El proceso de cambios profundos que se vive en Venezuela bajo el liderazgo indiscutible del presidente Hugo Chávez, a partir de 1999 ha venido avanzando a pasos agigantados en el propósito de construir un país mas igualitario, es decir con menos desigualdades sociales y económicas de las que heredamos de los gobiernos de AD y COPEI.
Los resultados políticos, económicos y sociales son incuestionables, y los indicadores que arrojan los organismos internacionales al respecto no ofrecen la menor duda, hemos dejado atrás altos índices de analfabetismo, hemos logrado universalizar el acceso gratuito a la educación y a la salud, pasando a ocupar primerísimos lugares en el continente en cuanto a matricula escolar y cobertura de salud, así como también acceso al agua potable e incluso somos el país del mundo en donde el acceso a las nuevas tecnologías está más universalizado gracias al empeño del gobierno Bolivariano.
Ahora bien, existe un plano donde los avances no se han producido con la misma velocidad: El plano cultural, y no es que no exista política cultural por parte de la revolución, lo que sucede es que lo cultural es el aspecto más complejo de las relaciones sociales en una sociedad que ha sido víctima de más de 500 años de avasallaje por parte de una casta depredadora, en principio española y posteriormente criolla.
En el plano cultural el gobierno bolivariano ha editado y distribuido gratuitamente millones de libros, se ha dado apoyo financiero y logístico al nacimiento de centenares de medios alternativos en manos de colectivos sociales organizados, se ha creado una de los espacios más importantes para el desmontaje de la cultura de dominación capitalista como es la VILLA DEL CINE, se han abierto decenas de salas de cine comunitario a lo largo y ancho del país, se ha promovido la realización de actividades artísticas en sectores apartados, nuestro gobierno impulsó la creación de un medio televisivo que confronta con éxito las grandes cadenas monopolistas de TV: TELESUR, ventana desde la cual los latinoamericanos y caribeños hemos aprendido a conocernos y a querernos como los hermanos y hermanas que somos, así mismo es notable el esfuerzo que el Ministerio de Cultura ha hecho para que nos reconozcamos como un país diverso y pluricultural.
Por primera vez tenemos una RADIO NACIONAL DE VENEZUELA que llega a todos los rincones del país, y desde hace 5 años se ha creado ACTIVA CANAL JUVENIL con una programación inteligente que logra llegarle a millones de jóvenes y adolescentes que tienen que ser atendidos por esta revolución en construcción.
Es de hacer notar que recientemente se lanzó LA RADIO DEL SUR, poderoso medio de información que llega a los 5 continentes con nuestras voces que desmienten al imperio y sus lacayos
A pesar de estos esfuerzos Venezuela sigue siendo víctima de las industrias culturales que emanan desde los centros mundiales de poder, de allí que en las grandes salas de cine comercial, nuestros jóvenes, niños , adolescentes y adultos siguen consumiendo la basura que diseña Hollywood con el consentimiento de Washington para garantizar su dominio cultural. Las llamadas industrias del entretenimiento siguen desarrollando iniciativas para poner millones de cerebros al servicio del consumismo desmesurado, eso explica el enorme crecimiento que ha tenido en Venezuela el uso de la telefonía celular, la creación de grandes centros comerciales y otras formas conexas de dominación.
El compañero Hugo Chávez, como líder tiene claro cuál es el camino, pero tristemente seguimos viendo decenas de alcaldes y alcaldesas, algunos gobernadores militantes de nuestro PSUV que insisten en reproducir consciente o inconscientemente la cultura de dominación capitalista.
En primer lugar en cada pueblo o ciudad gobernada por gente del proceso se siguen desarrollando con recursos del Estado revolucionario las tradicionales fiestas y ferias patronales, manteniendo intacta la estructura cultural que a sangre y fuego impuso la corona española , por medio de la LEY DE PATRONATO ECLESIÁSTICO, al establecer a cada pueblo o ciudad fundada por ellos un santo católico como símbolo de la supremacía de la iglesia invasora sobre las creencias religiosas de los aborígenes, con el agravante que ahora les ha dado a muchos por llamarlas FERIAS SOCIALISTAS, CARNAVALES SOCIALISTAS, PESEBRES SOCIALISTAS y otras barbaridades ideológicas que no resisten el más mínimo análisis desde la perspectiva de la destrucción del capitalismo y la construcción socialista a la que permanentemente convoca nuestro líder.
