Rafael Poleo, el padre de la presunta, la misma que vimos el 12 de abril correr cual rata en el estacionamiento de Miraflores, y que salió cual alma que lleva el diablo cuando se le vinculó, con suficientes indicios, al horrible crimen del Fiscal valiente; Rafael Poleo, el mismo al que le dieron una patada en el trasero y tuvo que abandonar el país en unos de los tantos gobiernos de la pseudodemocracia y que ahora, en un gobierno que él y la mayoría de los escuálidos, que se la dan de dirigentes tildan de dictadura, Poleo, de la manera más repugnante, deleznable, inaceptable se atreve a decir lo que dijo por Globoterror (tenía que ser), que no es otra cosa que una burda y directa apología del delito cuando afirma que el Presidente Chávez “va a morir como Mussulini, colgado con la cabeza para abajo”.
El atrevimiento, el irrespeto, la ofensa, la calumnia que conforman delitos flagrantes no solo por parte de este aborto de la naturaleza, sino de muchos de los que desfilan por globoterror y los medios golpistas, en una especie de centrífuga, porque siempre son las misma caras, llenas de odio, desencajadas por la rabia de que un pueblo haya tomado su verdadero rol, en una verdadera democracia; ese comportamiento casi cotidiano, las 24 horas del día debe ser frenado de alguna manera, las leyes son muy claras y que no vengan a decir que se les está persiguiendo o violando su derecho de expresión, pues ese derecho tiene sus límites cuando el mismo transpone el umbral hacia una conducta delictiva y es eso lo que estamos viendo, y a la espera de que las instituciones actúen, apliquen la ley y sienten precedentes definitivos, y los políticos y embajadores, muestren hasta el cansancio, declaraciones como la de otro que hay que meter en el mismo montón de desgraciados, del filósofo, venido a delincuente desde tiempos inmemoriales, para que fuera del país y en los organismos internacionales se vea quién viola los principios de la libertad de expresión y quien lleva 10 años aguantando junto con el pueblo los más desproporcionados y desafortunados improperios.
La reacción del Joven Ministro Andrés Izarra, apropiadas, contundentes y si miedo, son compartidas por las gran mayoría de los venezolanos, pero no nos podemos quedar hasta allí, hay que dar los siguientes pasos y colocar en manos de la justicia a estos indeseables delincuentes, si no se quiere que el pueblo cansado de tanta impunidad tome justicia por sus propias manos, como ya empezó a verse con la acción del Colectivo “La Piedrita”, a las puertas de uno de los epicentros del golpismo y la desestabilización.-
LOS “PLUMAS LOCAS”
Hay otros de la misma cofradía, o mejor de la misma patota del Poleo, que se dan a la tarea de escribir mentiras como la que hoy le leí a un tal Danilo Ardila, (debe ser del otro lado de la frontera por ese apellido), quien sin empacho cuando se refiere a que en este año han sido asesinados 8 periodistas en América Latina, mete a Venezuela en el mismo saco de otros, en donde el estado ha tenido participación directa o indirecta. Aquí jamás en este gobierno ha sido asesinado una periodista por la fuerza pública, las razones y los móviles de los que lamentablemente han muerto, han sido aclaradas de manera más que suficiente y los asesinos están presos, y la muerte dolorosa del que aparece asesinado este año, figura estelar del noticiero de RCTV, ya se sabe en qué circunstancias sucedió, tales que ni el mismo canal, furibundo enemigo y golpista declarado contra el Gobierno, se atrevió a acusar a éste de su trágico fin.
Es por ello que se requiere accionar mecanismos que con pruebas en la mano hagan quedar en evidencia a tanto mentiroso que anda suelto, volcando en los medios el producto de sus odios con la única pretensión de que alguien les crea y así se pueda minar de alguna manera, la inmensa popularidad de que goza este gobierno y su conductor, a los ojos del pueblo y no de forma gratuita sino por un enorme listado de realizaciones en favor de las grandes mayorías, de los excluidos y de los pobres de este país.
