Imposible que el Gobierno nacional pida con estos líderes opositores sin escrúpulos no politizar la repudiable pérdida de la talentosa actriz Mónica Spear y la de su esposo, el irlandés Berry Thomas Henry, en presencia de su hijo de cinco años también herido a tiros.
Menos cuando observamos que personas como Henrique Capriles Radonski tan pronto conoció la noticia lamentó por Twitter el asesinato de la pareja, y no perdió tiempo en hacer un llamado al presidente Nicolás Maduro, para supuestamente unirse en un sólo bloque en contra de la inseguridad.
Tal petición por parte de un político serio tiene mucho asidero, es más, se le agradece, estoy seguro que cualquiera le tomaría la palabra, ¡pero en boca de este dirigente de Primero Justicia! ¡Por Dios! Se le olvida que en Venezuela lo conocemos de sobra, que se trata del mismo hombre que asaltó la embajada de Cuba sin importarle la presencia de mujeres y niños, y luego por un llamado de arrechera que hizo molesto al perder ante Maduro las elecciones en Abril del año pasado, se desencadenaron en el país brutales y sangrientos disturbios que dejaron varias muertes de personas inocentes.
De modo que la petición del excandidato presidencial no es más que una burla, una falta de respeto en contra de la familia de la destacada actriz y de la población venezolana en general, el cual conoce bien de sus reiterados hechos de violencia.
El asesinato de Spear verdaderamente merece el rechazo colectivo, más cuanto sabemos que hablamos de una mujer joven, inteligente, emprendedora, que además de reina de belleza llevaba una carrera ascendente en el mundo de la actuación.
Pero hay que decir en alusión a las palabras oportunistas de Capriles en la red del pajarito, que la muerte de la actriz y su esposo duelen tanto como las del 15-A, las del Golpe de Estado del 11 y 12 de Abril de 2002 y de todos los venezolanos que lamentablemente pierden la vida a manos de un hampa desatada, que le late en la cueva al Gobierno revolucionario.
No me queda más que pedir para finalizar, en primer lugar, a la justicia que aplique todo el peso de la ley a estos y todos los asesinos y, en segundo lugar, a los opositores que después que transcurra un año no vayan estar pidiendo amnistía para criminales.
