Jueves, 28 de febrero de 2002
Conozco a Gastón Parra Luzardo, desde hace más de 20 años, cuando allá en los lejanos 70 era Decano al mismo tiempo que mi profesor de Economía Petrolera en la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad del Zulia, como él suele llamar – de manera enfática y puntual- a nuestra facultad.
Lo conocí de una de las mejores maneras que uno puede conocer a alguien, como un maestro, porque el profesor Gastón es un maestro por encima de todo. Si alguna vez en mi vida académica he recibido una clase magistral, no me queda ninguna duda de que me la dio este profesor.
Desde esa época, ya era un economista reconocido en el mundo de los hidrocarburos en el ámbito nacional e internacional, por haber desarrollado su obra con " fundamento conceptual y rigor científico" . Por ello, me satisface tanto su designación como nuevo presidente de PDVSA, porque no me queda ninguna duda que ha sido una decisión acertada. Pocos venezolanos están tan formados en esta área como Gastón Parra Luzardo. Ha dedicado toda una vida a la investigación, la docencia y la divulgación del tema petrolero. Segura estoy que tal como lo ha hecho a lo largo de su vida, se entregara en cuerpo y alma al cumplimiento de esta nueva responsabilidad.
Enumero- brevemente- para quienes no lo conozcan su trayectoria: profesor jubilado de LUZ, donde además de Decano de la FCES fue vicerrector académico, y fundador del Centro Experimental de Estudios Latinoamericanos (CEELA). Formó parte, en 1974, de la Comisión Presidencial de Reversión Petrolera Hasta hace poco fue vicepresidente del BCV. Ha publicado más de 10 libros sobre el tema petrolero, la economía venezolana en general, la universidad y la integración latinoamericana. De igual modo, ha colaborado en la producción de otros libros relacionados con estos y otros tópicos, tanto en el país como en el exterior. Militante por muchos años del Movimiento al Socialismo.
Más allá de esta enumeración de sus meritos académicos, está mi vivencia como su alumna, donde además de enseñarnos aspectos fundamentales de nuestro principal recurso natural, nos dio la lección pedagógica de una vida dedicada al estudio y a la defensa de nuestro principal recurso natural, así como a la lucha por un país independiente y autosostenido. Nos enseñó que la economía debe ser por sobre todas las cosas, una ciencia guiada por la búsqueda del bienestar para el hombre.
Conocedor como pocos de los costos operativos reales de PDVSA, sostiene la tesis que ha defendido toda su vida y que anima su quehacer intelectual y profesional: es necesario reivindicar la propiedad y control de la industria petrolera por parte del estado venezolano por oposición al intento de desnacionalización que vivió años atrás (y que algunos añoran) ante las presiones ejercidas por los monopolios trasnacionales. PDVSA- insiste con vehemencia- debe convertirse en lo que siempre ha estado llamada a ser: una empresa que impulse el desarrollo del país, mediante la defensa de los precios del petróleo y al servicio de los legítimos intereses nacionales. Y como contrapartida de esto, la necesidad de reforzar el papel de la OPEP.
En el Zulia, en especial sus alumnos, recibimos como un justo reconocimiento a su trayectoria, esta designación a la presidencia de nuestra principal empresa, por ello, afirmo con toda la fuerza que me da mi voz, que los venezolanos podemos sentirnos seguros si al frente de PDVSA, está un hombre con la formación, la ética y el compromiso de Gastón Parra Luzardo.
