¿A quién le conviene más este gran desorden en la economía del país?
¿Será responsabilidad sólo del Gobierno?
¿Hay algún otro sector del país que puede beneficiarse con este ultraje al bolsillo del trabajador(a) venezolan@?
Hemos sido tanto tiempo indiferentes ante el Rentismo petrolero y ahora –que nos han sumergido en una deplorable y distorsionada situación- ¿no sabremos qué hacer? ¿Nos quedamos bloqueados?
He leído sobre todo en Facebook muchas reflexiones, lamentaciones, maldiciones, críticas, y malestares generalizados. En ocasiones he visto alguno que otro se autocritica, y a otros valorar de manera esperanzadora la coyuntura. Otros dan ideas y motivaciones. La enseñanza nos ha tocado duro por la trituradora de acontecimientos. Y más cuando la guerra ha sido desde afuera y desde adentro.
Camino por las calles y avenidas, pasando por abastos, bodegas y panaderías. Desde un principio de la aplicación de la ley de costos y precios justos veía como los comerciantes le ponían el fulano precio en la etiqueta a los productos; con exageración e inflación. Me preguntaba si quienes debían vigilar que esos precios no nos asfixiaran (los del SUNDEE) estaban claros en qué precios estaban aprobando. Nunca se ha explicado nada al respecto: ¿cuál es el análisis de costos de producción de los bienes y servicios para que la institución le dé su visto bueno?
En la cultura del consumismo que hemos practicado por años, nunca se había experimentado un aumento tan desproporcionado, desmedido y frecuente en todos los productos, bienes y servicios (aunque sí hay referentes de ellos en la 2da guerra mundial, cuando en la Alemania nazi un pan costaba miles de marcos).
Total que ahora los “amargados” opositores dicen que ese es el socialismo, el legado de Chávez, y los chavistas que se abstuvieron han sido neutralizados antes del 6D con esta distorsión económica que nos ha tocado a todas y todos. Los resultados todas y todos los lamentamos. Y fueron los que elevaron a una miserable gente a hacerse de curules en la asamblea nacional, denominada ahora y con razón adeca-burguesa, pues muchos votantes o la mayoría no sabían quiénes eran sus candidatos. Ahora saben quiénes son. Son los mismos que salen a solicitar ante la OEA la intervención a nuestro país y a despotricar de los avances en distintas materias y de los reconocimientos que a nivel mundial –incluso- hemos alcanzado como nación.
Una asamblea mayoritariamente contraria al pueblo: al opositor y al chavista. El que votó por ellos y su fulano cambio, y el que se considera voto duro de la revolución. Todos estamos sufriendo el mismo castigo de la clase pudiente apátrida.
La sociedad venezolana se ha venido transformando: buena parte ha entendido que hemos caído en una trampa, para arrodillarnos. Una vil trampa iniciada desde adentro con los bachaqueros de dólares, cupos viajeros, de gasolina y de alimentos.
Ahora vendrá una nueva temporada. Nos la tienen jurada! Se oye que grupos anárquicos se están organizando para asaltar camiones cavas, para secuestrarlos con lo que traigan (alimentos, medicinas, etc). Es probable que de nuevo intenten cerrar las calles y avenidas y bloqueen el paso de alimentos para desesperar aún más a nuestra población.
Es necesario organizarnos mejor. Ya se ha dicho que somos víctimas de una guerra económica: la guerra de los ricos que perdieron el poder hace 17 años y vienen con todo a extirpar al chavismo…en guerra avisada no muere soldado…
¿Seguiremos divididos porque tal parece que a las manos invisibles es lo que les conviene?
Y por allí dicen que sólo el pueblo salva al pueblo!
macupatra2004@yahoo.es