El pueblo soberano es un simbolo politico absoluto de la democracia

El nivel que tiene cada concepto depende de su profundidad conceptual, que es dada por la variabilidad de las variables que la integran. A medida que la variabilidad disminuya, el concepto se hace más profundo y más verdadero. En el caso el concepto “Pueblo Soberano” y según la escala jerárquica del concepto, actualmente se usan el concepto absoluto, y el concepto especifico, olvidando el concepto general. Es decir; se presentan diferentes niveles entre ideología y la realidad sensible. Al considerar los niveles de conceptos extremos, es ilógico pensar que la realidad sensible triunfa sobre la absoluta. Lo que indica que es menester hacer una discusión profunda sobre el simbolismo político de la democracia.

El Pueblo Soberano le da carácter absoluto a la democracia, por lo tanto se puede inferir que la democracia es la única forma de gobierno posible, es el valor supremo al que debe someterse toda la vida social y política. Es indiscutible, aún para el que intenta formular alguna objeción por la sencilla razón de que algo se ha dejado de lado por algún intelectual o político de renombre. Frente a esto, surge el concepto de la realidad sensible de la democracia, no es suficiente como un gobierno del pueblo o de

todos, garantice un gobierno recto y ser ejercido con justicia. Un gobierno del pueblo o de todos puede ser recto o puede admitir desviaciones y hasta podrá ser ejercido injustamente. Un gobierno del pueblo o de todos no es un valor absoluto, sino que puede un régimen político contingente puede ser bien o mal ejercido. Por lo tanto, es menester un ejercicio de unidad, donde opositores y gobierno, recojan los frutos que cada uno merezca.

Para entender y comprender el significado político del Pueblo Soberano. No hay forma política que se puede adosar a un absoluto político, con los conocimientos que actualmente se tiene. Aunque la política requiere un símbolo absoluto, es apena un corolario (proposición que no necesita ser comprobada) que el ser humana enfrenta con la realidad. El objeto del símbolo político consiste en proyectar su punto de vista de una realidad incondicionada que revela la realidad sensible política como condicionada. La democracia no puede abandonar la exigencia de un absoluto político, si ocurre lo contrario se puede transformar la realidad sensible en incondicionada. Esto nos lleva a inferir que el concepto de la Democracia, como todos los conceptos, a medida que se profundice mayor serán los conocimientos verdaderos e incrementa su nivel, hacia un concepto general, hasta que se corra el velo de lo absoluto y se pueda entrar en el mundo real o mundo de la metafísica y como un fin último, la verdad.

El pueblo soberano es el símbolo político de la Democracia porque su trabajo consiste en evitar el ordenamiento empírico de la sociedad con un carácter incondicionado, que es la tarea simbólica de la libertad. El orden social de la realidad sensible consigue una libertad plena por medio el gobierno del Pueblo Soberano. Cumple con la racionalidad política en general, desligándose del absolutismo y del absolutismo del símbolo, por la ausencia de conocimientos para comprenderlo.

Aunamos esfuerzos para incrementar el nivel del concepto Poder Soberano y de Democracia, porque a medida que nos acerquemos al concepto general, en esa medida surgirá un espíritu unitario con la necesidad de nuevos conocimientos para entender y comprender el mundo metafísico, con sentido racional. A medida que las diferencias nos enfrente en lucha fraticidas en esa medida quedaríamos indefenso para enfrentar las nuevas realidades por el mal manejo de los recursos que el Supremo nos ha legado para administrarlo con espíritu de escasez, para que de esa manera alcance para todos los pobres del mundo.


Elaborado por: (*) Ing.Esp.
basilioalezama@gmail.com


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Basilio A Lezama Mata (*)


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