Alegres todos los tachirenses, carabobeños, mirandinos zulianos y habitantes de la Zona metropolitana de Caracas saltábamos de felicidad porque con Pérez Vivas (alias mazamorro), Salas Feo (alias pollo), Capriles Randonzky (alias asalta embajadas) y Ledesma (alias Abuelo Monster), se acabaron los delitos, los estados donde por equivocación llegaron como gobernantes, comenzaron a ser paraísos en la tierra, donde todos los que tenemos la dicha de vivir en ellos, podemos dejar nuestros carros en la calle aun abiertos, los bancos ya no necesitan vigilancia porque los atracos, los hurtos y los robos son cosas del pasado, de los secuestros ni hablar; extorsiones, vacunas, sicariatos, homicidios, crímenes pasionales, violencia contra la mujer y toda esa lista fatal que según ellos existía porque estábamos en Revolución, desaparecieron como por arte de magia, es decir la felicidad nos embarga de tal manera que de todas partes del mundo vienen a ver el milagro que estos magos del poder han logrado para hacer que todos los males desparezcan como por encanto. No hay forma de criticar sus gestiones porque con ellos la corrupción, es un simple recuerdo, las comisiones en los contratos, nada que ver, la colocación de dineros públicos en los bancos para enriquecerse con los intereses, imposible, el sobreprecio en las compras nunca, es decir el cielo en la tierra. Basura acumulada en la calle, ¡qué va!, huecos en la vías, ¿cuándo y dónde?, ¿cortes de electricidad?, jamás; mejor dicho tacitas de oro pues, y entonces ante tanta evidencia de idoneidad, capacidad, honestidad y gerencia, tuvimos los revolucionarios que quitarnos el sombrero o la gorra y olvidamos el referéndum revocatorio y más bien preparamos nuestros hombros para con estos genios sobre ellos, pasear las plazas Bolívar, rindiéndole culto a su innegable éxito como gobernantes.- Sonó el despertador, eran las seis de la mañana de un día del 2009, el sueño se acabó, sonó el teléfono y era mi vecina para decirme que se le habían metido los ladrones, volví a la realidad, todo había empeorado.-
Más ridículos, imposible
Esta oposición no termina de ser ridícula y demostrar su incompetencia para por si sola expresar su resistencia a cualquier acción de la REVOLUCION, por ello tiene que recurrir fuera de nuestro país a pedir refuerzos, para que unos cuantos carcamanes, neoliberales, con mucha plata y por lo tanto, sin sentimientos a favor de los pobres y excluidos durante siglos por los gobiernos que ellos adoran, esta oposición, que tiembla de terror ante el panorama que se vislumbra en su futuro de no estar en capacidad de contar con un líder que pueda oponérsele al Comandante, esta oposición que con su actitud al oponerse al la enmienda está demostrando que está derrotada antes de la contienda, definitivamente es una vergüenza ante propios y extraños.
En el país más democrático del mundo, en donde el pueblo es protagonista, lo que ha quedado demostrado en 14 elecciones en las que éste ha decidido, en el país donde no existen presos políticos y si políticos presos por crímenes comprobados; en el país en el que la libertad de expresión está garantizada para ambas partes, gobierno y oposición tenemos la gran falla de contar con un sector irracional, violento, tarifado, envenenado que se cree con derecho a que se haga lo que a ellos les conviene y no lo que el pueblo ordene en respuesta a las consultas que se le hacen con una frecuencia sin parangón en ninguna parte del mundo; hablan de falta de democracia pero a sabiendas de que la democracia es el gobierno de las mayorías, desconocen esas mayorías que le han mantenido su apoyo al Presidente y a su mensaje. En fin tenemos como un castigo diabólico, porque divino no puede ser, a venezolanos agrupados en una oposición sin un ápice de lógica democrática, que a sabiendas de que mienten cuando se oponen, con argumentos falaces a algo tan legal como lo previsto en la constitución, que permite por tres vías enmendar uno de sus artículos. Pero como diría el filósofo: de todo hay en la Viña del Señor y queramos o no vamos a tener que cargar con ese karma y dejar que chillen, pataleen, pujen, viajen a buscar reales para conspirar hasta que por fuerza comprendan que aquí quien manda es la mayoría del pueblo y que si algún día ellos lograran tener esa mayoría pues que entonces hagan lo que les venga en gana, eso si dentro de la Constitución y las leyes, no de otra manera, por lo que deberían preocuparse para buscar esa mayoría en lugar de estar amenazando con acciones de calle y violencia como la que hemos tenido que soportar con frecuencia por parte de las hordas de desadaptados con que cuenta la vergonzosa oposición que aquí soportamos.-