Artículo 59 CRBV: "Toda persona tiene derecho a profesar su fe religiosa y cultos y a manifestar sus creencias en privado o en público, mediante la enseñanza u otras prácticas, siempre que no se opongan a la moral, a las buenas costumbres y al orden público".
Se aplaude que el gobierno venezolano esté en la tónica de la espiritualidad y convoque a pastores y pastoras, y a musulmanes, y a judíos y cuanta religión hay en nuestro país. Lo que llama profundamente la atención es que una de las religiones Madre nunca sea convocada. África subsahariana está ausente, al parecer, de las políticas religiosas del gobierno bolivariano. Los Yoruba, y la santería, por ejemplo.
Pareciera que en el ministerio del ramo se siguen comiendo el cuento español de que eso es brujería, y ¡ojo! cuidado, porque hasta las Brujas de Salem existieron y tienen una historia de heroica resistencia en EEUU.
Olores, sabores, colores y los cuatro elementos distinguen a las religiones Subsaharianas, que pretendieron ser devastadas por los portugueses, españoles y luego por los alienados.
En las religiones de rango superior todos los sacerdotes llevan la cabeza cubierta, y se incluyen los Yoruba.
Mucho nos gustaría a quienes seguimos de cerca la impronta de esos Orishas, que también fueran convocados, con algún Babalawo al lado, los hijos del Fuego, como Shangó, que también lo es de la música, del agua del mar como Yemayá, del agua dulce y la bonanza como Oshun, de la justicia como Oggún y de la sabiduría, como Obatalá, todos bajo la égida de Orula.
Recuerdo mucho cuando Raúl Castro en una reunión de la ALBA, le dijo a Chávez: "Acá el que no tiene de Congo tiene de Carabalí" y Chávez dijo: No entiendo. Y Raúl: "Déjalo así".
Falta aprender de la Madre África, mucho y conviene no desestimar sus sistemas religiosos seguidos por millones en la América.