Valencia, esa ciudad donde la vida de muchos transcurre
preguntando "¿CUAL ES TU APELLIDO?" y siempre sumando a los que entran a
gobernar a la pléyade de adoradores de lo fatuo, servidores de Juan
Vicente Gómez y luego "adoradores del padre Montes de Oca", Prefectos
de Pérez Jiménez y luego Adecos de antología.
Así, los hechos hacen lo que la palabra niega.
El
caso del "Puente Morillo" es dramático, nada vale ser la primera
mayoría electoralmente hablando, sacar votos en el sur de la ciudad y
hacer "foros en el norte".
Pablo Morillo, invasor, cruel realista, sanguinario general español, conserva en la ciudad un nombre.
La España "REALISTA" desmonta estatuas de Francisco Franco, aquí en Valencia, "SALVEMOS EL PUENTE MORILLO".
¿Se
le ocurrirá a algún moscovita colocar el nombre de "III REICH" a alguna
construcción? ¿Algún Republicano Español le colocaría a una calle de su
barrio "FRANCISCO FRANCO"? Claro que no.
La calle seguirá existiendo, pero el nombre no va.
Ahora
en Valencia la de Venezuela, defendemos el nombre de MORILLO, sin pena
de ningún tipo, con espectáculos y actividades, defendiendo "RAZONES"
del hecho.
Les coloco una nota de las que aparecen en la red acerca del Mariscal Pablo Morillo:
Entre
los años 1815, 1816 y 1817 la «guerra a muerte» se extiende a la Nueva
Granada, en donde el general Pablo Morillo la ejecuta con la mayor
crueldad. Entre las numerosas víctimas de Morillo se pueden destacar el
científico Francisco José de Caldas, los estadistas neogranadinos
Camilo Torres y Manuel Rodríguez Torices y los patriotas venezolanos
Andrés Linares y Francisco José García de Hevia. A pesar de haber sido
Bolívar el autor del decreto de guerra sin cuartel, en varias ocasiones
consideró la posibilidad de la derogación de dicho instrumento. En tal
sentido, en su proclama de Ocumare del 6 de julio de 1816, expresó que:
«...La guerra a muerte que nos han hecho nuestros enemigos cesará por
nuestra parte: perdonamos a los que se rindan, aunque sean españoles.
Ningún español sufrirá la muerte fuera del campo de batalla»; lo cual
obviamente buscaba humanizar la contienda militar. Finalmente, el 26 de
noviembre de 1820 se celebró en Trujillo, en el mismo lugar donde se
proclamó la «guerra a muerte», el Tratado de Regularización de la
Guerra, el cual derogaba el decreto de 1813.
Son
cientos de sitios donde se habla de la crueldad del militar español y
nuestra "ALCALDIA BOLIVARIANA" mantiene y defiende ese nombre cargado
de oprobio y de miedo. Buscando a vuelo de pájaro, encuentro otro texto
acerca del Mariscal Morillo.
Colombia ha sido un país terriblemente afectado por el terrorismo.
El
primer acto de terrorismo a grande escala lo padecimos de España –no
como dice Chávez por la conquista española y por la colonia, que es una
de las más grandes gestas que se han cumplido en la Historia humana, el
más grande fenómeno de transculturación conocido–. Me refiero a la
época de la independencia, cuando las colonias españolas se sublevaron
y su majestad el Rey resolvió mandar un pacificador, Don Pablo Morillo.
Don
Pablo no ganó militarmente a Cartagena, sino que la ganó por el hambre.
Tomó a los supervivientes de aquella defensa heroica y los fusiló. Hoy
son los nueve mártires de Cartagena. Posteriormente siguió hacia el
interior del país y asesinó a toda una generación.
Curiosamente no
mató a un negro, ni a un indio, Don Pablo Murillo no fusiló sino
españoles o hijos de españoles, toda una generación de letrados.
Todo
ello produjo un odio radical contra todo lo que significaba España. Y
bajo ese signo del odio siguió la guerra de la Independencia que
terminó cuando Simón Bolívar –que escapó de las garras de Don Pablo
Morillo– derrotó a las tropas de ese bárbaro que fue Pablo Morillo. Ese
fue el primer gran terror .
¿Qué hacer? mantenemos la economía, MERCAL funciona, CDI para todos, pero la memoria es de teflón y nada se nos pega, la
Alcaldia de Valencia realiza actividades y concursos. Les envío una
nota de Aporrea donde se realiza un festival en "Morillo", el puente:
"Valencia: Clausura del I Simposio Nacional de Escultura
07 abr 2009.- Durante clausura del I Simposio Nacional de Escultura realizado en el municipio Valencia
del
estado Carabobo del 2 al 5 de abril en el Puente Morillo de la ciudad,
donde 20 escultores de distintas partes del país transformaron la
piedra caliza en obras culturales, la Fundación para la Cultura de la
Alcaldía Bolivariana de Valencia, otorgó la premiación del jurado y por
votación popular (571 votos) a los escultores ganadores quedando de la
siguiente manera:..."
Creo que el desconocimiento ha permitido que se cometan este tipo de incongruencias, pero el mantenerlas es un acto dramático y de flatulencia politica.
Un día, que no recuerdo cuándo, un miembro del
gobierno de la "ALCALDIA BOLIVARIANA" de Valencia me decía palabras
más, palabras menos, que el nombre de ese puente es una tradición. Otro
amigo en plena discusión comentó "tradición fue la Edad Media, pero
llegó Galileo".