocado poderosos
intereses, que no aceptan la voluntad general del pueblo, manifestada una y
otra vez. Mientras los detractores y golpistas sucumben en su propia
precariedad, el gobierno revolucionario se dedica a profundizar la
democracia y alcanzar el desarrollo humano.
(*) Politólogo. MSc en Ciencia Política.