La Revolución Bolivariana, se va nutriendo de todas las experiencias que le ha tocado pasar a través de estos 10 años que parecieran un siglo; en particular, las organizacionales, estos intensos años de revolución les han permitido al pueblo revolucionario constatar, en la práctica, lo que en tiempos “normales” les costaría años aprender, entre victorias y derrotas; más victorias que derrotas, lo que, en definitiva, ha consolidado el liderazgo del Comandante Presidente Hugo Chávez en el ideario popular, ganándose su plena confianza. Una experiencia bien interesante, que merece la traigamos al momento actual, fue la vivida en el año 2004, la oposición apátrida veía en el horizonte inmediato, la posibilidad mediante la convocatoria al Referendo Revocatorio, de salir del Comandante Presidente por métodos constitucionales. Ese año, se concentraron las elecciones regionales para octubre y meses antes, en agosto, mediante truculencias y trampas organizadas por la organización golpista: Súmate, la oposición apátrida había logrado quebrarle el espinazo al CNE, favoreciendo la convocatoria al Referendo Revocatorio.
El Comando Ayacucho, se había constituido en el 2003 para enfrentar los retos electorales del año siguiente, constituido –en lo fundamental- por los partidos políticos que apoyaban al proceso bolivariano en curso, era coordinado por Ismael García del partido Podemos, y cuya dirección integraron, además, los emeverristas Diosdado Cabello, Francisco Ameliach y Willian Lara y el pepetista José Albornoz. Durante la juramentación del Comando Ayacucho, el Presidente Chávez señaló: “la unidad en la diversidad, la unidad de lo más grande con lo más pequeño, la unidad de lo que se mueve hacia allá y lo que se mueve hacia acá”, refiriéndose al hecho de que el Comando Ayacucho debería colocarse al mando en el diseño de una plataforma unitaria que aglutinara a las fuerzas organizadas del proceso. El desarrollo posterior pondría en evidencia las tendencias sectarias y excluyentes de sus integrantes, quienes se repartirían las candidaturas de las venideras elecciones, de allí surgirían las gobernaciones y alcaldías de Didalco Bolívar, Ramón Martínez, Luis Acosta Carles, Gilmer Viloria, Eduardo Manuitt, Carlos Giménez, Juan Barreto, entre otros tránsfugas y malos gobernantes, que permitirían el año pasado a la oposición apátrida recuperar espacios de poder burocrático.
Pero, lo que queremos destacar de la actuación de dicho Comando, fue la forma en que manipularon la realidad para hacernos creer la imposibilidad de la oposición apátrida de convocar al Referendo Revocatorio Presidencial. La realidad se impuso sobre la manipulación que intentó hacerle este cogollo interpartidista, y el oposicionismo logró su objetivo de convocar al Referendo Revocatorio Presidencial, el Comando ofreció que lograrían por lo menos 300 mil firmas excluidas durante los reparos y la tendencia numérica expuesta por el Consejo Nacional Electoral no alcanza las 100 mil rúbricas, como evidencia de su fracaso organizacional. El descontento se hizo generalizado en las filas revolucionarias y al Comandante Presidente no le quedó otra que destruir este frente antirrevolucionario y reconstituir las fuerzas revolucionarias convocando a la constitución del Comando Maisanta, para enfrentar las tentativas de la reacción pro imperialista que pretendió destituirlo mediante el mecanismo constitucional del referendo revocatorio.
Pero, por qué recordamos al Comando Ayacucho y sus mentiras?
