Los Comités Locales de Abastecimiento y producción (CLAP), son una medida (desesperada a mi modo de ver) que ha tomado el gobierno del presidente Maduro para contrarrestar la agudísima escasez de alimentos en todo el territorio nacional. Hasta aquí todo bien, todos sabemos esto, ¿pero nos hemos puesto a pensar qué se esconde detrás de esta medida?, ¿qué fue lo que obligó al gobierno a tomarla?.
Hay que señalar, en primer término, que el gobierno desde que Maduro es presidente, tiene la costumbre de ocultar los números, es decir, no publican números acerca del índice inflacionario, no sabemos tampoco cuánto se produce de cada rubro o si acaso hay producción, etc. Pues bien, cónsono con ello, el gobienro nunca ha hablado directamente acerca de merma en la producción nacional en todos o casi todos los alimentos y bienes esenciales, y precisamente es eso lo que significan los CLAP. Lo que está detrás de los CLAP, es el reconocimiento tácito de que en Venezuela no hay producción,que se acabó con el aparato productivo nacional, y que lo poco que se produce es insuficiente. Y aquí cabe resaltar las causas por las cuales no se produce -el gobierno señala una guerra económica que ni ellos saben explicar y mucho menos demostrar, salvo los ataques a la moneda por parte de Dólar Today-, ya que son varias pero se ha dicho mucho acerca de ellas fuera del gobierno, claro está.
Desde tiempos de Chávez, Venezuela cometió el error de elevar las importaciones de todo, y eso redundó en una tragedia para la producción nacional (pensando tercamente en que la bonanza petrolera no iba a acabar). En vez de invertir en nuevas fábricas, en motivar la producción nacional, en vez de crear más y mejores industrias ,en traer inversiones extranjeras, el gobierno importó por salirle más barato -a corto plazo-, e hizo uso de las expropiaciones, lo que deprimió aún más el aparato productivo patrio.
Con esta política lo que se causó -además de la ya mencionada depauperación de la industria nacional- fue un incremento vertiginoso de la corrupción, la burocracia, el clientelismo , etc, pero sobre todo el enriquecimiento de muchos dizque empresarios que recibieron dólares por millones y los sacaron del país desfalcándolo. Se calculan más de trecsientos mil millones de dólares durante todo el gobierno bolivariano en pérdidas por esos robos, sin que hasta ahora se haya logrado repatriar al país más que pequeñísimas cantidades.
Es tiempo, por la vida de todos los venezolanos, que el gobierno acepte sus errores y su fracaso en producir bienes y servicios suficientes para cumplir con las necesidades del pueblo. Hacer esto y aplicar los correctivos es lo único que puede hacer.
Entonces, ya usted sabe lo que se esconde detrás de esta política de los CLAP, que por cierto, no llegan a todo el pueblo y cuando lo hacen llegan a destiempo y cada muchos meses, sometiendo a los venezolanos a lo que ya se ha convertido en algo cercano y rallano en una hambruna, además de que sólo han servido para distribuír alimentos subsidiados y no han producido nada. Aquí la mayoría de los venezolanos sólo comen -cuando comen- una vez al día.
Esta es la realidad...
