Nada es casual, el asilo de Carmona en Colombia después del golpe de estado contra nuestro líder Supremo, el movimiento de empresas transnacionales que operaban en nuestro Pais hacia allá, así como el movimiento de capitales golondrinas que fortalecieron el peso en detrimento de nuestro Bolívar y los viajes frecuentes de los "lideres" mercenarios de oposición ya que Álvaro Uribe y la oligarquía colombiana, ejercen la jefatura de la extrema derecha que opera en nuestro País.
En nuestra historia reciente están presentes los recuerdos del "viernes negro" y "el caracazo".
Dos tiempos y el mismo espacio para la aplicación de medidas económicas impuestas por el FMI y el BM con el único fin de preservar el bolsillo de la oligarquía "infiltrada" en nuestro País (y digo infiltrada, porque les queda grande llamarla Nacional) y los compromisos con las corporaciones del imperio.
De allí la lógica neoliberal de privatizarlo todo, legalizar la relación laboral en condiciones de semiesclavitud, la deuda eterna y la reducción de nuestro sagrado suelo a la condición de productores de materia prima.
Todo esto lo hacían basados en la naturaleza del sistema capitalista donde "una minoría acumula capital económico sobre el infortunio de las mayorías".
También es oportuno recordar que en aquella época, la especulación y el acaparamiento fue un arma de la oligarquía para meterle presión al gobierno de turno para obtener dólares preferenciales, créditos que nunca pagaban y liberación de precios, al final los gobiernos blandengues cedían en alguna "mesa de diálogo nacional".
Esto es lo que ellos quieren hacer desde que llego nuestro Comandante eterno al gobierno.
Del tránsito de la 4ta hacia la 5ta tenemos la sistemática ola de conspiraciones: golpe, guarimbas, paro petrolero, guerra económica y todas las consecuencias que derivan en la especulación y el acaparamiento de Todo.
Tienen un rato largo creando las condiciones objetivas y subjetivas para desatar un "caracazo antichavista", en alianza con la extrema derecha colombiana encontraron el camino corto pero les falló un detalle, el pueblo de Venezuela esta y estamos arrechos por la especulación, el acaparamiento, pero más arrechos todavía por la impunidad.
El 12 de febrero desataron toda una ofensiva foquista con el fin de sacarle provecho al capital político que les genera el tema de la especulación y el acaparamiento, creado por ellos para culpar al gobierno, detrás del teatro no hay otra cosa que el inicio del camino insurreccional que iniciaron grupos de la extrema derecha con la justificación irracional de que hay que cambiar el gobierno por otra vía que no sea la electoral.
Me llama poderosamente la atención la idea de que estos actos de violencia hayan sido “una cortina de humo” para movilizar y montar clandestinamente los grupos de asalto que tienen un rato largo entrenando en Miami y Colombia, mientras los cuerpos de seguridad e inteligencia del Estado estaban ocupados del suceso.
Otra lectura del asunto es que, la nueva aventura fascista nos obliga a redoblar el esfuerzo organizativo, profundizar la revolución y colocar bajo estricta vigilancia revolucionaria las consecuencias derivadas de la guerra económica; la distribución de alimentos y medicamentos a precios regulados y subsidiados, así como los repuestos automotrices y materiales de construcción afectados por la guerra económica.
Las medidas económicas adoptadas por la revolución bolivariana no tienen comparación con las aplicadas en otrora y en otros Países del planeta, porque los gobiernos de la 4ta y la ultraderecha internacional “PRIVILEGIAN” la protección de los dueños del capital y las empresas, mientras la revolución Chavista PRIVILEGIA la protección del pueblo, en esto radica la diferencia y es la razón por la cual no lograron el objetivo de incendiar el País con un caracazo antichavista que nuevamente fracasó…
Igual que el paro petrolero, este golpe de estado también se les fue de las manos.