En cuba, unas mojigatas vestidas como fantasmas diabólicos, mantenidas por dólares foráneos, se dedican a accionar para alimentar la maquinaria propagandista imperial. Esas personas son parte de la disociación sicótica intelectual, a los que el aparataje propagandísticos deshumanizador capitalista, les han lavado lo que tenían de cerebro, los ha convertido en autómatas que se obsesionan por dinero y bienes materiales insulsos. Allí están en las calles de la Habana, delante de las cámaras de televisión y de fotografías, sirviendo de títeres para tratar de destruir al sistema político y social más justo del planeta, pero lo que hay detrás de éllas, es un aparataje criminal, que quiere dar a traste con la revolución cubana, para producir una mortandad que acompañará el mayor despojo que la población cubana ha sufrido después de la invasión española colonialista. Pese a eso, ninguna de sus prendas de vestir o calzar bien caros, adquiridos con dinero proveniente del departamento de estado gringo, o los servicios de inteligencia del sionismo yanqui, ha sido tocado por el sistema de seguridad Cubano, solo el mismo pueblo en honorable gesta, les ha enfrentado y les desenmascara. Contra esa realidad palpable, los medios de comunicación embusteros, distorsionan la verdad y la presentan totalmente distinta. Afortunadamente la opinión publica mundial no sesgada, descubre lo que ocurre ciertamente y no cae en la trampa. Pero lo que si han logrado los farsantes mediáticos y sus instrumentos de colores pálidos, es despertar una oleada gigantesca de solidaridad, apoyo y reconocimiento hacia el pueblo Cubano y su gobierno, de un pueblo, que pese a 50 años de guerra abierta y criminal en su contra, no han podido evitar su avance: educativo, alimenticio, medicinal, deportivo, humano, solidario, de salud. Un avance que ha servido de apoyo a otras naciones, igualmente objetivo de la arremetida Sion imperial yanqui.
La escoria y gusanera, alojada en el pozo séptico que se ha convertido a MAIMI, desde donde se alimenta todo este circo infeliz y criminal, no podrá, como no ha podido antes, arrebatarle a pueblo Cubano su derecho a ser libres de toda dominación extranjera y a construir el sistema político, social y económico que les venga en gana, pese a sus aberrantes enemigos
Esas sabandijas de traje Blanco y alma pútrida, no podrán detener el avance de la revolución Cubana. Solo son autómatas ilusionados por el engaño mediático y el egoísmo castrante. Son casos de siquiatría, de reeducación moral, de reinyección de principios éticos, de alimentación de valores de reconocimiento de la patria, la dignidad humana, el respeto a su idiosincrasia. En otras palabras: que tengan auto estima y respeto por si mismos y por sus hermanos. Afortunadamente son una escuálida mini minoría.
CUBA ES EL PUEBLO LATINOAMERICANO CARIBEÑO EN CONFRONTACION CON LA BESTIA ASESINA SIONISTA YANQUI Y SUS RATAS DE BLANCO ¡NO PASARAN!