“Hay que estudiar mucho para saber poco”
Montesquieu…
Mirna Mas y Rubí Sposito, Titular del Juzgado Superior Civil y Contencioso Administrativo en Barcelona todavía no ha pensado en 5 años, el recurso de apelación, después de la bochornosa decisión de la jueza ‘escuálida’ de primera instancia de El Tigre, que se jubiló después de decidir en mi contra en una forma aberrante como jueza opositora. Todavía estoy con la paciencia de Job, esperando que la Dra. Rubí Sposito tome una decisión ajustada a derecho sobre el Expediente Nº BP02-R-2008-00546, y que ha convertido mi vida en un calvario, además de batallar con un cáncer, cuestión judicial esta que no había querido sacarla a la luz publica, pero las circunstancias me han obligado a hacerlo. Este Tribunal donde hace carrera profesional esta jueza, parece carecer de valores y principios, y no puede inscribirse en la lista de las jueces más indestacadas del país, donde están los que continuamente violan todos los derechos de la ciudadanía cuando se retardan sus procesos.
En cinco años es injusto que este engavetado dicho expediente en este tribunal, en espera de una decisión. El suscrito al parecer sufre el ensañamiento de un sistema de justicia que le niega el derecho al debido proceso, por el único delito al parecer es ser militante del proceso revolucionario que lideriza Hugo Chávez, y ser columnista de opinión en www.aporrear.org y en varios diarios regionales del Estado Anzoátegui.
Este es uno de los casos más emblemáticos de violación a los derechos civiles, y procesales de un militante revolucionario, por parte de una de las instituciones del Estado, mi caso es uno de los miles de procesos que duermen el sueño de lo justos en los Tribunales de La Republica, y que llevan años engavetados esperando por justicia, así como yo, son muchas las personas desesperadas que claman por justicia.
En Venezuela parece “no existir la verdadera justicia civil”: “El retardo procesal, y la no resolución de los recursos en tiempo oportuno, la irregular prolongación de los procesos, junto a la violación sistemática de los lapsos, constituyen el cuadro más evidente del atropello recurrente de los derechos humanos del pueblo venezolano, cuando se solicita justicia.
Como Analista Político considero que los derechos ciudadanos, consagrados en la Constitución Bolivariana de la Republica de Venezuela, entran en el terreno de los mitos. El derecho al debido proceso debe ser inviolable, pero los retardos en los procesos, están a la orden del día, bajo la figura del perverso o negligente conocimiento del derecho.
Un proceso de este tipo no debería durar más de un año, y este va ya para los 10 años, un mecanismo perverso que se ha implantado, al parecer por la ineficiencia de las instituciones, y el desconocimiento del derecho por partes de los jueces al momento de dictar sentencias. Con todo y esto el venezolano, ante el despelote judicial por parte de ciertos jueces de la República aun no ha perdido la confianza en sus instituciones, porque la justicia debe funcionar, como dice lo asentado en el articulo 2 de la CRBV, como un eficaz instrumento de aplicación de la justicia, y no de un peligro inminente para el ciudadano, por el bien de la libertad, de su seguridad social, y de la propia vida.
Como defensor, y muchas de las veces critico, y autocritico de la revolución bolivariana, creo que el Poder Judicial venezolano por su forma autónoma e independiente, no puede ser convertido en una utopía judicial. La designación de jueces debe estar condicionada por su capacidad de administrar justicias.
La justicia civil Dra. Luisa Estela Morales, no debe estar asentada en códigos del siglo XIX en los sustantivo, y en procesos interminables, la justicia no puede ser un parapeto lento, costoso e ineficiente. En espera de que este caso sea decidido lo más pronto posible, y ajustado a derecho, para no seguirlo ventilándolo en los medios de comunicación, espero se haga justicia lo mas pronto posible.
Percasita11@yahoo.es
