LOS MEGAS MEDIOS internacionales celebran el acuerdo final (¿?) en donde se plasman descaradamente las decisiones del G-20 (buche y pluma nomás) que favorecen el sistema financiero internacional; los grandes culpables de la crisis económica mundial. O sea, el capitalismo. Se celebra a los países emergentes, se dice que salieron muy contentos, pero no eufóricos –le volvieron a vender los espejitos y las cuentas de colores traslucidos en puros cuentos. Según los megas medios estandarizados o encadenados, fue la primera vez en que las naciones en desarrollo lograron no sólo hacer oír su voz sino también hacer prevalecer muchos de sus puntos de vistas. La duda más importante está en ver en la práctica (los viejos valores del capitalismo remozados) si se convertirán en realidad. Ha nacido “el germen de un nuevo orden mundial", tal como lo pronosticó el anfitrión de la conferencia, el primer ministro británico Gordon Brown.
EL PRESIDENTE DEL BRASIL no se le arrugará el traje frente al documento pero se siente muy feliz de aflojarle los reales al Fondo Monetario Internacional. Se levanta el Banco Mundial de sus cenizas traducidas en quiebra y se fortalece la Organización Mundial del Comercio (OMC). Se continúa con los auxilios a los entes financieros (ya se han tragado unos cuantos billoncitos) y lo único que sacó el mundo de todo esto, fue la promesa de un mayor control; cuestión esta, que el capitalismo pronto se pasará por el forro, y terminará haciendo lo que bien le viene en gana. Felices y contentos celebran la tramoya con su tinglado bien montado en esa cumbre los lideres de los países de las economías más fuerte y dominantes (el grupo de los 8). Lula está muy feliz por una conquista; los 20 países reunidos aportarán 1,1 billones de dólares a los organismos financieros internacionales para restablecer el crédito internacional y ayudar a los países más necesitados. ¿Lula será tan ingenuo para tragarse tremenda pelotilla?. Al menos se adquirió el compromiso de reanudar las negociaciones de la Ronda Doha de liberalización comercial (El presidente de los EEUU se opuso en un principio pero terminó cediendo ante esta propuesta).
CRISTINA. La presidenta de argentina, cuyos
productores la tienen sudando tinta se sintió muy feliz con la retirada del
documento final del G-20, la recomendación a flexibilizar las leyes laborales: “una
medida que, según enfatizó, ha sido "nefasta" para su país”. Ambos
mandatario declararon sentirse muy a gusto “por los nuevos criterios de concesión
de créditos por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), al cual siempre
criticaron por exigirles a los países en desarrollo medidas de ajuste fiscal
que han sido "muy perjudiciales". El mandatario brasileño
disfrutó "a lo grande" la estabilidad alcanzada por su país, que
ahora se dispone a participar con un monto aún no definido en el aporte
adicional de 750.000 millones de dólares para el FMI: "Me siento muy feliz por ser
el primer presidente brasileño que le presta dinero al Fondo", afirmó,
con una sonrisa. Sorprendió a Lula la actitud humilde demostrada en
Londres por los líderes de los países industrializados (Lobos con piel de
oveja)"Esta fue la primera reunión en la que los llamados países desarrollados
estaban en igualdad de condiciones con países en desarrollo". Yo te aviso
chirulí. Hubo sus peleítas en un clima tenso que obligo a los gobernantes concluir ellos mismos la
redacción del documento final.
EL CAPITALISMO a partir de la cumbre de Londres intentara crear un nuevo desorden mundial. Ya sabemos a que atenernos. Si comparamos el borrador que el periódico Alemán Der Spiegel filtró a los medios, VEMOS EN EL DOCUMENTO FINAL un acuerdo concertado, cuyo contenido ya lo conocian los "grandes". el juego ya está decidido. Veremos quienes fueron los ganadores. Los humildes líderes encabezados por Obama, la Merkel (pura bulla) y el tramposo y farsante Sarkozy. China, Rusia, Brasil y la India se quedaron con la ganas de ver una nueva moneda que sustituya al Dólar. A llorar al promontorio. El capitalismo saco del baúl sus viejos trucos para enredar a nuevos crédulos. Gracias a dios que Venezuela le dio una patada por el trasero a los organismos como el FMI y el Banco Mundial. Que siga Chávez como va, aunque tendrá que cuidarse por aquello “de castigar a las economías de los países indisciplinados”. Chávez ha alertado sobre la “Cumbre Progresista” de Santiago que coloca en "peligro la unión sudamericana". Esta reunión de la Presidente de Chile Michelle Bachelet con el vicepresidente de Estados Unidos Joseph Biden y con el primer ministro de Londres Gordon Brown traerá cola. Ya lo veremos, las plumas fueron muchas y sólo quedará el pellejo
Antojofel@hotmail.com