Es preciso citar a V.I. Lenin cuando afirmaba” LA REVOLUCIÓN TIENE QUE LUCHAR PERMANENTEMENTE CONTRA LA ENORME FUERZA DE LA COSTUMBRE”, esta idea tiene hoy una espectacular vigencia por cuanto en nombre de las costumbres es mucho el daño que se le hace a la transformación cultural de Venezuela mediante artilugios simplistas de los cuales se echa mano con frecuencia. Son estas “costumbres” impuestas por la dominación las que mantienen la celebración de fiestas y ferias donde se privilegia la cultura derivada de España por encima de los códigos culturales aborígenes y africanos, eso explica que nuestros alcaldes y alcaldesas promuevan con recursos públicos barbaridades de origen español como las corridas de toros, que año tras año se realizan a pesar de la racional oposición de los defensores de los derechos de los animales, para vergüenza de un proceso que persigue transformar la sociedad venezolana.
En momentos en que el presidente Chávez ha decretado la emergencia eléctrica para enfrentar la más grande sequía que se conozca en Venezuela, son muchos los compatriotas alcaldes y gobernadores que siguen derrochando miles de Kilovatios, montando ferias y fiestas donde los artistas más banales son los invitados especiales, En plena revolución CHINO Y NACHO, FRANCO Y OSCARCITO, CALLE 13, DON OMAR, TITO EL BAMBINO, OLGA TAÑÓN, y otros especímenes de la alienante industria del entretenimiento capitalista ocupan los espacios de la costosas tarimas que se instalan a lo largo y ancho del país con dinero que perfectamente puede destinarse a otros fines.
Recientemente asistimos a extraños matrimonios entre alcaldes “Bolivarianos” y empresas como EVEMPRO y SOLID SHOW, y es extraño el matrimonio por que estas empresas hacen parte del poderoso aparataje alienante de la industria que impulsa y promueve la vigencia de la cultura de dominación capitalista, esta convivencia constituye una vulgar privatización de una actividad que lejos de ser superada por la revolución en curso, es fortalecida para el retraso peligroso del imprescindible cambio cultural, este matrimonio utiliza a un selecto grupo artistas y cultores tradicionales, mientras que por otro lado privilegia “artistas y grupos” que sólo aportan basura, atraso y más confusión ideológica a las grandes mayorías populares que son el sujeto histórica de esta y cualquier revolución socialista. Son estos grupos y artistas faranduleros los que se llevan jugosas cantidades de dólares a sus arcas, los mismos dólares que el gobierno bolivariano bebe cuidar celosamente para impulsar el cambio del modelo económico capitalista.
En este marco cabe destacar la presencia de un dúo venezolano llamado “CHINO Y NACHO”, son estos unos muchachos que al igual que muchos hacen un género musical de moda llamado Reggaetón donde el irrespeto a la mujer y su condición humana son la característica principal de sus letras, sin embargo sorprendentemente estos muchachos devenidos en “estrellas” por obra y gracia de los medios privados son permanentes invitados a las actividades que realiza tanto el PSUV como decenas de Alcaldías y gobernaciones liderizadas por gente de nuestro partido. Es evidente que existe gente muy influyente en nuestro gobierno que promueve a este producto alienante que llaman CHINO Y NACHO, mientras esto sucede, los defensores de la CANCIÓN NECESARIA son excluidos permanentemente de las programaciones de estas mismas instancias gubernamentales.
Gente como LLOVIZNANDO CANTOS, GINO GONZALEZ, HANOI, LOS GUARAWAOS, SANDINO PRIMERA, DAME PA MATALA y tantos camaradas genuinos interpretes del canto consciente son arrinconados y reducidos en el mejor de los casos a condición de “telenores” en algunos actos proselitistas de carácter electoral, su música y sus mensajes se silencian para que siga reinando la banalidad y la cursilería en las emisoras, en las televisoras y en las mentes de nuestra gente.
En este sentido baste recordar el oprobioso “concierto del pueblo” realizado recientemente en LA CARLOTA presuntamente en homenaje a nuestro Alí Primera, pero que fue entregado por autoridades bolivarianas a la empresa EVEMPRO, y la cual se encargó de montar un acto bochornoso con artistas alienantes que facturaron miles de dólares, y en medio del cual los artistas revolucionarios como DAME PA MATALA fueron tratados de manera vejatoria, recordemos que adicionalmente este concierto fue transmitido en vivo por nuestro canal de todos los venezolanos, VTV.
El presidente Chávez no puede hacerlo todo, es nuestro pueblo organizado quien debe impulsar este proceso de transformación cultural, pero las compañeras y compañeros que tienen responsabilidades de gobierno en Ministerios, Alcaldías y Gobernaciones están en la obligación moral de impulsar el proceso de transformación cultural de la sociedad venezolana facilitando y promoviendo la digna participación de los valores nacionales, latinoamericanos y caribeños que impulsan la nueva cultura de solidaridad y construcción socialista.
Finalmente de lo que se trata es de seguir impulsando conscientemente la transformación cultural de Venezuela, de luchar contra la hegemonía cultural capitalista a diario, de no parar en el desmontaje del modelo cultural excluyente del capitalismo, así estaremos acompañando al compañero presidente Hugo Chávez a hacer revolución, lo demás es vulgar reformismo.