Si murmurar la verdad aún puede ser la justicia de los débiles, la calumnia no puede ser otra cosa que la venganza de los cobardes. Jacinto Benavente…
El nuevo Ombudsman o defensor del pueblo Tarek William Saab: ¿será un defensor incómodo e implacable con las autoridades que utilizan el poder para abusar de sus gobernados? Y que han convertido el ejercicio del poder en una actividad económica, y de privilegios para sus intereses.
Tarek, con quien fui solidario en su gestión cuando fue gobernador de Anzoátegui, creo dándole el beneficio de la duda no será contrario, ni opositor a las leyes del Estado venezolano, pero sí debe estar alerta, vigilante, con mucha sensibilidad humana, amplitud de criterios, y vocación de servicio ante los atropellos, y comprometido por la calle del medio en una lucha contra la impunidad, y la desigualdad en la aplicación de la justicia.
Como nuevo titular de este organismo defensor asume el cargo bajo circunstancias excepcionales ya que los derechos humanos en Venezuela atraviesan un periodo de crisis, y se requieren acciones urgentes, y efectivas para responder a los cientos de reclamos de justicia, legalidad y respeto a la dignidad humana.
El principal objetivo de su gestión debe ser la pronta atención a las víctimas de violaciones a sus derechos humanos, y el liquidar definitivamente la impunidad.
Como servidor público debe evitar que su nombramiento como ombudsman se politice, sino estará frito.
Sobre los actuales presos políticos, el ombudsman debe emitir una opinión imparcial ajustada a derecho, ya que debido a las manipulaciones de personeros del gobierno y de la oposición, como venezolanos, son casos que nos da vergüenza y nos agravia a todos, y que está obligado a llegar al fondo de la verdad sobre esos juicios. Los abusos de autoridad deben ser investigados y sancionados con todo rigor, Venezuela ante esta escalada inflacionaria, especulativa y de escasez requiere unión, y anteponer el interés colectivo a la violencia, la ilegalidad y el abuso.
El Ombudsman es un concepto de la lengua sueca que no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE). El término se utiliza como equivalente a Defensor del Pueblo, un cargo público que existe en muchos países. En Venezuela son parte del Capítulo IV del Poder Ciudadano: artículos, 280, 281, 282 y 283.
El Ombudsman es el responsable de controlar que los derechos de los ciudadanos no sean atropellados por el Estado. Su misión por mandato constitucional es garantizar el respeto de los derechos de cada ciudadano en el marco de cualquier tipo de acción judicial, administrativa, o de cualquier otra índole.
Por lo tanto, su función es defender los derechos de las personas y, a su vez, velar que los funcionarios del gobierno no violen estas libertades, y el resguardo de sus derechos.