El Comandante Presidente Hugo Chávez, como reseña Aporrea el pasado 1º de agosto, nos convoca a reconstituir el Psuv, “En un primer contacto telefónico al Estado Guárico, y posteriormente a Anzoátegui, donde se realizaban algunas de estas Asambleas, exhortó a los militantes a tener claro en cuál patrulla parroquial estará cada uno antes que termine el día. "Y a comenzar patrullar...", dijo, recordando que el PSUV se está reestructurando con el Poder Popular, desde abajo, desde las entrañas del pueblo, para que el propio pueblo sea el que identifique los problemas de su entorno para poder resolverlos, en conjunto con el Gobierno Bolivariano en sus distintos niveles”. Esta reorganización, se hace según advierte el Comandante Presidente en momentos que: "La batalla va a arreciar, y los gorilas vuelven a apuntar sus cañones hacia Venezuela. Pido más fortalecimiento. El PSUV debe demoler todos los ataques de la oligarquía apátrida que no tiene vergüenza alguna para alinearse con la oligarquía colombiana y aplaude las bases militares que el imperio instala en Colombia". Las causales de dicha convocatoria son más que justificadas, ante un Psuv desgastado y sin actividad consuetudinaria, limitado a dar ruedas de prensa cada lunes de la semana, se hacía más que evidente la importancia de dicha convocatoria, para enfrentar el avance imperialista.
La realidad fue que, pese a lo expresado por el Comando Ayacucho de nuevo tipo, la convocatoria no tuvo la efectividad que creíamos iba a tener, dada la coyuntura actual. Las cifras expresadas por el Coordinador de Organización del Psuv, Jorge Rodríguez, según leemos en la página web: www.psuv.org.ve, “ABN.- Con la movilización de unos cinco millones de militantes el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) logró instalar el pasado 1 de agosto un total de 1.556 asambleas en las 1.132 parroquias que existen a nivel nacional durante la primera jornada de conformación de las patrullas socialistas. La información la suministró Jorge Rodríguez, coordinador de Organización del PSUV, quien afirmó que el número de asambleas realizadas constituyen un 94,6% de la meta fijada por el partido”. Añadiendo más adelante la nota: “Expresó Rodríguez: "Con orgullo anuncio que no hubo un rincón de la patria donde no se movilizara la militancia del PSUV para efectuar estas asambleas socialistas".
Si como dice el Comandante Presidente Hugo Chávez, parafraseando a Pitágoras, "Dios habla por las matemáticas", el solo hecho de que se hayan movilizado 5 millones de camaradas y no cerca de 7 millones (5 millones 700 mil se inscribieron, en la primera oportunidad, y cerca de 1,5 millones nuevos en el recenso realizado en mayo de este año), la pregunta clave sería que pasó con esos cerca de 2 millones de inscritos en el Psuv (28%) que no participaron, cuáles son sus motivaciones?, pero sigamos razonando matemáticamente, si se realizaron 1.556 asambleas y demos por cierto que participaron 5 millones de militantes, entonces, en términos promedios, dichas asambleas contaron con la participación de 3213 militantes cada una, nos preguntamos: por qué VTV no mostró dichas asambleas masivas, sino solo vistas cerradas en pequeños salones? Algo no nos cuadra sobre el evento realizado la semana pasada, las cifras no cuadran, camarada Jorge Rodríguez, no repita la experiencia del Comando Ayacucho, el momento político exige que nos hablen claro y raspado, no oculte la realidad, que no es otra que: la desmotivación de la militancia. Esta actitud, no permitirá que ahondemos en sus causas y podamos revertir esta tendencia que comienza a manifestarse en desmedro de la causa revolucionaria. El aislamiento de la militancia de la vida partidista, solo permitiría que se consoliden tendencias burocráticas y cogollos autosuficientes, apropiándose del Psuv, propiciando su aislamiento de los sectores populares y revolucionarios, es la repetición de la experiencia soviética, por nombrar solo alguna. Con lo cual se condenaría la Revolución Bolivariana al fracaso.
Esta nueva convocatoria de este fin de semana, no puede ser una repetición de la semana pasada, la militancia no puede dejarle el camino abierto a los burócratas fracasados, que han perdido batallas y cedidos espacios a la contrarrevolución apátrida, los espacios de la revolución no podemos cederlos a quienes desde fuera y desde dentro del Psuv, juegan al fracaso de la Revolución Socialista, mediatizándola con reformas seudosocialistas o puros discursos alejados de una práctica verdaderamente revolucionaria. No permitamos que ello ocurra, el momento es de participación activa y consecuente con el objetivo socialista.
Caracas, 5 de agosto de 2009
henryesc@yahoo.es