MODESTA REFLEXIÓN A 10 AÑOS DE REVOLUCION
Desde ayer hay alegría, hay música, eventos, deporte, exposiciones que muestran los logros de una obra incomparable, que registran realizaciones inocultables, irrefutables, así los medios comerciales lo nieguen ex profeso; se siente en el ambiente un aire de esperanza, de fe, ya no estamos como antaño, cuando aquello que llaman la IV República o el pacto de Puntofijo, que duró cuarenta años y nos mantuvo como una colonia de esclavos al servicio de los amos del Norte, después de haber llenado de ilusiones al pueblo, con el cuento de que con el advenimiento de la democracia (¿?) todos los males y los sufrimientos se iban a terminar, lo cual fue una mentira tan grande que en lugar de traer felicidad trajo muerte, desapariciones, persecución implacable, menor calidad de vida, aumento de los índices de mortalidad, proliferación del analfabetismo y las enfermedades, abandono de la salud, caída en picada de la escolaridad y consiguiente aumento de la deserción; se apartaron a un lado los valores que poco a poco fueron sustituidos por antivalores hasta el punto de que ni siquiera en las aulas se intentaba aportarle ingredientes morales a la formación de los educandos, es decir era un país del dejar hacer, dejar pasar; mientras muy desde dentro surgían como un volcán hechos, hombres y doctrinas que quienes nos gobernaban quisieron desterrar y que fueron retomadas con inusitada fuerza del pensamiento del Genio de América, quien dejó todo dicho en su legado, para terminar su obra interrumpida por la traición, y poder insurgir con sus banderas un 2 de febrero hace diez años nomás, fecha que celebramos hoy con júbilo pero con una ejecutoria tan positiva, tan maravillosa y tangible que sólo mentes desquiciadas, como las que en esta misma época existen y no son otra cosa que los herederos de aquellos que frustraron la obra del Libertador, se atreven a negarlo a sabiendas de que van a quedar como redomados mentirosos, porque aquí no hay un pueblo ciego sino consciente de que tiene una garantía, que no es otra que una voluntad política y una entrega, solo comparable con la del héroe que nos inspira, para esta vez completar su obra y en ello como lo afirma frecuentemente nuestro líder, “aun a costa de nuestra vida”.
Hoy la oportunidad ha de ser propicia también para hacer un alto en el camino, para reflexionar, hacer un balance de lo que hemos dejado de hacer o de lo que hubiésemos podido hacer y no hicimos y que es sin duda lo que le sirve al enemigo para maximizarlo, tergiversarlo, manipularlo y así poderse mantener, respirando su odio y frustración por lo bueno que estos 10 años le han traído a la Patria, Son nuestros errores los que le dan vida a los apátridas, fascistas y militantes del odio, sin ellos estarían acabados, entonces es muy fácil que con las armas de le eficiencia, de la honestidad, de la responsabilidad, sumadas a los valores propios del socialismo: solidaridad, equidad y amor, dejemos sin argumentos al monstruo poderoso que nos acecha y podamos, a partir de los primeros diez añitos de esta niña Revolución, comenzar una etapa en la que aprendiendo de los errores cometidos, vayamos, apurando el paso hacia la cima de la mayor suma de felicidad para nuestro pueblo. Que Dios nos permita lograrlo.-
MI PARIENTE
Es que les cuento y no me lo creen, tengo un pariente que defino como el prototipo del escualidismo, el pobre, profesional él, con una carrera que sin mucho esfuerzo, le produjo buenos dividendos, tanto como para estar disfrutando de un jugoso retiro; el tipo es a quien se podría escoger como ejemplo de la disociación provocada en unos cuatro millones y pico de venezolanos, menos mal que de ahí no pasan, por la perversa influencia de los medios que los ha afectado en tal grado que para ellos lo blanco es negro y lo negro blanco, son los que si se enteran de algún hecho positivo, de una ejecutoria del Gobierno que las hay por miles, tratan por todos los medios y de todas las maneras de desvirtuarlo, son de los que viven metidos en Internet buscando toda la boñiga que en los laboratorios de guerra sucia, se fabrica con imágenes y escritos denigrantes contra la majestad presidencial, en las que pretenden poner en duda la hombría del Comandante y de todos los jefes de estado que en Latinoamérica se identifican y toman como ejemplo la Revolución Bolivariana, son a quienes se les retuercen las vísceras cuando Venezuela frecuentemente y como nunca antes obtiene logros en el campo deportivo internacional; precisamente por estas fechas se encuentran descompuestos por la brillante actuación de nuestra selección Sub-20 y que casi se infartan cuando ven a un presidente departiendo en el campo con la selección mundialista de Softball y rodeado de glorias del béisbol venezolano de antes y de ahora, son tipejos quienes, cuando el satélite, ofrecieron hasta promesas para que todo saliera mal, es decir son la magna obra de los medios comerciales a cuya cabeza está la cloaca de Ravell, es por ello que los vemos quemando el Ávila, trancando calles, produciéndose sus propios atentados, montar shows con esperpentos como “cabeza de motor”, o el enano siniestro Ricardito Sánchez, “medio millón goico” o el “hermano monster” o los “cuatro fantástico” y para usted de contar, todos hechos a la medida para ser el típico ejemplo de la traición, a quienes la Patria les importa un bledo; ahí pues encuadro yo mi pariente, es el “non plus ultra” del descaro irreductible, para quienes así venga el mismísimo Jesucristo, o tal vez mejor para ellos, el mismísimo Satanás a decirles que están equivocados, lo niegan de tal forma y con tanta vehemencia que sería mejor enfrentarse a un perro rabioso que a cualquiera de estos especímenes.