16 de septiembre 2008. - El Presidente de Bolivia, Evo Morales, denunció que Leopoldo Fernández, el prefecto de Pando detenido el martes en la mañana, no sólo usaba a la policía nacional y la Fuerza Armada boliviana para acabar con vidas, sino que también contrataba a narcotraficantes, paramilitares y sicarios para acabar con la vida de bolivianos. Según información de inteligencia (...) Bolivia se ha convertido en un paso para el tránsito de droga de Perú hacia Brasil, por la zonas de Cobija y Pando, puntualizó Morales durante un contacto telefónico que sostuvo con el Presidente venezolano, Hugo Chávez, quien mantenía una rueda de prensa en Miraflores con medios internacionales.
El mandatario informó que el prefecto no será liberado por lo menos dentro de los próximos 90 días, según lo dictan las leyes bolivianas. Morales estaba respondiendo a la a periodista Patricia Villegas, quien trabaja para el canal multiestatal Telesur. Villegas le preguntó a Morales cómo espera que de manera concreta se pueda dar el respaldo a Bolivia y también le interrogó sobre la supuesta disposición de los prefectos a dialogar con la condición de que Leopoldo Fernández esté en libertad.
El jefe de Estado agregó que "el diálogo está abierto" y refirió que el vicepresidente boliviano adelantó algunos puntos con el prefecto de Tarija. "No tengo ningún problema en instalar el diálogo, que vengan los ocho prefectos, pero el caso del prefecto de Pando es muy grave", subrayó el jefe de Estado.
"En este momento están rodeando la Plaza Bolívar en donde piden cárcel para Leopoldo Fernández", comentó Morales quien además informó que hay movilizaciones en todo el país pidiendo juzgar a Fernández por los 25 acribillados en Pando. Sobre la masacre, el líder boliviano señaló que el video presentado en la UNASUR y difundido por Chávez desde Miraflores este martes, "es poco frente a las imágenes que tenemos".
"No se puede perdonar gente que masacra al pueblo", puntualizó Morales y denunció que los sectores opositores permanentemente, en todo momento, han buscado muertos, "han buscado que Evo Morales instruya a la Fuerza Armada frente a sus paros cívicos, a sus huelgas de hambre".
"Ellos le meten bala al pueblo", sentenció el gobernante e interpeló: "¿cómo van a pedir libertad para este señor que ha masacrado al pueblo?". Morales comentó que Fernández había organizado en el año 2000 unas "fuerzas expedicionarias", que eran inconstitucionales y que no dependían ni de la policía nacional ni de las Fuerzas Armadas.
