En su artículo del pasado domingo 27/09 en el diario Últimas Noticias, bajo el título “El poder de la autoestima”, la señora Cuenca, quien fue profesora de ética en la Escuela de Comunicación en la UCV, previo a una muy resumida explicación de lo que significa la auto estima, dejando ver en ese escrito de marras, “sin querer queriendo”, que la suya es altísima, con lanza en ristre pero haciendo hasta lo indecible para intentar no comprometerse y evitar ser llevada a la justicia por denigrar de la Jueza que condenó a Leopoldo López a más de 13 años de cárcel, consigna sus ataques bajo un esquema de interrogantes que hasta el más lerdo de los mortales advierte que en ellos lo que hay es una ataque frontal contra la dignidad, la moral y la ética de la referida magistrada.
Basta con leer lo que esta señora Cuenca escribe en su nota, para concluir que, efectivamente, allí lo que vemos es un certero y bestial ataque a la Dra. Susana Barreiros, pues más allá de que, como hemos dicho, recurre a preguntas sazonadas y con piquete al revés, sin percatarse que en texto seguido delata su aviesa intención de ultrajar a la dama jueza, pues allí le da respuesta a su rosario de preguntas en términos muy claros y concisos, en donde concluye que ese juicio fue toda una trampa.
Veamos las preguntas que ella se formula: “¿Esta persona (se refiere a la Jueza Barreiro) tiene un mínimo de lo que hemos considerado autoestima? y continúa, “Al tener consciencia de su valía, de su dignidad, de su integridad, ¿habría aceptado hacer lo que hizo? Por unos dólares, un exilio con dinero, habría ¿“vendido” su dignidad, su futuro, su profesión?”
Leamos ahora lo que, sin duda, son las respuestas a sus preguntas: “Tomen en cuenta: no probaron nada, los videos demuestran que Leopoldo llamaba a la lucha pacífica, la especialista en lenguaje, no encontró nada particular en su discurso que lo imputara. Los testigos del gobierno, porque no permitieron que los de Leopoldo hablaran, no lo pudieron incriminar…”
Dejamos aquí nuestra opinión sobre este nuevo bodrio de un personaje que, lo repetimos tanto como lo podamos hacer, optó por denigrar de su larga vida como activista revolucionaria y alistarse en la acera contraria para seguir en la política, como se hace patente en sus artículos de prensa, pero que, al parecer, no le ha resultado nada fácil ganarse la confianza de sus nuevos socios de la oposición, los que, como es del conocimiento general, le hacen la guerra al gobierno Bolivariano desde la violencia y el terror neofascista con miras a su derrocamiento por cualquier vía, tal y como se ha hecho evidente en sus casi diez y seis años de estar en el poder.
Ciertamente, los "salta talanquera", para no utilizar el calificativo apropiado, por lo general, les resulta cuesta arriba que se les crea y para ello hacen hasta lo indecible para lograrlo, como, por ejemplo, mentir tanto como les sea posible y de manera persistente…