En mis años de infancia y con mi viejo como único comunista de mi barrio era difícil enfrentar a toda una multitud de chicos que nos veían como enemigo, por el solo hecho de tener padres que no eran adecos o copeyanos. En mi barrio los copeyanos siempre fueron menos agresivos o por lo menos podrían discutir con mis viejos con cierta cordialidad. Con los hijos de los adecos era otra cosa, desde la salida de la casa hasta la llegada a la escuela era un combate a puños o a palabras, ya pasados los años de plenitud de AD comenzaron relaciones de chicos del mismo barrio. Éramos vecinos algunos de esos chicos hijos de adecos y copeyanos se volvieron chavistas, salieron del poder de los adecos, para entrar al poder de los psuvecos. Su comportamiento con el contrario con las minorías, con el que no fuera obediente era igual que el de sus padres, solo que ahora "eran y son revolucionarios" acomodaticios diría yo. Solo cambiaron la baraja y siguieron en la misma partida.
Los que señalaban antes con el dedo flamígero, si algo así como si te estuvieran expulsando del paraíso en la tierra, el dedo flamígero de los nuevos hombres y mujeres, mis contemporáneos, aquellos que te perseguían por ser comunista o por lo menos no adeco, hoy te persiguen con la misma furia de ayer (ya no por no portar el carnet de AD) ahora por no portar el mal llamado carnet de la patria, los que no tenemos, no queremos, rechazamos, aborrecemos el mentado carnet. Conocido por muchos como "carnet de la infamia" pero a quien no lo tenga se le separa, que se ensombrece, se le señala como apestado, como leprosos en la edad media, como a palestinos en su tierra por el invasor israelí, entonces van quedando las opciones de vivir en el rechazo de los que mandan, de enfrentar como en el pasado a los nuevo jerarcas del poder o huir del país.
Ojo en la izquierda o en los que se califican de izquierda vi algunos chicos que tenían su clímax político mientras gritaban "libertad para los presos amnistía general" o pegaban algún cartel con la imagen de algún detenido o perseguido, recuerdo los carteles en solidaridad con el hijo del Comandante Francisco Prada. Con el legendario comandante tuve la oportunidad de visitar Chiapas y con su hijo me une desde hace años la pasión por la imagen fotográfica, lo cierto es que padre mantuvo una valiente oposición al gobierno de Chávez y hoy al de Maduro, su hijo por el que los militantes de RUPtuRA en Valencia exigían su libertad, esos mismos chicos, que protestaban se volvieron, metamorfosearon, convirtieron en unos adalides de la fe madurista y algunos escriben textos que rayan en el llanto y en lo lacrimógeno, poniendo a un gobierno todopoderoso como víctima de quien se atreva a criticarlo, otros son patriotas cooperantes, chivatos, orejas, agentes del poder.
Y si alguno duda de esos textos lacrimógenos, descafeinados, de esos monólogos de la obediencia ciega, de la actitud acrítica, de una adulancia que espanta, leamos esto: "Qué nos toca hacer desde las bases, pues, demostrar que Nicolás Maduro es el líder y sí tiene pueblo quien lo acompaña y lo hará nuevamente Presidente para derrotar el burocratismo, la ineficiencia y al corrupción, esos terribles males que en denuncia del propio Comandante Chávez fueron definidos como el cáncer que se gesta para carcomer las entrañas revolucionarias" Gustavo C Vásquez.
Algunos de los que así escriben los conocí como censores de muestras fotográficas, o saboteadores de exposiciones. Los represores de ayer siguen siendo los represores de hoy, algunos reprimidos son sus colaboradores. Contra ellos lucho, contra ellos luchamos. Contra aquellos que apoyan la ley del odio, los juicios militares a civiles, que se prestan a la delación y a la entrega del amigo. Ya vendrán tiempos mejores, sé que reptaran hacia quien detente el poder. Son gobierneros, aparatosamente gobierneros. Son aquellos que ante la pregunta del jefe ¿Qué hora tiene señor secretario? Contestaran sin problemas ¡La que usted diga jefe¡
Notas a pie de página: Y si el PETRO marcha tan chévere, sería una maravilla que a los trabajadores se les pagara en PETROS y No en devaluados bolívares.
Me llama la atención una nota donde se anuncia que: Caracas 7 de enero de 2018. - En horas de la tarde de este viernes comisiones de la Fuerza de Acciones Especiales FAES de la PNB lograron la incautación de 16 millones de bolívares en efectivo en el mercado de Catia, cinco personas fueron detenidas por este hecho. https://www.aporrea.org/contraloria/n319333.html / Como van las cosas al parecer los trabajadores de estos lugares mercados populares van a tener la obligación de manejar un punto de venta para que no manejen efectivo y el ñame, el ocumo, la papa, la parchita y el mango lo hagan a través de transferencia o con tarjeta…